El Colegio de Fisioterapeutas de Andalucía se puso de largo la tarde de este miércoles para inaugurar de forma oficial la nueva sede colegial, un amplio y moderno espacio con el que quieren dar un mejor servicio a los más de 7.000 asociados que esta institución tiene en la comunidad autónoma.
Miguel Villafaina, presidente del colegio, explicó que con este nuevo espacio –ubicado en el número 1 de la calle Bartolomé de Medina, a pocos metros de la anterior sede– se quiere dar un mejor servicio a todos los colegiados porque la anterior se había quedado pequeña. El diseño de las nuevas instalaciones, amplias, luminosas y funcionales, también pretenden ser «un reflejo del colegio» dado que desde la junta de gobierno del colegio se apuesta por ser «funcionales y transparentes», precisó Villafaina.
El nuevo espacio cuenta también con una sala de usos múltiples de 150 metros cuadrados acondicionado para la celebración de cursos y actividades orientadas al ciudadano como el centro de atención al costalero, que atiende a este numerosísimo colectivo de cara a la Semana Santa.
La apertura de esta nueva sede era una de las principales necesidades de la corporación, dado el elevado incremento de colegiados y el importante avance experimentado por la profesión en los últimos años a nivel académico, científico y profesional. Villafaina también apuntó que con esta nueva sede se pretende abrir una nueva vía de acercamiento hacia el colegiado, que viene a sumarse a la apuesta de la institución por los nuevos canales de comunicación y redes sociales».
Villafaina también destacó que los colegios profesionales tienen la función de vertebrar la sociedad y de ser supervisores de cómo prestan sus servicios todos los colegiados para que sea una prestación de calidad. También se felicitó porque el colegio haya logrado «salir de la invisibilidad» y gracias a ellos «cada gesto que se hace llega mucho más al ciudadano».
Durante el acto de inauguración, presentado por el periodista Cristóbal Cervantes, tuvo también lugar una interesante ponencia a cargo de Antonio Ignacio Cuesta Vargas, profesor de la Universidad de Málaga, que desgranó los principales retos, amenazas y oportunidades, de la profesión a través de un amplio análisis.