Debate de la ¿inmovilidad?

Los vecinos de Los Remedios le ponen «el prefijo ‘in’» cada vez que toca hablar de movilidad en el barrio. Su queja no se fundamenta tanto en la circulación de la calles o posibles cambios de sentido, como en el estado «deficitario» que, insisten, presentan un gran número de vías principales, con el potencial riesgo de caídas y tropezones para el transeúnte. También señalan «el problema crónico» de falta de aparcamiento y otras cuestiones relacionadas con el trazado del carril bici –en la avenida Flota de India– que se acometió durante el gobierno de coalición de PSOE-IU en el último mandato de Alfredo Sánchez Monteseirín. Un debate ciudadano al que también se suman nuevas propuestas de peatonalizaciones por parte de este gobierno municipal.

La punta del iceberg se vive cada primavera durante la semana de farolillos. Su proximidad con el recinto ferial le hace partícipe del plan especial de tráfico que se implanta para facilitar los accesos a la ciudad efímera de los farolillos y casetas. Ello ocasiona la restricción de la circulación a vehículos de servicios públicos y residentes en los entornos de Los Remedios, Rubén Darío y Tablada; cortes totales o parciales de circulación en la calle Remeros y las avenidas de Juan Pablo II y Alfredo Kraus; y modificaciones en los sentidos de más de una decena de vías principales de toda la zona. «Muchos optan por irse fuera esos días o no salir de casa», comentan los residentes afectados. Este año, además como novedad, se ha activado el corte total para la barriada de Tablada, alterando los accesos por Alfonso de Orleáns y Borbón desde Juan Pablo II, por Barberán y Collar desde Juan Pablo II y por García Morato desde la Carretera de la Esclusa.

Otro debate es la peatonalización. La experiencia de Asunción despierta ciertas reticencias vecinales ante nuevas conquistas para el peatonal. «La obra de Asunción se nos atragantó por su duración y molestias: polvo, ruidos, barro, corte de tráfico... Está claro que ha tenido sus ventajas y sus inconvenientes». Como bueno, destacan la reducción del ruido y de contaminación del tráfico, pero, como malo, señalan la amenaza de «más veladores» y, por consiguiente, problemas de convivencia vecinal al aumentar los decibelios por las noches. «Son 40 metros de local y 400 veladores, cifras desproporcionadas que producen un jaleo enorme». La situación requiere, a petición de los vecinos, de un control continuo para no excederse en números. Entre los principales beneficiarios, ponen a «los mayores del barrio». «A falta de espacios públicos cerrados para ellos, les ha venido muy bien los bancos, para sentarse, no nos confundamos; instalados a lo largo del casi kilómetro de la calle». Eso sí, advierten que «soportando temperaturas de todo tipo y rayos solares, especialmente en estos meses veraniegos de extremo calor».

En este sentido, se muestran cautos con el anuncio de micropeatonalización del entorno más próximo a la plaza de abastos de Los Remedios. Para los placeros, sin embargo, es un aspecto «fundamental». Tanto que lo llevan reclamando años. «Ganar este espacio va a hacer que los vecinos, que son en su mayoría gente mayor, se encuentre con más seguridad a la hora de venir a comprar», ha detallado el presidente de la plaza Manuel Mula.

Con un presupuesto de 90.000 euros, el Ayuntamiento peatonalizará parcialmente «antes de que acabe el año» la calle Pedro Pérez Fernández, en el tramo que queda justo delante del mercado de Los Remedios, entre las calles virgen de Luján y Madre Rafols, acondicionándose como una plataforma única con la que se mejorará la accesibilidad y la seguridad peatonal de quienes acceden a la plaza. El espacio que se cree como resultado será «una plaza pública» en la que está prevista la plantación de nuevo arbolado y la colocación de nuevo mobiliario urbano, «con bancos y bicicleteros». La actuación supondrá cambios en el tráfico de la zona y la pérdida de cinco aparcamientos.