Local

Sevilla ama a Sevilla

La colombiana Sevilla, uno de los 33 lugares de los cinco continentes (a cual más insólito) que comparten ese nombre, inicia un proceso de hermanamiento con la capital de Andalucía.

el 13 oct 2014 / 08:00 h.

TAGS:

UNESCO Vista aérea de la ciudad vallecaucana de Sevilla, en Colombia, municipio cafetero del que sobresale la aguja de la iglesia de San Luis Gonzaga. / El Correo En su blog Viajando en auto, Juan Cruz la retrata así: En medio de un valle, entre montañas, plantaciones de plátano y café se encuentra Sevilla, Valle.Un pequeño pueblo. Entre sus calles con almacenes antiguos y bares se encuentra en una esquina el tradicional Café Casablanca. Donde se escuchan tangos durante todo el día y la noche, que suenan en un viejo tocadiscos. Con una gran colección de discos de pasta, en los que se encuentran todos los tangos que se puedan pedir en infinitas versiones. El bar esta decorado con fotos y cuadros de Gardel y todo lo alusivo a esta tradicional música. Durante la noche llegan parejas que bailan, mientras jóvenes y adultos disfrutan de un tinto o un vino, las puertas del bar están siempre abiertas, hasta algún perro que pasa por ahí es bienvenido. Es una de las muchas impresiones y visiones posibles de la hospitalaria, sencilla, humilde, campesina, soñadora y entusiasta Sevilla colombiana. Una localidad que comparte con la capital de Andalucía y con otras 31 ciudades más un nombre que de momento, y contra las aspiraciones de su alcalde, Rafael Andrés Quintero Ceballos, todavía no ha servido para forjar una fraternidad de las ciudades llamadas Sevilla, que se extienden por los cinco continentes: Nortamérica, Sudáfrica, Filipinas, Australia... Hace un par de semanas, a través de este periódico, el municipio vallecaucano hizo pública su voluntad de proceder a un acercamiento con la Sevilla andaluza. La única respuesta dada hasta ahora por parte de la municipalidad hispalense ha sido el silencio. 16266294 El alcalde de Sevilla (Colombia), Rafael Andrés Quintero Ceballos. Pero el alcalde de la Sevilla colombiana no pierde la esperanza. Las gestiones de aproximación, emprendidas en nombre del municipio por su principal gestor cultural, Mario Alberto Agudelo Estrada –incombustible director de la Fundación Comando de los Sueños–, incluyen la paciencia. En una carta remitida a El Correo, la primera autoridad de aquella Sevilla, el alcalde Quintero, expresa sus esperanzas en el proceso recién emprendido «en pro del hermanamiento de nuestras amadas sevillas» y califica el planteamiento de establecer un vínculo permanente entre las 33 localidades que comparten ese nombre por todo el globo, sugerida por este periódico, como «muy acertado y visionario». A la espera de lo que decida contestar el equipo de gobierno de Juan Ignacio Zoido, tan públicamente como lo ha hecho su homólogo colombiano, Quintero añade: «Por intermedio del señor Mario Agudelo, director de la Fundación Comando de los Sueños, he tenido conocimiento de los avances en relación con el tema, dicha organización se encuentra articulada a los procesos de desarrollo local; por tal motivo me permito manifestar que tomo con gran aprecio la iniciativa y gestiones ad honorem que adelanta y pueda desarrollar en aras de fortalecer los vínculos entre la Alcaldía de Sevilla España, las autoridades competentes y nuestro municipio. De mi parte y en calidad de alcalde estoy interesado en afianzar los lazos de hermandad». La televisión local de aquella ciudad ha recogido también la propuesta. Y a este lado del Atlántico, la de El Correo no es la única voz que se ha sumado a la propuesta de acercamiento:desde el mundo del arte, las creadoras sevillanas Belén García y María Isabel Mateos han elaborado un proyecto de intercambio cultural entre ambas ciudades bajo el nombre de Sevillas. La materia prima de ese proyecto son las fotografías, pero el objetivo va más allá de una mera exposición de vistas. «Nuestra intención», explican, «es mostrar, independientemente de la distancia geográfica y más allá de los tópicos, que dos ciudades con una misma denominación comparten no solo la lengua, sino la sencillez de lo cotidiano y el día a día de la gente que las habita. Es decir, que podamos extraer la esencia actual de las dos ciudades y plasmarlo todo en forma de archivo fotográfico-documental. A partir de las aportaciones de cada individuo participante en el proyecto, de sus visiones personales, de sus modos de vida y recursos propios así como desde sus peculiaridades sociales y culturales». La idea de estas dos artistas sevillanas es componer una exposición en ambas ciudades que se complemente con un ciclo de conferencias y actividades culturales. ¿Por qué habría de ser importante una ocurrencia así? Pues, para ellas, la respuesta está en la necesidad imperiosa de las personas por conocernos unas a otras. «Que desde los ámbitos artísticos y culturales promovamos el interés de las personas por conocer otros grupos sociales y otras culturas para aprender todos de todos, para enriquecernos, para ser más abiertos y solidarios. En definitiva, para hacernos todos mejores personas». Y así, mientras el alcalde Quintero prepara una carta para el alcalde Zoido, la Sevilla del colombiano, bananero, cofradiero (que esa es otra, como ya ha contado abundantemente este periódico) y cafetero Valle del Cauca aguarda desde las paradisíacas lomas por las que se extiende su modesto perfil, que ahora precisamente, en 2014, ha cumplido cien años bajo su denominación actual. Son 42.000 vecinos que añadir a la población de sevillanos del planeta, aún por calcular y pendiente de alguien que quiera abanderar la creación de esa red de ciudades llamadas Sevilla. 33 Sevillas El pueblo donde García Márquez descubrió Macondo, la roca sudafricana con pinturas rupestres tres veces más antiguas que las pirámides de Egipto, el suburbio bodeguero de la capital de Australia, el lugar de Filipinas donde Sebastián Elcano tomó el relevo del pobre Magallanes, un trocito de la bahía donde nació Bob Marley..., y, naturalmente, la capital de Andalucía.Todos estos lugares, hasta un total de 33 repartidos por los cinco continentes, comparten el nombre de Sevilla. Y como alguien se tenía que dar cuenta de esto y emprender el camino hacia el encuentro, han sido los habitantes de la Sevilla del Valle del Cauca, el paraíso cafetero de Colombia, los primeros en decir que quieren ser hermanos de la metrópoli hispalense.

  • 1