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Macero que decora la fachada del Pabellón Real en el Parque de María Luisa es uno de los elementos que ha sido restaurado dentro del proceso de rehabilitación en el que está inmerso el inmueble desde el mes de julio pasado. / Jesús Barrera -
Principios de septiembre. Más en concreto, el día 4. Esa es la nueva fecha con la que trabaja el Ayuntamiento para dar por concluidas las labores de restauración del Pabellón Real del Parque de María Luisa, en obras desde el pasado verano.
Este nuevo plazo para la finalización de los trabajos se debe a que la empresa encargada de desempeñar la recuperación de la fachada del inmueble se ha visto obligada a pedir a Urbanismo la ampliación de los plazos. Inicialmente, la intervención tenía una duración de 12 meses por lo que debía estar acabada el próximo mes de julio. Sin embargo, la constructora Díaz Cubero, que fue la adjudicataria de la obra, ha solicitado una prórroga a la Gerencia, que decidirá el próximo miércoles en el seno del consejo de gobierno si aceptar la petición de la empresa.
Los argumentos que exponen son una serie de condicionantes meteorológicos que han retrasado las labores así como el estado de conservación de algunas piezas. Y es que, según apuntan, al comenzar con la intervención de los elementos escultóricos que componen la rica fachada descubrieron que dos de las figuras se encontraban en un grado de conservación más grave de lo inicialmente previsto, con importantes roturas. Además, el temporal de viento que pasó por la capital hispalense el pasado febrero derribó varias piezas, lo que obligó a Díaz Cubero a la producción de las mismas nuevamente. A esto se le sumaron los retrasos en la aplicación de barnices por las lluvias y la aplicación del hidrofugante.
Estos motivos llevaron a la constructora a solicitar el pasado 4 de junio el aumento del plazo de ejecución. Urbanismo cuenta ya con un informe favorable de la dirección facultativa por lo que Díaz Cubero contaría con dos meses más de plazo y en lugar de concluir los trabajos el 11 de julio lo hará el 4 de septiembre.
El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo, inició el pasado mes de julio las obras de conservación y restauración de las fachadas del Pabellón Real en el Parque de María Luisa, que cuentan con un presupuesto de adjudicación de 1.150.000 euros y un plazo de ejecución original de 12 meses. Los trabajos, los primeros de estas características en la fachada que se realizan en el edificio desde su construcción entre los años 1912 y 1915, van dirigidos especialmente a paliar los daños que presentan las fachadas de este inmueble y sus elementos decorativos, de gran valor patrimonial e histórico, ya que el conjunto cerámico constituye uno de los más bellos ejemplos de cerámica aplicada a la arquitectura de Sevilla.
La intervención, que ejecuta la empresa Díaz Cubero, comenzaron después de un complejo proceso de estudio y diagnóstico del edificio y que llevó a cabo un equipo de restauradores especializados con experiencia en edificios de gran valor patrimonial como la propia Plaza de España.
La Gerencia de Urbanismo redactó el proyecto técnico de intervención a partir de un análisis y estudio exhaustivo de los daños que presenta la edificación, aportado por el Instituto de Cultura y Artes de Sevilla. Se plantearon sobre todo labores de conservación, para preservar la integridad de los objetos originales y mejorar sus condiciones mediante limpiezas, consolidaciones y reintegraciones. Puntualmente, se han realizado reconstrucciones de aquellos elementos que no puedan conservarse y hayan de ser reemplazados, empleando las mismas técnicas que las piezas originales. Igualmente, se aplicará un tratamiento antihumedad en la base de los muros de fachada y, se instalará un sistema de protección contra el anidamiento de aves.
El edificio, que actualmente mantiene su actividad como sede administrativa de la delegación municipal de Empleo y Bienestar Social, se adecuará al finalizar las obras como nuevo contenedor cultural, según anunció el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, durante la presentación de los trabajos el pasado verano.