-
De izda. a dcha., Diego Serrano (Asprocese), Federico Argüelles, Antonio Castro (gerente), Luis Pizarro (adjunto al Defensor del Pueblo Andaluz), Fernando Martínez-Cañavate (Ayuntamiento) y Ángel Caunedo (UGC Digestivo).
La línea entre lo que es y no es enfermedad puede resultar a veces difusa. Ocurre, por ejemplo, con los celíacos, que con un control estricto «son sujetos sanos que llevan una alimentación distinta», aclara Federico Argüelles, miembro de la Unidad de Digestivo del Hospital Universitario Virgen Macarena y coordinador de la I Jornada sobre Enfermedad Celíaca, celebrada este jueves en el centro sanitario con la colaboración de la Consejería de Salud y la Federación Española del Aparato Digestivo (FEAD).
Argüelles recalca que «si el celíaco sigue una dieta estricta sin gluten puede llevar una vida rigurosamente normal» y, a la postre, «dejar de ser un paciente como tal».
El encuentro reunió a más de un centenar de profesionales (especialistas de Digestivo, pediatras, nutricionistas, personal de enfermería) y asociaciones de pacientes para analizar los últimos avances en esta patología así como las dificultades que siguen existiendo para el diagnóstico y seguimiento de este tipo de pacientes. La jornada fue inaugurada por el director gerente del hospital, Antonio Castro, acompañado por el adjunto al Defensor del Pueblo Andaluz, Luis Pizarro, y el Jefe de Servicio de Salud del Ayuntamiento, Fernando Martínez-Cañavate.
La reunión sirvió para difundir la importancia de un diagnóstico precoz, así como poner en valor un adecuado seguimiento del paciente celíaco no sólo en su vertiente médica y nutricional, sino también social. En este sentido, tras un documento difundido por el Defensor del Pueblo Español que recoge las inquietudes de estos pacientes, desde la Consejería de Salud se ha constituido un grupo de trabajo transversal que incluye a médicos, enfermeros, nutricionistas y pacientes para tratar de alcanzar una adecuada atención a esta enfermedad.
INTOLERANCIA A UNA PROTEÍNA
La Enfermedad Celíaca (EC) se define hoy en día como intolerancia a una proteína presente en el gluten que contienen cereales como el trigo, la cebada o el centeno y que provoca una atrofia de la mucosa en el intestino delgado que impide la absorción de determinados nutrientes. La intolerancia al gluten es de carácter permanente y es consecuencia de una respuesta anormal contra el gluten en personas genéticamente predispuestas.
El número de personas afectadas está creciendo en los últimos años de manera sustancial –se estima que la prevalencia de la enfermedad celíaca está en torno al uno por ciento de la población– y, especialmente, aumentan los casos diagnosticados en adultos, que muchas veces revelan síntomas no digestivos, tales como «manifestaciones a nivel de la piel, reumatológico, aftas de repetición, trastornos depresivos e incluso psiquiátricos», explica Argüelles. Síntomas que en ocasiones confluyen con los digestivos propiamente, como «diarrea, dolor abdominal, pérdida de peso, pérdida de apetito o retraso en el crecimiento».
Es importante destacar que hasta un 30 por ciento de los familiares de primer grado del celíaco también pueden serlo, por lo que una vez diagnosticado un caso es importante descartar la enfermedad en sus familiares.
ETIQUETADO DE ALIMENTOS
Otro aspecto que se trató en la jornada es el concerniente al etiquetado de los alimentos, que presenta «cierta problemática» ya que conviven tres tipos de etiqueta: producto sin gluten, con la espiga tachada y controlado por FACE (Federación de Asociaciones de Celíacos de España), que es la más restrictiva y segura para los pacientes, si bien puede resultar más cara y ofrece una menor variedad. «Si uno se propone seguir una dieta sin gluten, lo consigue», afirma Argüelles.
ENSAYOS CLÍNICOS Y OTROS AVANCES
La Unidad de Digestivo del hospital Macarena participa en varios ensayos clínicos relacionados con la celiaquía, entre los que destaca el desarrollo de tests para la detección del gluten en las heces, cuyos investigadores principales, la doctora Ángeles Pizarro (Virgen del Rocío) y la profesora Carolina Sousa (Universidad de Sevilla), han participado en la jornada. Este pasado año se han publicado además dos trabajos colaborativos europeos sobre la utilidad de la cápsula endoscópica en el diagnóstico y seguimiento de estos pacientes. El diagnóstico en la edad adulta se ha incrementado en los últimos años en las consultas de Digestivo del hospital Virgen Macarena y se van a incorporar en breve las últimas novedades para el diagnóstico de los casos más dudosos a través del estudio de los linfocitos gamma/delta en las biopsias duodenales.