Suspenso en zonas verdes

Las últimas malas noticias sobre parques y jardines en la ciudad contrastan con la reciente celebración del Día del Medio Ambiente y reafirman las críticas de oposición y expertos

10 jun 2015 / 22:14 h - Actualizado: 10 jun 2015 / 22:15 h.
"Urbanismo"
  • Árboles talados en Almirante Lobo. / Pepo Herrera
    Árboles talados en Almirante Lobo. / Pepo Herrera
  • Árboles talados en Reyes Católicos en enero. / Carlos Hernández
    Árboles talados en Reyes Católicos en enero. / Carlos Hernández
  • Efectos de la actuación de ayer en el parque Infanta Luisa. / El Correo
    Efectos de la actuación de ayer en el parque Infanta Luisa. / El Correo
  • Suspenso en zonas verdes

La plataforma SOS Jardín Americano elevó ayer a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea una denuncia en la que avisó del «deterioro progresivo y abandono» del Jardín Americano, los Jardines del Guadalquivir y el Paseo de Ribera, restaurados hace varios años gracias a la financiación europea. Además, ayer Endesa efectuó una tala de pinos en el parque Infanta Luisa de Sevilla Este, debido a la proximidad de estos con líneas de alta tensión, con el fin de evitar incendios forestales. Después se repoblará con vegetación baja, según ha informado el Ayuntamiento.

Estos dos hechos chocan por su cercanía con la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente el pasado 5 de junio, hace apenas unos días. Ambas noticias abundan en la línea crítica mantenida (especialmente, desde hace un año) por partidos de la oposición municipal, entidades ciudadanas, colectivos con preocupación medioambiental y expertos en la materia. Entre estos últimos, la voz más destacada era la de José Elías Bonet, durante 49 años al frente de Parques y Jardines. «Aunque en los últimos años se ha duplicado la superficie ajardinada de la ciudad, los sistemas de gestión pública para su mantenimiento han ido empeorando».

Elías, consultado por El Correo, aprovechó para hacer un repaso a los grandes problemas y las posibles soluciones que se podrían llevar a cabo en las zonas verdes de Sevilla. «Hay una gran diferencia entre lo que se dice y lo que se hace, porque existen muchas noticias de parques y jardines nuevos pero estos, con el paso del tiempo, se encuentran en condiciones mínimas de conservación», afirmó. En la distribución de la ciudad hay una serie de distritos que están «muy por debajo» de los estándares de zonas verdes. Un claro ejemplo, por su falta de arbolado, es el barrio de Nervión. En su día también lo fue la Macarena pero con la construcción del Parque del Alamillo, gracias a los Fondos Europeos, «se vio beneficiado».

Estos fondos traen consigo la ventaja de tener un parque al lado de casa, pero producen muchos desequilibrios a la hora de gestionarlos. «Cuando apenas puede mantenerse lo que se tiene, la llegada de 200 hectáreas nuevas de jardines se convierten en un verdadero problema a la hora de gestionarlos».

A lo largo de la democracia, Sevilla ha padecido un mal endémico respecto a sus parques y jardines, y es que ningún partido político ha sido capaz de abordar el problema del arbolado de una manera continuista. Es ahora, con esta nueva hornada de políticos, cuando se está empezando a hablar de un Plan Integral de Parques y Jardines, algo que expertos como José Elías llevan pidiendo mucho tiempo.

«El consistorio no puede cambiar de criterio de gestión de los parques cada cuatro años que haya elecciones». Este hecho llega a desubicar a los propios funcionarios encargados de las zonas verdes, así como a la población, que «no entiende el cambio en la poda de los árboles o en el uso indebido que se hace de algunos parques».

Noticias como la tala del 95 por ciento de los pinos piñoneros del Parque del Alamillo o la poda indiscriminada de los naranjos de algunas calles de la capital hacen saltar las alarmas entre los residentes y los expertos en la materia. En este sentido, Elías denunció «la absurda teoría del Ayuntamiento de que así los naranjos produzcan menos azahar y, por tanto, menos frutos que recoger por las contratas ahora encargadas de este menester».

Posibles soluciones

Para evitar estos problemas, el entrevistado aboga por darle una mayor confianza a los técnicos especialistas de carrera que «han apostado fuerte en la gestión de los espacios verdes». Por tanto, José Elías ve «totalmente razonable» que haya un personal que trabaje a corto y largo plazo para gestionar como es debido los parques y jardines de la ciudad.

Además, la falta de participación ciudadana a la hora de conservar las zonas verdes «brilla por su ausencia». Aunque, cuando la ciudadanía ha intentado ayudar «se ha visto defraudada por parte de los partidos políticos que no les han hecho ni caso».

«Se debería consensuar con los vecinos de cada distrito sobre lo que se tiene que hacer y centrarlo todo en un punto en el que se mire el beneficio de los ciudadanos», sostiene el especialista. Hay que tener un plan general que especifique las tareas programadas «para evitar que cada día sea un caos».

Pero, sin duda, para Elías el mayor culpable es urbanismo, que es la base donde se gestiona todo. «El principal problema es que todo el mundo se escapa de la gestión, plantando árboles donde quiere y haciendo un uso indebido de los parques y jardines».

«Hay que tomar las riendas para que la ciudad se desarrolle correctamente incidiendo, quizás, en la persona que se encuentra detrás de la gestión». Por este motivo, José Elías suspendería la gestión de Parques y Jardines. Muy a su pesar, debido a todo el tiempo que dedicó al mantenimiento de esta labor, califica con un cuatro a la ciudad y su arbolado por todos los problemas anteriormente comentados.

«En una ciudad turística, la gestión de parques y jardines debería ser primordial para presentarlos siempre en un buen estado de belleza. Es lo mínimo de una ciudad que se precia a ser de las más bonitas del mundo», concluyó José Elías como aportación de las posibles soluciones que necesitaría Sevilla en sus zonas verdes.