IU alerta del «abandono absoluto» del Parque de Blancanieves

Denuncia el «aspecto desolador» de este espacio ubicado entre la avenida de la Borbolla y la Plaza de España y pide explicaciones a Espadas

11 jul 2018 / 13:03 h - Actualizado: 11 jul 2018 / 13:12 h.
"Medio ambiente"
  • Estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
    Estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
  • El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas muestra el estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
    El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas muestra el estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
  • El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas muestra el estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
    El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas muestra el estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
  •  Estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo
    Estado actual del Parque de Blancanieves. / El Correo

El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas, ha denunciado este miércoles el “absoluto abandono” en que se encuentra el parque infantil de Blancanieves, situado entre la avenida de la Borbolla y la Plaza de España, al tiempo que ha exigido al gobierno de Juan Espadas (PSOE) la recuperación y reapertura urgente de este espacio de titularidad municipal, cuyo aspecto actual es “totalmente desolador”.

Según asegura González Rojas, “basta con asomarse a la verja del parque para comprobar la falta de mantenimiento y el deterioro generalizado” que sufre este enclave, ubicado en un lugar céntrico, que es visitado a diario por muchos turistas y que lleva tiempo tomado por jaramagos, ramas caídas, desechos de todo tipo y cuyo mobiliario urbano está inutilizado o directamente destrozado.

González Rojas ha recordado que este espacio reabrió sus puertas tras una remodelación en junio de 2011 convertido en un Jardín de Colecciones Didáctico y Medioambiental, que albergaba más de 450 especies vegetales procedentes de todo el mundo, algunas de ellas autóctonas y en peligro de extinción, y contaba además con una nueva red de caminos y senderos, instalación de riego e iluminación, así como diferentes pérgolas, albercas, estanques y juegos de cerámica infantiles.