-
-
En la caravana participaron coches de todas las marcas y las épocas, además de motos clásicas. / Fotos: Jesús Barrera -
-
Los aficionados al mundo del motor, ya sea de dos o cuatro ruedas, disfrutaron este sábado en la localidad sevillana de Dos Hermanas. La iniciativa de la Asociación de Comerciantes de la calle San Sebastián y Mercado de Abastos ha llevado por tercer año consecutivo un gran número de coches y motos clásicos al casco histórico nazareno, que hicieron las delicias de mayores y pequeños al tiempo que participaban en un acto solidario en el que se recogían alimentos para las personas más necesitadas.
José Manuel Rodríguez, uno de los organizadores de este tercera exposición de vehículos clásicos, explicó que esta iniciativa partió de la asociación de comerciantes con el principal objetivo de potenciar el consumo en los comercios del centro histórico, por lo que haría falta un buen reclamo para atraer el máximo número de público posible a las calles del casco histórico de Dos Hermanas.
Desde mucho antes de las diez de la mañana –hora prevista para arrancar los motores de la caravana– ya fueron muchos los curiosos que se acercaron al punto de encuentro para poder ver de cerca todos los vehículos antes de que arrancara la caravana. Los había de todas las marcas y épocas, Citroën, Mercedes, Renault, Seat, Volvo y demás. Lo mismo ocurría con las motos, donde también estaban las principales marcas del mercado: Ducati, Yamaha, Honda, Bultaco así como de todos los estilos: carretera, urbanas de campo, competición y demás.
Una vez organizada a la comitiva –que contaba con el apoyo de la Policía Local de Dos Hermanas– comenzaron a sonar los motores y cláxones durante el recorrido que hicieron por las calles principales del pueblo nazareno ante el asombro de los vecinos, que se sorprendían ante la caravana de coches que les llevaba en el tiempo varias décadas atrás. Tras una breve parada en la plaza de la Constitución para seguir su recorrido y parar más tarde en la peatonal calle San Sebastián, donde los coches y motos ya pudieron ser observados hasta el mínimo detalles por todos los aficionados al tiempo que satisfacían los intereses de los comerciales de Dos Hermanas. «Con todo es lo que queremos fundamentalmente es potenciar la visita de público a esta zona en la que hay mucho comercio para aumentar las ventas en el comercio tradicional de Dos Hermanas», recordó el organizador.
Y con la idea de que no fuera una jornada exclusivamente con visión comercial, la caravana de coches antiguos también tiene su apartado para ayudar a las personas que más lo necesitan. «Tenemos habilitado un punto de recogida de alimentos que este año vamos a destinar tanto a Cáritas como al Banco de Alimentos. El primer año llegamos a 300 kilogramos, el pasado año se alcanzaron los 400 kilos y el objetivo que nos hemos marcado para 2017 es llegar la cifra de la media tonelada de alimentos».
Las personas solidarias que decidieron entregar algún alimento en el punto de recogida habilitado en la caravana de coches y motos también tuvieron su contraprestación, dado que recibieron al hacer la entrega un ticket que pudieron canjear por una cerveza y una tapa gracias a la colaboración de la Fundación Cruzcampo así como de los bares nazarenos la Penúltima y Esperanza.