Más de 1.400 padres y madres participaron en el congreso de la FEPACE en Sevilla

Más de 1.400 padres y madres de toda España han participado en el Congreso “Educar en una sociedad líquida”, organizado por FEPACE, la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Fomento, en colaboración con las APAs de los Colegios Entreolivos y Tabladilla, celebrado en el Auditorio Cartuja Center de Sevilla.

Nueve expertos en educación, comunicación, sociología y psicología han ofrecido sus CLAVES EDUCATIVAS en conferencias y talleres que han aportado información y recursos a los padres para que sean los primeros educadores de sus hijos. Esta 39º edición ha planteado la educación en una sociedad líquida, concepto con el que el sociólogo Zygmunt Bauman definió a la sociedad contemporánea que aboga por la provisionalidad y la ausencia de compromisos. Estas fueron las claves que se transmitieron:

«El debate público en la sociedad líquida favorece que todos podamos exponer nuestra visión y nuestros valores. Sin embargo, cualquier asunto polémico tensa el ambiente; entre otros motivos, porque las redes sociales contribuyen a la polarización de las opiniones. En este contexto, podemos apostar por un diálogo basado en el encuentro, poniendo a la persona por delante de las ideas, generando una empatía que señale lo que nos une y no lo que no nos gusta o separa, que busque una comunicación positiva».

«La falta de tiempo y las dudas son la mayor dificultad de los padres a la hora de educar. Los hijos necesitan límites y normas que les ayuden a sentirse seguros. Podemos ayudarles a crecer dialogando con ellos y haciéndoles comprender que decir “no” es también decir “te quiero y quiero ayudarte a crecer”».

«Es importante educar a los hijos en que la frustración y la dificultad forman parte de la vida; son experiencias que nos ayudan a crecer. Para ello, los padres pueden ayudarles a entrenar la voluntad, el optimismo y la esperanza para ser personas maduras, responsables, independientes, felices y autónomas, con una mirada amable, desdramatizando y quitando hierro a sus exageraciones, comprendiendo que el fracaso enseña que unas veces se gana y otras se aprende».

«Educar en el optimismo es una actitud que ayuda a observar la realidad y a afrontarla con paz. Cualquier situación puede verse como un problema o una solución. Padres y educadores saben que la sociedad en la que nos movemos nos influye en lo que somos y en lo que serán nuestros hijos, y cómo actúen ellos determinará la actitud de los hijos ante las dificultades. En cualquier caso, el ejemplo es la principal herramienta educativa».

«La revolución informativa que ha supuesto Internet nos permite acceder fácilmente a gran cantidad de información. Nunca hemos tenido más fácil obtener tanta información y, sin embargo, somos más vulnerables que nunca al engaño. Podemos estar bien informados en esta época de auge de la posverdad y de los populismos evitando convertirnos en emisores de fake news».

«La multitud de estímulos que recibimos a través de las nuevas tecnologías pueden hacernos perder la referencia de lo que realmente queremos. Las redes sociales son una gran fuente de conocimiento, pero también de distracción y superficialidad. Los padres pueden ayudar a los hijos creando buenos hábitos de atención: para aprender a pensar y para minimizar el impacto de estímulos y deseos no controlados».