«El Estado ya trabaja en llevar el Cercanías al aeropuerto»

Tiene a su cargo multitud de tareas, incluidas las de ser el receptor de las demandas (históricas) del Gobierno central con Sevilla. En su posición, apuesta por la SE-40, el Cercanías, Tablada e incluso por el Metro... si la Junta pone primero el dinero

Iñaki Alonso @alonsopons /
20 mar 2017 / 07:59 h - Actualizado: 20 mar 2017 / 08:40 h.
"SE-40","Ricardo Gil-Toresano Riego"
  • «El Estado ya trabaja en llevar el Cercanías al aeropuerto»
  • El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Ricardo Gil-Toresano, en las inmediaciones de la Torre Norte de la Plaza de España. / Fotos: Jesús Barrera.
    El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Ricardo Gil-Toresano, en las inmediaciones de la Torre Norte de la Plaza de España. / Fotos: Jesús Barrera.
  • Gil-Toresano sustituyó en el cargo en diciembre a Felisa Panadero.
    Gil-Toresano sustituyó en el cargo en diciembre a Felisa Panadero.

Lleva casi tres meses en el cargo y aún se está haciendo a la idea del marrón que es estar al frente de la Subdelegación del Gobierno en Sevilla, donde se agolpan todas las competencias del Estado. «Hasta el Parador de Carmona es nuestro», enumera. Hereda las competencias y, de paso, Ricardo Gil-Toresano, exalcalde de Écija, también las demandas, algunas históricas, con Sevilla. No puede decir sí a todo, pero sí pintar sobre el papel las prioridades: la SE-40 y el cierre del anillo ferroviario.

—Fue llegar y empezar las quejas por robos. Torreblanca, Bellavista, Los Palacios, La Algaba,... ¿se ha conseguido contener?

—Partimos de la base de que la tasa de criminalidad bajó el año pasado. Otra cosa es la sensación de inseguridad. A veces pueden acumularse los delitos en un escaso margen de tiempo. Eso pasó en Torreblanca, con varios robos en una calle en navidades. La Guardia Civil y la Policía Nacional actuaron eficazmente. En todos los casos que me ha citado se detuvo al responsable. También daba la impresión de que, por el hecho de que el ministro del Interior fuera el exalcalde de Sevilla hubiera aumentado la sensación de inseguridad, pero en fin...

—Resulta curioso que asocie la llegada de Zoido con esa quejas por inseguridad.

—Son casualidades. Sólo doy el dato (se ríe). Cuando alguien denuncia que aumenta la seguridad le pido que sea prudente. Cuando sale un nombre de un pueblo o un barrio inseguro es malo para la zona. Se echan piedras sobre su propio tejado.

—Más allá de la sensación, faltan 500 policías en Sevilla según los sindicatos. Un déficit que no cifra pero admitió el propio ministro, ¿qué medidas hay previstas?

—La mayor medida es ampliar la oferta de plazas. Con la crisis, ha habido unas OPE en Policía Nacional y Guardia Civil cortitas, de 150-200 plazas al año. Eso ni siquiera cubría la tasa de reposición. Sin embargo, este año ya han sacado más de 2.000 plazas en España. A partir de ahora se sacarán un número similar cada año. En esa espera, se hace un sobresfuerzo con servicios extraordinarios. Pero Sevilla es una provincia bastante segura.

—Sobre este tema, la comisaría del Polígono Sur...

—Del distrito Sur.

—Sabemos la posición de vecinos y Estado,... ¿cómo se puede conciliar ambas posturas? Desde la comisionada se pidió superar los obstáculos técnicos para que se levantara en el Polígono Sur como se pactó hace años.

—En una reunión con la comisionada le dejamos claro la postura del Gobierno. Nos basamos en criterios técnicos y policiales para decidir dónde poner la comisaría. También estuvo el jefe policial de Andalucía occidental, que avaló esa ubicación. La comisionada dijo que se reuniría con los sindicatos policiales, pero ellos avalan también el lugar. Hay que seguir los criterios de los técnicos no un deseo. La misma seguridad tendrá el Polígono Sur con la comisaría dentro de sus límites que a 150 metros.

—Será difícil convencerla.

—Pero llevamos demasiados años con este tema y se corre peligro de que se esfume la inversión. Hay poco dinero y otras comisarías están deseando recibir tal inversión.

