Pescar en Sevilla, una alternativa veraniega

La práctica de este deporte puede llevarse a cabo en la dársena del Guadalquivir, donde habitan especies como carpas, truchas o barbos

Manuel Pérez manpercor2 /
06 ago 2017 / 08:00 h - Actualizado: 06 ago 2017 / 08:21 h.
"Veraneando"
  • La pesca es una práctica habitual en las riberas de la dársena del Guadalquivir, donde es posible capturar numerosas especies de ciprínidos. / David Estrada
    La pesca es una práctica habitual en las riberas de la dársena del Guadalquivir, donde es posible capturar numerosas especies de ciprínidos. / David Estrada

El río Guadalquivir, del árabe al-wadi-al-kabir –que significa río grande–, ha sido por antonomasia eje vertebrador de Andalucía. Desde la jienense Cazorla hasta la gaditana Sanlúcar de Barrameda, pasando por Córdoba y Sevilla, el Guadalquivir ha sido un activo económico importante para numerosos municipios andaluces. Más aún en el Bajo Guadalquivir, donde las marismas que se conforman desde su desembocadura hasta Coria del Río propician una agricultura fecunda y rica.

A su paso por Sevilla, el Guadalquivir se convierte en un río muy particular. Su anchura –entre 80 y 120 metros– y su calado –entre 7 y 43 metros– lo convierte en navegable desde Sanlúcar hasta la misma capital hispalense, donde se crea una dársena que, históricamente, ha favorecido el comercio con la península. Cabe destacar que Sevilla siempre ha encontrado en el río un aliado para mejorar su economía. Baste recordar que la antigua Híspalis llegó a ser capital del mundo en el siglo XVI gracias al flujo comercial procedente de América.

Pero el Guadalquivir no solo es un aliado económico, sino que también genera nuevas opciones de ocio. La dársena, regulada por la esclusa, crea un ecosistema rico y heterogéneo muy interesante para la pesca deportiva, una práctica que en los últimos años ha ido perdiendo espacios en Sevilla y que ahora una asociación política quiere recuperar.

Acción Natural Ibérica (Anatur), a través de su representante de pesca en Andalucía, Rubén García, ha presentado en el Ayuntamiento de Sevilla una solicitud para recuperar el espacio fluvial colindante con San Jerónimo, un barrio históricamente ligado a la pesca deportiva y donde «hubo un club de pesca y se tuvo que cerrar porque sus miembros no podían ir a la zona a hacer sus competiciones», según el representante de Anatur.

Para Rubén García, «la pesca en Sevilla tiene un peso bastante grande». No es baladí, pues existen hasta 10 clubes de pesca en la capital hispalense, donde hay deportistas de alto nivel que compiten en varias modalidades. Sevilla es un lugar propicio para la práctica de este deporte y García recordó que «aquí se han celebrado campeonatos de agua dulce a nivel andaluz, nacional, europeo e, incluso, mundial».

La pesca deportiva, «que depende del Consejo Superior de Deportes», es un ejercicio que no requiere mantener una forma física de atleta, aunque sí es necesario desarrollar destreza y habilidad para manejar la caña, así como tener unos amplios conocimientos del mundo de la pesca, tanto marina como fluvial.

No obstante, no es un deporte al alcance de cualquiera, pues para practicarlo se necesita una licencia, que se obtiene a través de un curso o un examen. Según la legislación, pescar sin licencia es una infracción menos grave y conlleva una multa de entre 101 y 500 euros.

TÉCNICAS DE PESCA

Practicar la pesca deportiva conlleva conocer y dominar un arte milenario que se puede desarrollar de múltiples maneras. Existen numerosas técnicas de pesca que persiguen la captura de unas especies piscícolas determinadas. Por ejemplo, en alta mar, no es lo mismo pescar en zona arenosa que en roca. Ello exige un sedal determinado para cada caso y un manejo de la caña concreto.

En zonas fluviales, como sucede en la dársena del Guadalquivir, se estila la pesca de ciprínidos. La familia de los ciprínidos incluye especies tan conocidas en Sevilla como los barbos, las truchas o las carpas.

Las técnicas más usadas en Sevilla para la captura de estas especies son el carpfishing y la pesca al coup. Rubén García explica que el primero es aquel que se practica para «la pesca de grandes ciprínidos, de carpa y barbo principalmente», mientras que el segundo es una técnica en la que se usa una caña enchufable. Las cañas enchufables «suelen tener 13, 14 o 15 metros» y la particularidad de esta técnica es el panier, «un asiento que se usa para pescar». Para el representante de Anatur, estas técnicas «tienen mucho arraigo aquí en Sevilla».

Por otro lado, cabe destacar la evolución de la pesca hacia modelos mucho más sostenibles. Rubén García afirma que «no es por contentar a los sectores ecologistas» y destaca que el respeto a las especies piscícolas se debe «a la concienciación propia de los pescadores».

Sevilla puede ampliar su oferta de ocio, deportiva y turística con una correcta promoción de la pesca deportiva a través de la celebración de competiciones y concursos. «Todo eso se traduce en ingresos para la ciudad», explica García. En definitiva, el río permite desarrollar actividades diferentes para pasar el verano sevillano.