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Zona donde irá colocada la biciestación en San Bernardo. / Jesús Barrera -
Recreación de cómo quedará el edificio. / El Correo -
Imagen del proyecto contemplado. / Ayuntamiento de Sevilla -
Imagen de la zona en la que se levantará la estación. / Ayuntamiento de Sevilla
San Bernardo acaricia ya su biciestación, ese aparcamiento de ciclos seguro con el que espera contar uno de los nudos intermodales más importantes de la ciudad.
Para ello, el Ayuntamiento de Sevilla acaba de sacar a licitación el contrato para la construcción de este contenedor, que ha visto retrasados sus plazos al requerir más especificaciones técnicas. Y es que éste será el primer parking de este tipo con el que cuente la capital hispalense. En concreto, el espacio permitirá el aparcamiento a doble altura de unos 250 ciclos y cuenta con un presupuesto de licitación de 150.000 euros –más IVA– y un plazo de cuatro meses de obras, por lo que, si la tramitación sigue su curso normalmente, debería arrancar y terminar este mismo año.
La biciestación estará situada en el lugar que ahora ocupan unas pérgolas de sombra, que serán trasladadas a la zona sur de este edificio.
Se localizará junto a la estación de Cercanías, el Metro y las paradas de tranvía, bus y taxi –además de estar en una zona con varias universidades–, con la intención de potenciar el uso de la bicicleta privada en la ciudad y la intermodalidad. Y es que, si de algo se quejan los ciclistas de Sevilla es de la falta de aparcamientos seguros en la capital hispalense, algo que ha propiciado el descenso del número de usuarios de la bici en los últimos años. Así, esta biciestación pretende servir de revulsivo para mejorar la movilidad ciclista y atender la demanda de los ciudadanos con un espacio próximo a otros transportes públicos, seguro y con tarifa integrada, pues desde Urbanismo se plantean dar algún tipo de ventaja tarifaria a los usuarios que empleen los servicios de la biciestación y utilicen de manera habitual el resto de los servicios de transporte público. Igualmente, servirá como proyecto piloto para la instalación posterior de espacios similares en los principales nodos de transporte intermodal.
El nuevo aparcamiento ciclista, que cuenta con el visto bueno de Patrimonio, será un edificio modular de unos 200 metros cuadrados, desarrollado en una planta. Tendrá una estructura tubular, desmontable, compuesta por tubos rectangulares de acero corten, que se fabricará previamente en un taller. El exterior tendrá un panel de acero corten que se unirá por un núcleo de poliuretano expandido. La cubierta tendrá inclinación para el correcto vertido de aguas. Las carpinterías exteriores (puertas y ventanas) estarán dotadas de un sistema de seguridad anti intrusión.
En su interior se colocará el sistema de aparcabicicletas holandés, con capacidad para 250 ciclos. Éste consiste en la ubicación de un soporte superior que tiene una guía extraíble y abatible, para facilitar la colocación y extracción de la bicicleta en el nivel superior.
Además, el nuevo aparcamiento de bicicletas contará con vegetación. El espacio tendrá en la fachada sur y la cubierta tendrán una malla de cables tensados de acero que servirá de guía para el desarrollo de la especie vegetal que se disponga.
La construcción de este primer aparcamiento seguro para bicis se realizará en cuatro meses y por fases, pues, además de la construcción de los módulos en taller, será necesario el traslado de la pérgola y la adecuación del terreno de manera previa a su colocación y dotación de suministros.
El nuevo espacio vendrá a sumarse a los diversos aparcabicis que el Consistorio está ubicando en los distintos distritos de la ciudad.