Bernardo Montoya, autor confeso del crimen de Laura Luelmo, y en prisión preventiva en Morón de la Frontera por el asesinato de la joven profesora en El Campillo (Huelva), ha pedido al Servicio Andaluz de Empleo (SAE) que le pague su prestación por desempleo.
En una carta que hoy adelanta el diario Viva Huelva, Montoya recuerda al SAE su obligación de abonarle la prestación por desempleo que le corresponde, y que no ha podido sellar su tarjeta, precisamente, por estar preso.
La carta la envió el pasado 30 de enero, y en ella dice que “no estoy condenado, sólo estoy en prisión preventiva a la espera de juicio”
En ella, Montoya relata que no pudo ir a sellar el 23 de enero a la oficina del SAE de Nerva por encontrarse en prisión preventiva en el centro penitenciario de Morón de la Frontera (Sevilla), y pide que le suspendan la demanda de empleo, la solicitud necesaria para cobrar su prestación.
Montoya cobraba el paro desde su salida de prisión del pasado mes de octubre, dos meses antes de la muerte de Laura Luelmo en El Campillo, pero para ello necesita tener su tarjeta de empleo funcional, algo que no ha podido hacer desde su entrada en la prisión de Huelva el 20 de diciembre, mientras que ocho días después después fue trasladado a la cárcel de Morón.
Dos folios repletos de faltas de ortografía
El asesino de la joven maestra ha enviado una carta de dos páginas y cargada de faltas de ortografía al SAE de Nerva. En el escrito que publica el rotativo onubense asegura que necesita cobrar el paro “para pagar a mi abogado y salir lo antes posible” de la cárcel, añadiendo que “no estoy condenado, sólo estoy en prisión preventiva a la espera de juicio”, así que “no puedo personarme para sellar”.
Montoya indica en la carta que él “estaba cobrando su prestación por desempleo los días 10 de cada mes en su cuenta bancaria tras realizar las gestiones pertinentes el 20 de noviembre del pasado año. Permaneció durante 21 años entre rejas pero ha conseguido tener una prestación por sus trabajos dentro de prisión”.
Con un “cordial saludo” y su firma termina una misiva que ha tenido una primera respuesta. El Servicio Andaluz de Empleo pidió al centro penitenciario Sevilla II de Morón de la Frontera un certificado de permanencia de Bernardo Montoya, que ya ha sido enviado por la dirección de dicho centro penitenciario.
Una vez realizadas las gestiones por el SAE de Nerva, la tarjeta de empleo de Montoya ya ha sido suspendida, según ha podido saber el diario onubense, y ahora remitirán las incidencias al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), el organismo que afronta el pago de las ayudas por desempleo.
El autor confeso del crimen ya tiene solucionado el tema administrativo con el SAE y está a falta del visto bueno del SEPE para obtener su prestación por desempleo.
Pagar a su abogado
El objetivo de todas estas gestiones es pagar a su abogado, Miguel Rivera, para afrontar su defensa en un juicio que aún no tiene fecha. Bernardo Montoya asegura en varias ocasiones en el documento que quiere salir “lo antes posible” de la cárcel y que le pertenece la prestación porque no está condenado de ningún delito hasta la fecha, estando en prisión preventiva.
Muestra su preocupación por salir en libertad, e incluso hace varias semanas cambió su versión de los hechos, y ahora dice que no es el responsable de la muerte de la joven zamorana.