Las oficinas de documentación ampliarán desde hoy sus horarios. Así lo ha decidido la División de Documentación de la Dirección General de la Policía (DGP) en un escrito del día 29 de noviembre que obliga a que las dependencias se abran al público a las 8 de la mañana hasta el próximo 23 de diciembre.
La nueva instrucción, que impone a todas las comisarías de Policía Nacional del país estos mismos horarios, argumenta la decisión en «el colapso que se está produciendo en las distintas oficinas de expedición de DNI y pasaporte, la saturación del sistema de cita previa y teniendo en cuenta la previsión de un aumento exponencial con motivo de la cercanía de la Navidad».
Las oficinas por tanto atenderán al público desde las 8 a las 14.30 horas, desde el 1 al 23 de diciembre, «ambos inclusive». Si bien, cada ciudad adaptará este horario según sus necesidades. En concreto, en la provincia de Sevilla la decisión del jefe de la Unidad de Documentación de Españoles y Archivo, el inspector Antonio Funes, es que este horario sea de 8.30 a 15 horas. Las oficinas se encuentran aún actualizando las citas en la aplicación de cita previa y ayer solo estaban disponibles las de algunas localidades como Écija o Coria del Río.
La medida afecta además a aquellos funcionarios que tienen horario de tarde y jornada continuada. Así, CCOO denuncia mediante un comunicado en su web que esta decisión de la División de Documentación de la Dirección General de la Policía implica que estos trabajadores «excedan las horas semanales que legalmente deben realizar». Desde 2012 la normativa se modificó y los funcionarios pasaron a realizar de 35 a 37,5 horas semanales. Con este cambio de los horarios, los funcionarios que tienen una jornada continuada «realizarían 38,5 horas semanales». «Modifican las condiciones de trabajo de los empleados públicos sin tan siquiera sentarse con las organizaciones sindicales para mantener una negociación seria o proporcionar una información completa y transparente sobre un tema tan específico y complejo como es el del horario de atención al público», explica el comunicado del sindicato.
El documento en el que se anuncia la nueva jornada, la Dirección General de la Policía explica que la resolución de 2012 recoge que para estos funcionarios «podrán establecerse otros límites horarios» y que «la norma establece que en determinadas oficinas» podrá establecerse otro horario «excepcionalmente y por interés del servicio». El sindicato insiste en que «para cambiar el horario hay que hacerlo firmando un calendario laboral. Además, la medida acaba con la conciliación y se salta un Reglamento».
El aumento de las horas de atención al público para acabar con el colapso en la renovación de la documentación en las oficinas de DNI y Pasaporte no implicará en cualquier caso que se vaya a desatender a las urgencias «debidamente justificadas», éstas se harán «aprovechando los huecos que se producen por la inasistencia de los ciudadanos con cita previa».
Correos y militares
El sindicato CCOO advierte en su escrito de otra batería de posibles medidas que pretende adoptar la División de Documentación de la Dirección General de la Policía para solucionar la situación de colapso que se está viviendo.
Entre ellas, aseguran que se ha propuesto a Función Pública cubrir 504 plazas vacantes de personal funcionario de Cuerpos Generales mediante Oferta de Empleo Público, «aunque los propios responsables de la DGP admiten que ven difícil que se consiga». Mientras tanto, y como medida de urgencia, «quieren que se incorporen como personal interino los funcionarios del Servicio postal». El sindicato asegura haber tenido conocimiento de que en el día de ayer ya se tramitó la solicitud para la incorporación del personal de Correos en varias comunidades, entre ellas Andalucía.
Además, «como medida estrella», afirma CCOO que la DGP se «plantea la posibilidad de que entre personal militar, como ya ha ocurrido en otros ámbitos como la Dirección General de Tráfico».
El sindicato asegura de nuevo que estas medidas «son tan solo un parche ya que no atajan el origen del problema, que no es otro que la pérdida de empleo público y la una mala gestión de los –escasos– recursos humanos y materiales y de unificación racional de horarios de las oficinas».