Espadas: “Voy a ser el nuevo alcalde de Sevilla”

El candidato socialista a la alcaldía de Sevilla, Juan Espadas, afrontó ayer el día después con toda la seriedad, confianza y claridad del que según sus propias palabras será el próximo alcalde de la ciudad. «En unos días esa convicción que me veis, la convertiré en hechos», aseguró el alcaldable. «Solo necesitábamos la opinión de los sevillanos y a una fuerza que pierde 63.000 votos (PP) a los que los ciudadanos dan la espalda no puede gobernar la ciudad otros cuatro años. Es evidente que los ciudadanos quieren un cambio y lo que tendrán que decir ahora las otras fuerzas minoritarias es que si ese es el mensaje que han entendido o no».

Espadas, que como el resto de candidatos acabó la jornada electoral a altas horas de la madrugada, aprovechó la mañana para analizar datos, descansar de agenda y atender a medios aún a la espera del escrutinio definitivo, que llegaba al 99,75 por ciento durante la tarde. Los datos no cambiaron ni un ápice (12 concejales PP, 11 PSOE, 3 Ciudadanos, 3 Participa Sevilla y 2 IU) y su discurso tanto en la sede de los socialistas de Sevilla donde compareció a una hora torera (17.30) con su consiguiente y clásica media hora de retraso, como en la entrevista que le realizó el director de El Correo de Andalucía, Óscar Gómez, en la televisión de esta casa, tampoco lo hizo.

El socialista volvió a sus palabras de la madrugada del lunes y reiteró la idea de que «las urnas habían pedido un cambio». «Hoy es día de balance por nuestra parte, ayer lo fue por parte de los sevillanos respecto al gobierno del señor Zoido y fueron contundentes».

Para apoyar sus argumentos tiró de datos y de hemeroteca recordando las cifras que diferenciaban a ambas formaciones en 2011, «cuando los sevillanos depositaron su confianza mayoritariamente en Zoido (166.000 votos frente a 99.000 votos del PSOE como segunda fuerza política)». Y comparó los 63.000 votos perdidos por el actual alcalde y los algo más de 5.000 votos que han recuperado los socialistas de Sevilla. «Todo esto, teniendo en cuenta la aparición de nuevas fuerzas que en otros lugares han propiciado la caída de votos para el PSOE. Eso es algo que no ha sucedido en Sevilla. No solo no hemos perdido si no que se ha mejorado», aseguró.

Y es en esta alianza de la alternativa a Zoido, compuesta (y liderada) por el PSOE así como IU y las nuevas formaciones como Participa Sevilla y Ciudadanos, la que da a Espadas la convicción de que sumando todos los votos obtenidos entre ellos deben trabajar para traer una nueva etapa a la ciudad. «180.000 votantes quieren un cambio y 103.000 votantes han apoyado la continuidad del PP y ese es el balance del cambio, ese es el mandato de los sevillanos».

Para Espadas el escenario que se abre ahora, y hasta el 13 de junio, cuando está previsto que se constituyan los nuevos ayuntamientos, es el del «diálogo». «La ciudad no quiere al alcalde que hay ahora mismo, de manera muy mayoritaria y nos está mandando que nos sentemos a dialogar, discutir y a acordar un nuevo gobierno para la ciudad de Sevilla», aseguró. Un nuevo gobierno que «pasa por el acuerdo entre las fuerzas políticas» para construir una alternativa de gobierno «cuya referencia debe ser el PSOE» como partido más votado entre los que representan la alternativa a Zoido.

Para ello, el candidato socialista aseguró que en los próximos días iniciarán una ronda de contactos. Si bien, reconoció, la noche del 24 ya llamó al resto de fuerzas en liza, «para felicitarlos y saludarlos pues en breve estarán representados en el consistorio». En esto, Espadas también señaló una diferencia con el candidato popular. «Tenemos formas distintas de entender la política. Además, es curioso que quien necesitaría ponerse en comunicación para garantizar su continuidad esté esperando a que alguien lo llame, aunque no creo que nadie lo haga», afirmó en referencia a una conversación radiofónica que ambos mantuvieron durante la mañana. A media tarde, Zoido cambió de postura y anunció ronda de contactos.

Si bien, Espadas reconoció que «la artmética da para todo y si los partidos que pueden decidir cambiar apoyan a Zoido, Sevilla continuaría con cuatro años más de PP. Pero no contemplo esa opción y por lo que han anunciado estas otras fuerzas seguirán el mandato de la ciudadanía y trabajarán en la construcción de una alternativa».

Para ello, el PSOE considera que la base debe estar en su programa de gobierno «nítidamente planteado y a partir de ahí empezar a dialogar». «El mandato será de búsqueda de acuerdos y consenso», dijo. «Somos un partido que tiene talante para establecer puntos de encuentro». Se trata, en su opinión, de «introducir propuestas que permitan la gobernabilidad para que el próximo 13 de junio tengamos nuevo alcalde».

¿Y hasta qué punto va a ceder para alcanzar la Alcaldía? Aquí su postura también parece estar muy clara. «Mis líneas rojas son Sevilla. Cualquier iniciativa que se incluya tiene que ser claramente positiva para los ciudadanos», aseguró. «Tengo un programa de gobierno y un respaldo importante. Son los minoritarios los que tienen que ver si se sienten a gusto con el programa y a partir de ahí hacer propuestas para mejorarlos».

Si bien, no quiso entrar en especulaciones sobre el tipo de apoyo que buscará entre las distintas fuerzas que compondrán el nuevo Ayuntamiento hispalense. Si será un pacto para lograr el bastón de mando o se irá a una coalición de partidos. «El tipo de pacto lo deciden todos los que se sientan a negociar. Hay fuerzas que estarán dispuestas a apoyar el cambio pero a lo mejor no quieren gobernar. Yo tengo una opinión pero estaremos abiertos al diálogo con todas los demás partidos en liza que ademas, en algunos casos tendrán que consultar qué deciden sus bases por su carácter asambleario».

Preguntado por cuál será su primera preocupación de llegar a la Alcaldía, Espadas igualmente fue claro: el empleo. «Diseñar programas que vengan a frenar la desilusión y la desesperanza de quien no encuentra trabajo y demostrarles que hay oportunidades y que no está todo perdido. Tenemos que ser capaces de generar opciones y cambiar la forma de hacer las cosas desde el Ayuntamiento en este sentido».