La limpieza de los grafitis de Curro Romero acaba con lío

La utilización por ‘voluntarios’ de disolvente daña más la escultura

25 nov 2015 / 18:38 h - Actualizado: 25 nov 2015 / 20:36 h.
"Patrimonio","Curro Romero"
  • La cuadrilla de voluntarios, con Moeckel junto a la escultura. / @j_moeckel
    La cuadrilla de voluntarios, con Moeckel junto a la escultura. / @j_moeckel

La Gerencia de Urbanismo ha acordado paralizar la limpieza de la escultura dedicada a Curro Romero frente a la Maestranza, que fue objeto de pintadas vandálicas que se notificaron el pasado lunes, hasta analizar los posibles daños sufridos por el monumento tras la utilización de «productos industriales inadecuados» por un grupo de personas que, encabezado por el conocido abogado Joaquín Moeckel, intentaba de forma espontánea retirar los grafitis. El informe municipal señala al respecto que, al utilizar disolventes industriales, se ha podido generar «un daño que es, si cabe, aún más grave que el vertido de pintura que se pretendía retirar y que encarece aún más la actuación presupuestada».

Los integrantes de esta brigada de voluntarios son trabajadores del despacho de abogados del propio Moeckel, muy aficionado a la tauromaquia y que ha llevado casos legales de toreros como el que enfrenta a Morante de la Puebla con un conocido activista antitaurino, tras un sonado rifirrafe este verano en plena plaza. Los autores de la iniciativa querían denunciar así lo que consideran desidia y escasa voluntad del Ayuntamiento a la hora de retirar estas pintadas vandálicas.

Desde el gobierno local se señala que se siguieron los pasos habituales: el lunes se conocieron los hechos, el martes se hizo una evaluación de los daños y se decidió la intervención y el miércoles se iban a quitar los grafitis a partir de las 10.30, momento considerado «el idóneo para dicha actuación, ya que la eficacia de los tratamientos requieren ser aplicados sobre superficies secas y libres de la humedad del rocío», según el informe. El documento refleja que cuando llegaron los técnicos encargados de la tarea «se encontraron a un grupo de personas que, subidas al monumento, estaban procediendo a su limpieza sin autorización y con productos industriales inadecuados», de lo que se dio parte tanto a la Gerencia de Urbanismo como a la Policía Local.

Desde el Ayuntamiento no se descarta incluso emprender acciones legales, ya que «la actuación denunciada se ha realizado sobre una obra con importantes valores culturales dados tanto por su autor, de reconocido prestigio en el ámbito artístico, como por su ubicación dentro de un entorno BIC». Los productos utilizados son disolventes «no recomendados en restauración debido a las consecuencias negativas que pueden ocasionar sobre las superficies» del monumento.

En concreto, se apunta a que la utilización de estos productos comerciales «pueden provocar en el bronce la pérdida de las pátinas y una reacción química que conlleve la corrosión por presencia de cloruros». Por ello, Urbanismo ha acordado paralizar la limpieza ya que «los restauradores necesitan un periodo de comprobación para evaluar las graves consecuencias que pueden derivarse» de esta acción. Los hechos se han puesto en conocimiento del autor de la escultura, Sebastián Santos, «que se ha mostrado preocupado por su conservación y dispuesto a colaborar» con la Gerencia para restaurar la obra.