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El presidente de Las Tres Calles, Antonio Guisado, reclama alternativas para los jóvenes del barrio. / Pepo Herrera
—¿Qué queda de la fotografía de hace dos años en la que asociaciones, sindicatos y partidos políticos (PSOE e IU) reclamaban «un plan de empleo» para Torreblanca?
—Lo que queda es la foto y el recuerdo de la foto. Aquí ha ido desapareciendo lo poco había: escuelas taller, talleres de empleo, agencia de orientación... y el paro ha seguido creciendo a límites insospechados. Hay familias enteras en desempleo. Estamos hablando de casi el 50 por ciento, más de la mitad del barrio.
—¿Cómo afecta al día a día del barrio?
—Esto es desesperante. La mayoría de las familias vivían de la construcción y ahora que no hay nada, están todos parados. No hay tampoco alternativa de formación para los jóvenes que no quieren seguir estudiando. Y eso se nota en las colas en el reparto de comidas de las Hermanas de la Cruz y en el aumento del vandalismo. La gente roba lo que pilla para sacarse unos euros... Hace poco se han llevado las ventanas del antiguo centro de salud, en desuso desde hace uno. Lo último que hemos visto son personas recogiendo latas de cerveza y de refresco en las calles y contenedores para venderlas luego al peso.
—¿Hay problemas de vigilancia en Torreblanca?
—La verdad es que la Policía se ve poco. Antes de llevarse la comisaría fuera del barrio, se veían más los coches patrullas. Este verano con los problemas de ruidos que teníamos hasta altas horas en la plaza Salvador Valverde, hemos llamado y no han aparecido.
—Un informe de Facua asegura que dos de cada tres sevillanos creen que las calles están sucias, ¿cómo veis el barrio en tema de limpieza?
—Hay bastante suciedad, sobre todo por las mañanas cuando amanece hay calles que están llenas de latas y de papeles. Vienen a limpiar aunque quizás se necesite algo más. Estamos hablando que también es un problema de educación y civismo.
—Torreblanca ha vivido muchos momentos, algunos muy difíciles, ¿cómo calificas el actual?
—Como el peor de los últimos años. Es horrible. Ha habido promesas de trabajo que no se han cumplido. Ni el viejo ni el nuevo gobierno local ha ofrecido ayudas en este sentido. Y hay que buscarle una solución entre todos. El paro lleva a que la gente salga a la calle a buscarse la vida.
—¿Qué proyectos habéis presentado al Plan Decide?
—Se aprobaron dos propuestas relacionadas con las mejoras del canal de los presos pero no sabemos nada más.
—¿Qué uso os gustaría que tuviera el antiguo centro de salud?
—Hicimos una propuesta a la junta municipal del distrito para que el Ayuntamiento instara a la Junta a que abriera en este edificio un centro de especialidades.