—Entre las que estaría encantada de recibir ese dinero es la comisaría de la calle Betis, ¿se le meterá mano?

—Le vendría bien un arreglito. Hace poco pasé por allí y esperemos que pronto haya dinero para que se acometa una reforma. Pero no puedo aventurar una fecha.

—Hablemos de la SE-40. Fomento avanzó que el tramo Espartinas-Almensilla abriría en primavera, ¿cómo se solventará para que sea útil, a la vista que está aislado de otros tramos ya construidos?

—Partimos de la base de que son tramos que siempre conectan carreteras radiales. Y en este también al enlazar con la autopista A-49. En todo caso, la SE-40 dará un salto importante cuando finalice el tramo entre Alcalá de Guadaíra (A-376) y Dos Hermanas (A-4). Eso permitiría llegar desde Madrid y conectar con la autopista a Cádiz y viceversa. Sabemos que hay mucho tráfico que evitaríamos que entrara en Sevilla.

—Entonces, se entiende que si hay nuevos presupuestos, este tramo recibirá la mayor apuesta en inversiones.

—Es el tramo prioritario. Y eso sin eludir el tramo más conflictivo, que es el del paso del río, del que todavía no está decidido si va a ser con un puente o con túneles.

—La empresa adjudicataria ha avisado que si se elige el puente irán a los tribunales.

—Las empresas tienen derecho a defender sus intereses, pero, en caso de que se elija la opción del puente, seguro que habría fórmulas de entendimiento. Lo importante es que la solución sea buena y se ejecute ya, porque llevamos cinco años de debate. Si se hace un puente, no pase como el del V Centenario, que se quedó pequeño al poco de abrir con el volumen de tráfico que soportaba.

—¿Qué falta para que el Estado y la Junta se pongan de acuerdo con el Metro?

—Hemos sido claros: si la Junta pone su parte, el Estado también lo hará. Hemos sido leales en este sentido. La Junta es la que no se decide. Ni siquiera sabía si tirar por la línea 2 o la línea 3.

—Ayuda un poco que el alcalde sí priorice el tramo de la línea 3 de Pino Montano al Prado de San Sebastián.

—Sí, parece que el Ayuntamiento tiene su preferencia. Pero fíjese, recuerdo que cuando estudiaba Medicina en Sevilla, estaban los túneles hechos en la Puerta Jerez. ¿Tan difícil es hacer el Metro en Sevilla? Entre los terrenos y que los poderes públicos no se ponen de acuerdo, los sevillanos carecen de un transporte prioritario.

—Y mientras, ¿qué apuesta tiene el Gobierno central en materia de movilidad?

—Ya que la Junta no hace el Metro, el Gobierno apostará seriamente por el Cercanías. Hemos empezado a estudiar con técnicos el cierre del anillo ferroviario. Sería como un Metro en superficie, que tendría, según los primeros planos, un ramal al Puerto y paradas en Palmas Altas, la zona universitaria y la Feria [Blas Infante]. También se contempla otro ramal con el aeropuerto. Parece mentira que San Pablo no esté unido por tren con la ciudad.

—¿Qué inversiones hay previstas para el aeropuerto?

—Se invertiría 50 millones en modernizar un aeropuerto que no se toca desde la Expo.

—¿Cómo van las obras de la N-IV? ¿Se desdoblará a Jerez?

—El desdoble no se hará en principio hasta Jerez, pero sí hasta Los Palacios, que es un tramo con alta siniestralidad. Eso se unirá al fin del peaje en 2019. Sabemos que no se renovará, pero aún no se sabe la alternativa.

—¿Cómo se va a poner freno a la alta siniestralidad en las carreteras de la provincia?

—Se aumentarán los radares. La velocidad, junto el poco uso del cinturón, lo cual me sorprende, es de las principales causas de siniestralidad. También se harán campañas de concienciación y se vigilarán las vías secundarias.

—¿Aceptará el Ministerio de Medio Ambiente la propuesta de Espadas sobre Tablada?

—El Estado lo ve con buenos ojos. La primera decisión de Medio Ambiente es la de cumplir la sentencia que indica que estos suelos no son privativos. La ministra es receptiva a buscar una fórmula vía convenio para ceder estos terrenos a Sevilla. El problema de Tablada es que los dueños, que son entidades financieras, lo compraron para construir y negociar con ellos. Eso será más complejo.