Objetivo: mantener el pulso contra los grandes

22 jun 2017 / 07:31 h - Actualizado: 22 jun 2017 / 11:23 h.
"Ayuntamiento de Sevilla","Comercio","El comercio se reinventa"
  • Presentación de la aplicación de Aprocom. / El Correo
    Presentación de la aplicación de Aprocom. / El Correo

Sobrevivir a la competencia de las grandes cadenas de distribución, y ya no sólo se trata de la alimentación, es una de las esperanzas de todos los comercios sevillanos. Un sentimiento que captó a la perfección el Ayuntamiento de Sevilla, y que motivó, desde la delegación de Comercio, la convocatoria de ayudas a esos pequeños empresarios que mantienen el pulso a los gigantes del consumo.

Con estas subvenciones se ha podido financiar un proyecto ambicioso de la Confederación provincial de Comercio y Servicio de Sevilla (más conocida como Aprocom) para geolocalizar las tiendas sevillanas a través de una app. Una herramienta que no sólo ubica en el mapa a esos pequeños empresarios que venden con sumo mimo su género, sino que, además, da acceso a promociones y descuentos a aquellos clientes que la utilicen, explica el presidente de la confederación, Tomás González. Un proyecto que ha sido subvencionado con un partida de 34.985 euros, una de las mayores cuantías económicas de la convocatoria.

La aplicación móvil, además, funciona a modo de intranet entre los propios comerciantes. A través de ella, no sólo pueden comunicarse, sino que pueden conocer al minuto las obras, el tráfico, las ofertas, los convenios o situaciones de competencia desleal, entre otros.

Uno de esos comercios, Calzados Dorado, aterrizó en el mundo digital hace varios años, impulsado por la necesidad de hacer frente a sus grandes competidores y animado por las nuevas generaciones de la familia Dorado, explica José María Dorado, uno de sus responsables. Además de abrir un escaparate en la mayor calle comercial del mundo, subieron la persiana de su tienda online, donde también cuentan con un rincón outlet.

Lo cierto, según Dorado, es que competir con las grandes ofertas de los gigantes y las páginas dedicadas a las promociones de calzado o moda es complicado. Como lo es hacerlo con los descuentos que hacen las marcas, que ellos mismos comercializan, en sus propias webs.

No obstante, Dorado es ejemplo de innovación. Y además de su página web (en la que reciben una media de 4.000 visitas mensuales) es uno de los sellers con los que cuenta Amazon. Y aunque la venta es «testimonial», es uno de los mejores escaparates de cara a los clientes.

Pero el mercado web no es la panacea. Bien lo saben los propietarios del emblemático Bazar Victoria, que echó el cierre el pasado mes de abril. Este centenario comercio no ha resistido el envite de la crisis, ni del fin de la renta antigua, que le obligó a abandonar su angosto local de Entrecárceles y a trasladarse a la calle Francos. Centenario e innovador, pues este museo de los cacharros (en sus estanterías uno podía encontrar los artilugios de cocina más curiosos, como unas gafas para pelar cebolla y evitar que lloren los ojos) también tenía su página web, desde donde salían muchas de sus ventas, especialmente la de perchas para bebé, aseguraba el nieto del fundador y uno de sus últimos gerentes, Rafael Sáinz, en uno de los últimos reportajes que se publicaron en estas páginas sobre este entrañable y ya histórico comercio sevillano.