«Los universitarios no están listos para el mundo laboral»

La Fundación Cultural Caja Rural del Sur acogió en Sevilla un debate sobre los nuevos retos de la educación en el panorama empresarial actual

06 mar 2018 / 19:10 h - Actualizado: 06 mar 2018 / 23:01 h.
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  • Manuel Contreras, Diego García, Brita Hektoen y Antonio Perea, en la mesa redonda de Caja Rural. / El Correo
    Manuel Contreras, Diego García, Brita Hektoen y Antonio Perea, en la mesa redonda de Caja Rural. / El Correo

«La educación del momento conforma el futuro de un país». Con esta frase se iniciaba este lunes una mesa redonda sobre educación en la empresa en la Fundación Cultural Caja Rural de Sevilla. Bajo el título La Educación vista desde la Empresa: percepciones y necesidades se desarrollaba el encuentro organizado por el Foro Andaluz Humanismo y Empresa.

La ceremonia estuvo moderada por el periodista Diego García Cabello, presentador en Onda Cero, que además abrió el debate aludiendo a la educación en el panorama empresarial actual. «Los esquemas actuales ya no sirven ante la revolución digital que estamos viviendo», afirmó, destacando un tercer factor protagonista de la jornada, la tecnología en las empresas.

Sin embargo, la tertulia subrayó el papel del factor humano en esta revolución tecnológica actual. Uno de los ponentes fue Antonio Perea, CEO de grupo Lappi del sector gráfico, que consideró cómo «detrás de la tecnología siempre va a haber una persona».

«Es lo más importante», señaló Brita Hektoen, refiriéndose a los recursos humanos. Pero «la preparación de los jóvenes no está adapta a lo que necesita la empresa». Así lo afirmó la licenciada en Administración y Dirección de Empresas. La que es directora de la Cátedra Mujer, Empresa y Sociedad impulsada por la Fundación San Telmo declaró que «el 40 por ciento de los jóvenes no sabe ni siquiera leer una factura».

Bajo el prisma del consejero delegado de AZVI, Manuel Contreras el gran problema es «la falta de grandes empresas que ofrezcan puestos de trabajo en Andalucía y los jóvenes se ven obligados a irse fuera». Tanto es así, que tan sólo existen en la comunidad andaluza 15 empresas de gran tamaño. En comparación a «las más de 300 que puedes encontrar en un polígono de Bilbao». Sin embargo, este invitado, en la misma línea que Hektoen matizó que «aunque hay mucho talento no se enseñan actitudes básicas, a colaborar y a trabajar en equipo, a ser proactivos».

Los ponentes aseguraron que es necesario un pacto entre familia, escuelas y el gobierno para cambiar esto y que los jóvenes reciban una formación dual que «compaginase la educación con el trabajo futuro» y adaptada a la empresa. Como dijo Brita, «una máquina nunca va a sustituir la empatía ni la creatividad», algo necesario en la persona que llega a la empresa. Por eso, es necesario, «un sistema educativo mucho más práctico, orientado al mundo laboral». «Tenemos que enseñar las cosas que no son reemplazables por la automatización», apuntó Hektoen. Y así, dar respuesta a las nuevas necesidades de la futura «empresa 4.0» a la que aludió el miembro de AZVI.

Como manifestó el moderador, «las escuelas necesitan educar para trabajos que aun no se han creado y problemas que no han surgido». Sólo el 4 por ciento de los jóvenes «es consciente de que su futuro trabajo aún no se ha creado».

Pero, de cualquier manera, se hizo hincapié en que «los universitarios andaluces no están listos para acceder al mundo laboral», sobre todo, teniendo en cuenta la competencia en un sistema globalizado. «Los jóvenes compiten con estudiantes de Finlandia, por ejemplo. De hecho, ahora puedes trabajar desde cualquier parte del mundo», afirmó Rita.

No obstante, la mirada positiva de todo esta mesa redonda se centró en «que los nuevos desafíos sociales, políticos y medioambientales pueden suponer grandes oportunidades para los jóvenes recién salidos de la universidad».