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Los nuevos carriles bici conectarán los barrios periféricos con la red ciclista de la ciudad. / Txetxu Rubio
La red de carril bici con la que cuenta la capital hispalense es bastante completa. Los más de 180 kilómetros de vías ciclistas cubren la mayor parte de los barrios de Sevilla. Sin embargo, el plan de la bicicleta prevé su ampliación. No se trata de grandes inversiones ni hay detrás proyectos de envergadura como antaño. El objetivo es conectar los barrios periféricos con la red principal con la idea última de potenciar el uso de este medio de transporte entre los sevillanos –se aspira a pasar de 8 al 15 por ciento el número de desplazamientos hasta 2020–.
Para el próximo año, el planteamiento del plan, que fue ratificado el miércoles en el consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo, el Ayuntamiento prevé sumar otros cuatro kilómetros a la red. Se trata de dos tramos, cuyos proyectos están aún en redacción, de dos kilómetros en cada caso. Estas nuevas vías ciclistas tomarán como modelo el desarrollado en la avenida de la Palmera, apostando por colocarlos en la calzada y con un separador del tráfico. En primer lugar, se construirá un carril en las calles Parque Doñana, Corral del Agua y Estrella Canopus, en Pino Montano. Serán dos kilómetros de vías y contarán con un presupuesto aproximado de 400.000 euros. Además, entre Las Golondrinas y San Jerónimo se pondrá en marcha otro trecho de carril, también de dos kilómetros. En este caso se prolongará entre Doctor Fedriani y la calle Navarra. Para esta obra el presupuesto rondará los 487.000 euros.
Esta ampliación vendrá a sumarse a otras que se han ido desarrollando desde comienzos de año. En concreto, este 2017 se han ejecutado o están en ejecución varios proyectos como la renovación del tramo de Plaza de Armas, Leonardo da Vinci o del Muelle de la Sal; la remodelación del carril en Recaredo o la construcción de una vía ciclista en la calle Dinamarca. Además, se han redactado las propuestas para el Paseo Colón, calle Jándula, rotonda Avión Saeta, la avenida Juan Pablo II o el tramo entre la calle Barberán y Collar y la avenida García Morato.
Eso sí, por el momento, entre los proyectos previstos aún no está sobre la mesa una de las peticiones vecinales con más solera: el tramo de Valdezorras para conectar el barrio con Alcosa. Un proyecto que, según Urbanismo, se ha alargado en el tiempo por la dificultad del trazado, que cuenta con varias zonas de vías pecuarias, pero que ya está acordado con la Junta de Andalucía.
Sin embargo, la expansión de la red de vías ciclistas es solo uno de los puntos del nuevo plan de la bicicleta 2017-2020 para reforzar este medio de transporte e incentivar su uso en la ciudad. El plan prevé una inversión global de 8,7 millones de euros hasta el año 2020, de los cuales 2,6 millones se invertirán en el bienio 2017-2018 y, seis millones se invertirán en los siguientes años 2019-2020. De ese montante total, la ampliación de los carriles supone solo un 33 por ciento.
Y es que en materia de infraestructura, el mantenimiento y la redefinición de los tramos existentes resulta fundamental. El objetivo del nuevo contrato, que tiene dos años de duración y un presupuesto de 720.000 euros, modificará el diseño de algunas zonas como la Ronda Histórica donde la convivencia de los ciclistas y los peatones es complicada. Además, pretende dar respuesta a las incidencias que se encuentren en el carril con mayor diligencia con la puesta en marcha de una web.
A todo esto se le añade la mejora del servicio público de bicis, del registro de ciclos, la modificación de la ordenanza o campañas de fomento del uso de la bici entre nuevos colectivos, para generar más público, con campañas como en bici al cole, al trabajo o a casa.