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Personas en una oficina de empleo. / Efe
El secretario general de CCOO de Sevilla, Alfonso Vidán, ha avisado este viernes de que los datos oficiales en materia de empleo reflejan que la “precariedad” y la temporalidad laboral se están asentando en la provincia, donde el 44 por ciento de los asalariados cobra sólo el salario mínimo interprofesional. Además, opina que la gestión de Juan Espadas (PSOE) como alcalde de Sevilla “no está respondiendo a las expectativas” y ha rechazado la rebaja planteada para el impuesto de bienes inmuebles (IBI), a cuenta de sus efectos colaterales en las familias “más desfavorecidas”.
En rueda de prensa, Vidán ha analizado la situación laboral y socioeconómica de la provincia, realizando además un balance de la gestión del gobierno del socialista Juan Espadas como alcalde de la ciudad hispalense.
Durante su intervención, ha esgrimido datos de la encuesta de población activa (EPA) y de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio, para avisar de que pese a los mensajes de “recuperación” económica, la EPA más reciente, correspondiente al pasado mes de julio, reflejaba aún una tasa de paro del 24,76 por ciento en la provincia de Sevilla. En ese sentido, ha avisado además de que la diferencia interanual entre la EPA del segundo trimestre de 2017 y la del segundo trimestre de 2016 arroja 21.600 parados menos a día de hoy, una bajada del desempleo “menor” a la registrada entre 2016 y 2015, cuando la caída del paro fue de 28.200 personas.
Así, ha insistido en que con este ritmo de reducción del desempleo, Sevilla necesitará “siete años” para recuperar los niveles de empleo previos a la devastadora crisis comenzada hace ya casi diez años. Del mismo modo, ha avisado de que la “brecha de género” ha crecido un “0,7 por ciento” durante los últimos 12 meses y la tasa de paro ya es “9,95 puntos superior a la de los hombres” en la provincia de Sevilla.
CONTRATOS DE SOLO UNA SEMANA
Remitiéndose además a los datos de contratación del pasado mes de agosto, ha avisado de que el 95,41 por ciento de los contratos firmados ese mes en la provincia de Sevilla fueron temporales. Es más, ha señalado que el 22,4 por ciento de tales contratos tuvieron una duración “igual o inferior” a una semana. Del mismo modo, ha alertado de que según los datos oficiales, “el 42 por ciento de las personas en paro en la provincia ya no tiene derecho a ningún tipo de prestación”.
También en materia de contratación, ha señalado que según los datos oficiales, “la hostelería es la actividad económica que más empleo genera en Sevilla, seguida por la agricultura y la ganadería, la construcción, las actividades administrativas y la industria manufacturera”. En paralelo, ha expuesto que “el 44 por ciento de los asalariados de Sevilla gana el salario mínimo interprofesional (SMI) o menos del mismo y prácticamente el 30 por ciento de los trabajadores no llega a ganar ni 2.000 euros al año”.
Respecto al Gobierno local de Juan Espadas, que ya ha superado el ecuador de su mandato, Vidán ha considerado que “no está respondiendo a las expectativas que generó ni a las necesidades de una ciudad que se encuentra en una grave situación”. “Sevilla carece todavía de un proyecto compartido de ciudad”, ha aseverado, opinando que Espadas “está dejando el empleo en la ciudad a merced del boom turístico, sin exigir a los empresarios garantías de creación de puestos de trabajo o un mínimo de calidad en la contratación”.
CASI IGUAL QUE ZOIDO
En el plano urbanístico, el líder provincial de CCOO ha considerado que la política del socialista Juan Espadas “no se diferencia mucho” de la de su antecesor en la Alcaldía, el popular Juan Ignacio Zoido, pues “seguimos asistiendo a subastas de operaciones urbanísticas y a la dejadez y la falta de iniciativa en lugares tan significativos como la antigua fábrica de Altadis”.
Señalando además el supuesto “deterioro” de los servicios municipales, Vidán se ha opuesto a la bajada del tres por ciento planteada para 2018 en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), merced al acuerdo del Gobierno local socialista y Ciudadanos para la aprobación de los vigentes presupuestos municipales. Y es que a su juicio, se trata de una medida que acabará repercutiendo en “los sectores más desfavorecidos de la ciudad”, al ser posiblemente compensada con incrementos en las tasas del agua o la basura.