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Un numeroso grupo de estudiantes de la UPO se agolpa en el expositor de Bricomart. / Manuel Gómez -
Unos se interesan, otros siguen más a lo suyo. / Manuel Gómez
«De verdad, de aquí van a salir contrataciones. De hecho, estamos pegando un repaso a los currículos», explica Felipe. Y lo cierto es que en el stand de Price Waterhouse Coopers (PwC) están aprovechando el bajón de estudiantes de la hora de comer para mirar con atención los perfiles de quienes se han acercado hasta ellos.
PwC es una de las empresas que ha aprovechado la opción de acudir a la Feria de Empleo y Emprendimiento de la Universidad Pablo de Olavide 2017, que se desarrolló en la galería central del campus el lunes y el martes. Hasta el 19, el domingo próximo, estará activa la feria virtual.
Responsables en parte del buen funcionamiento de la feria son Juan y Daniel, estudiantes de Derecho que trabajan en la organización y andan «de aquí para allá desde el lunes». El martes, por suerte, «está todo más controlado», entre otras cosas porque el día es mucho más agradable y no tienen que andar colocando estufas, que fue su labor más trabajosa el desapacible lunes. Puede sorprender que dos estudiantes le dediquen tiempo a estas labores, pero Juan lo aclara. «Hombre, básicamente es por la experiencia, porque nos dan tres créditos, y dinerete», explica, y los dos se ríen. «Hay que decirlo todo», concede Daniel. Aseguran también que aprovechan para informarse, porque son varias las empresas que buscan perfiles relacionados con el grado en Derecho. Una ganancia, se mire por donde se mire.
Una pequeña cola espera su turno en el stand de Acesur, clásico referente del sector oleícola. Los tres siguientes alumnos tiene motivaciones distintas. A uno le cuadra la empresa, y ve cerca el fin de su grado. Su acompañante lo tiene menos claro: estudia Traducción, y no ha visto todavía nada que se aproxime mucho a lo que estudia. Aún así, se acerca y pregunta.
A unos metros, sonrientes, esperan en el expositor de OVB, una asesoría financiera que no siempre encuentra lo que busca.
–Hola, ¿en qué curso estás?
–En segundo.
–Bueno, pues... para el año que viene.
Manuel, consultor financiero, tiene un discurso muy crítico con lo que está viendo: «La gente, lo que quiere es un trabajo de funcionario y de ocho y a tres». Nada que ofrezca OVB, por lo visto. «Por supuesto que no», insiste Manuel, que se atreve a cuantificar ese deseo de ser funcionario en «un 90 por ciento de lo que ves aquí. Como dijo Banderas: cuando un americano sale de la universidad, le preguntas y te dice: ‘Quiero ser emprendedor’. Aquí quieren ser funcionarios. No hay más». Nada que ver con la idea más o menos generalizada de que los jóvenes españoles, en general, andan poco menos que locos por emprender. O por ser empresarios, que es como se hubiera dicho hasta hace pocos años.
Discrepan en el Ayuntamiento de Dos Hermanas, que se presenta en la Olavide con su XIII Concurso de Proyectos Empresariales. Cuenta Njela que su finalidad es apoyar a quienes tienen «una idea de empresa innovadora y quieren emprender». «Como está la cosa, hay mucha personas que han optado por emprender y están saliendo adelante muchas empresas», aclara. El primer premio es de 5.000 apetecibles euros, y no es el único.
A todo esto, la universidad sigue con su ritmo habitual. Con 20 grados y un cielo despejado, no todos se interesan por la feria. «Los que acaban de empezar la carrera no se paran», ratifica Njela. Ya se pararán, el año próximo. O el siguiente.
Más de 60 empresas y novedades para este año
La Feria Universitaria es un encuentro anual cuyo principal objetivo es fomentar el empleo y el emprendimiento entre los jóvenes universitarios, al tiempo que un lugar de intercambio de capital humano, de formación y de innovación donde más de sesenta empresas y entidades de diferentes ámbitos se dan cita para presentar sus planes de carrera, ofertas de trabajo y prácticas a los estudiantes. Entre las novedades de este año, destacan las entrevistas de selección en inglés en un tiempo limitado (jobs dating), el concurso de video-curriculums y la batalla de Elevator Pitch, a través del cual los estudiantes de la UPO se retarán para vender su idea de negocio en menos de tres minutos.