La Cabalgata del Congreso Mariano Hispano-Americano de 1929

Hace 88 años, la ciudad vivió un acontecimiento mariano sin precedentes y sin repetición: una procesión con todas las Vírgenes ligadas al descubrimiento

14 may 2017 / 08:41 h - Actualizado: 14 may 2017 / 08:41 h.
"Hemeroteca El Correo"
  • La Cabalgata del Congreso Mariano Hispano-Americano de 1929
  • <p>Cartel del Congreso Mariano </p><p>Hispano-Americano, pintado </p><p>por Francisco Hohenleiter.</p>

    Cartel del Congreso Mariano

    Hispano-Americano, pintado

    por Francisco Hohenleiter.

  • Vista aérea de la ciudad de 1929.
    Vista aérea de la ciudad de 1929.
  • Cartel que recoge toda la información sobre el I Congreso Mariano Hispano-Americano.
    Cartel que recoge toda la información sobre el I Congreso Mariano Hispano-Americano.

Los periódicos del mes de mayo de 1929 atendieron las noticias relativas a los actos celebrados con motivo del I Congreso Mariano Hispano-Americano, dentro de los fastos de la Exposición Iberoamericana celebrada aquel año.

La sesión de clausura fue presidida por el infante Carlos de Borbón en representación del rey Alfonso XIII. En el acto se leyó un mensaje especial del Papa y otros enviados por el rey y otros altos personajes del Estado y la Iglesia. Pero el gran acontecimiento fue el desfile organizado para la clausura, incorporando a la procesión a la Virgen de los Reyes, en salida extraordinaria. El reportaje gráfico que acompaña a estas líneas informa de lo espectacular del desfile, donde estuvieron representados todos los grandes personajes de España y las Américas durante el descubrimiento de 1492. Desde los Reyes Católicos a Cristóbal Colón, más múltiples representantes de la sociedad.

La procesión fue presenciada por miles de personas apostadas en el itinerario, muchas de ellas llegadas a la ciudad en la mañana del día 20 de mayo, procedentes de toda la provincia y de Madrid. Trenes, autobuses y hasta embarcaciones fueron llegando a Sevilla durante toda la jornada.

La procesión estuvo presidida por el cardenal legado. La primera imagen en salir de la catedral fue la de María Santísima de la Victoria, venerada por Magallanes. Luego iba la imagen de Nuestra Señora del Buen Aire, que dio nombre a la capital de Argentina. Seguía el simpecado de Nuestra Señora del Coral, venerada por Juan Sebastián Elcano. A continuación iba la Virgen de la Inmaculada Concepción, cuyo culto llevaron a América los religiosos franciscanos. Seguía Nuestra Señora de la Merced, donada por San Fernando a San Pedro Nolasco y venerada en la iglesia de las Mercedarias de la Asunción. Seguían el simpecado de Nuestra Señora de Rocamador y la Virgen de Guadalupe, la Virgen de la Hiniesta, el simpecado de Nuestra Señora de la Antigua, venerada por Cristóbal Colón; Nuestra Señora de la Sede, y cerraba el cortejo la imagen de Nuestra Señora de los Reyes.

Aquella jornada fue inolvidable para los miles de asistentes a la procesión y antes a los actos de la catedral. Toda Sevilla participó del evento y los resultados fueron positivos para las relaciones de las Iglesias americanas y española.