No hace ni una semana que se hizo pública la noticia y en Triana parece que 2018 se lleva esperando toda una vida. Se sueña con una Madrugá en la que el reloj parezca no avanzar y en la que la nave de Triana surque las calles de su barrio con su capitana al mando. No hay duda. 2018 será el año de Triana y el de su Esperanza.
La Santa Sede concedió a la hermandad de la calle Pureza el Año Jubilar por el VI centenario de la fundación de la hermandad de la Esperanza. 600 años de devoción. Por eso, la corporación ha propuesto que su titular mariana salga en procesión extraordinaria. ¿El objetivo? «Realzar la conmemoración».
Todavía falta su aprobación por la autoridad eclesiástica pero todos la dan por hecho. De ser así, Sevilla viviría un acontecimiento histórico, con una de sus mayores devociones en la calle. Solo las salidas, en 2016, del Gran Poder, o las de 2014 de la Macarena serían comparables a esta. La última vez que la Esperanza de Triana salió de manera extraordinaria fue en 2009 por el XXV aniversario de su coronación canónica.
Para Triana, que su Virgen salga a la calle siempre es motivo de celebración, pero si esta salida viene respaldada por el reconocimiento del Papa a la hermandad, más aún. Por eso, todos aquellos que ven en los ojos de la Esperanza el reflejo de la mirada de la Madre de Dios ya sueñan con el momento de encontrarse con ella en una procesión en la que toda Sevilla podrá disfrutar de ella.
Aún no se conoce nada de lo que será esa procesión extraordinaria. De hecho, aún no está confirmada. No obstante, todos hacemos cábalas. ¿La procesión será en Triana o saldrá de su barrio? ¿Se trasladará a la Catedral? ¿Saldrá de noche o de día? Cada cual tiene sus preferencias y opiniones.
En cuanto al cuando, lo más probable es que la procesión se celebre a finales de octubre. Tenemos que tener en cuenta que para 2018 también está prevista la coronación canónica de la Virgen de la Victoria de la hermandad de Las Cigarreras por lo que ambas hermandades tendrían que coordinarse en este sentido porque el mes de octubre también es el más probable para que se produzca este acto.
Sea como fuere, lo cierto es que de cumplirse las previsiones se colmarían los anhelos de un barrio que bebe los vientos por su Esperanza. Triana ya soñaba con su Año Jubilar pero si este termina con la salida de su mayor devoción, la satisfacción es plena. Ahora, hay que esperar la respuesta de Palacio. De ser afirmativa, la maquinaria comenzaría a funcionar de inmediato porque en poco más de un año, la Esperanza de Triana se pondría en la calle bajo su paso de palio sin ser Semana Santa ni Madrugá.