Espadas recurrirá a la UE para su plan para Torreblanca y Amate

El Ayuntamiento prepara un proyecto para estos barrios, de los más pobres de España, en la tercera convocatoria de Edusi. El Gobierno prevé destinar 200 millones a propuestas andaluzas

Iñaki Alonso @alonsopons /
26 jun 2017 / 06:53 h - Actualizado: 26 jun 2017 / 12:55 h.
"Urbanismo"
  • La plaza Salvador Valverde, del barrio de Torreblanca, que es uno de los barrios a los que el alcalde confía en que lleguen fondos europeos de cara a su regeneración. / Pepo Herrera
    La plaza Salvador Valverde, del barrio de Torreblanca, que es uno de los barrios a los que el alcalde confía en que lleguen fondos europeos de cara a su regeneración. / Pepo Herrera

El salvavidas de Europa para socorrer a los barrios más pobres de España. El Ayuntamiento de Sevilla volverá a llamar a las puertas de la UE para intentar levantar las zonas deprimidas de la capital, donde la renta media por familia, con datos fiables aportados por el Instituto Nacional de Estadística y publicados esta misma semana, se sitúan por los suelos. La oficina de captación de fondos europeos recibió hace tres semanas la encomienda del alcalde de Sevilla, Juan Espadas, de trabajar en un proyecto de regeneración social y urbana para Torreblanca, Amate y Tres Barrios, que concurrirá a la tercera convocatoria de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi). Una convocatoria de la que ya habla abiertamente el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, y por la que, según sus palabras, se repartirán en proyectos de desarrollo sostenible «326 millones de los que en torno a 200 podrían venir a Andalucía».

A la pesca de parte de esos 200 millones de fondos europeos se lanzará el Consistorio hispalense, sabedor de que vía Europa se allana el camino en ese objetivo, que tiene grabado a fuego por el alcalde, de «cambiar la realidad de los barrios más desfavorecidos de Sevilla».

De hecho, el recurrir a los fondos europeos para estas empresas no es una estrategia novedosa, aunque sí rentable. Durante el gobierno local del también socialista Alfredo Sánchez Monteseirín se recurrió al Plan Urban para la regeneración social del Polígono Sur. Los últimos coletazos del plan, financiado con fondos Feder, llegaron a finales de 2015, ya con Espadas en la Alcaldía. A él le correspondió hacer el balance: una inversión de 11 millones de euros que implicó acciones formativas y de empleo, la Factoría Cultural, el centro de mayores o la reurbanización de plazas y avenidas, entre otras actuaciones.

El propio Espadas, de hecho, consiguió, hace ya nueve meses, el visto bueno del Ministerio de Hacienda para recibir 15 millones procedente de las entidades comunitarias su estrategia de innovación social para las zonas Norte y Macarena. Una iniciativa que tiene como líneas estrella la reutilización de las naves de Renfe de San Jerónimo para uso cultural, una actuación para acabar con la infravivienda en la Bachillera o un plan integral para el núcleo chabolista del Vacie.

Esos fondos se obtuvieron de la primera convocatoria del Edusi, que, por ahora, ha repartido 25 millones en la provincia: los 15 millones para la zona Norte y Macarena de Sevilla, cinco millones para La Rinconada y cinco millones más para Carmona.

Sevilla, por tanto, competirá por dotar de fondos a Torreblanca y Amate. Aunque no lo tendrá fácil, dado el nivel de sus competidores. Entre los que seguro que concurrirán a esta tercera convocatoria estará la Diputación de Sevilla, que vio como ninguno de los seis proyectos presentados –cuatro en el Aljarafe, uno para la zona de Lebrija y otro para la comarca de Morón de la Frontera– prosperó, para enfado del presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, que consideró la resolución «una injusticia a nivel poblacional, ya que se excluye a más del 80 por ciento de la población sevillana». Además de la institución provincial, se quedaron a la espera los proyectos de Tomares, Écija, Mairena del Alcor, Alcalá de Guadaíra, Dos Hermanas y Utrera, que a buen seguro probarán otra vez.

De conseguirlo, supondría un espaldarazo para dos barrios cuyos ratios de pobreza encabezan los listados nacionales. Con datos de 2014, Los Pajaritos-Amate es el barrio más pobre de España, con una renta media por hogar de 12.307 euros, 300 euros menos que hace un año; mientras que Torreblanca ocupa el cuarto puesto, con sólo 14.661 euros.