El Ayuntamiento de Sevilla lanza un nuevo servicio para facilitar a las mujeres en situación de especial vulnerabilidad la asistencia a los centros municipales de atención a este colectivo. Esto será posible gracias a que el Consistorio prevé financiar los desplazamientos de estas mujeres y sus hijos desde sus viviendas a los servicios municipales, casas de acogida, centros de salud, hospitales, juzgados... tanto en la capital como en la provincia.
El objetivo que se marca el gobierno local es dar cumplimiento a su propio plan de igualdad de oportunidades que busca fortalecer la atención a estos colectivos con los que trabajar, además, de manera integral.
De esta forma, el contrato que acaba de salir a licitación, comenzará su andadura el próximo mes de junio y se prolongará durante un año. Inicialmente tiene un presupuesto de unos 8.470 euros con IVA. El servicio que se contrata será en horario de apertura de los seis centros integrales de atención a la mujer con los que cuenta la capital hispalense, esto es: de lunes a viernes de 8 a 15 y excepcionalmente por las tardes. A veces estos desplazamientos estarán programados por los técnicos de los centros de atención a la mujer y en otras ocasiones se solicitarán en el momento. En ambos casos, los taxis que se encuentren dentro de este nuevo servicio deberán acudir al lugar de recogida en un plazo máximo de 15 minutos desde la solicitud.
En cada desplazamiento se determinará el lugar de origen y destino de forma que las mujeres y sus hijos que empleen este transporte no podrán ser recogidos ni dejados en otros puntos.
Los taxis que se hagan con este contrato deberán estar adaptados a personas con movilidad reducida y contar con sistemas de retención infantil adaptados a distintas edades. Además, tendrán que recibir formación sobre violencia de género y firmarán un documento de confidencialidad, pues deberán actuar bajo secreto profesional, estando a guardar el más absoluto sigilo y confidencialidad sobre el contenido y naturaleza del trabajo prestado.
Finalmente, serán los técnicos del servicio de la mujer quienes realizarán las tareas de supervisión sobre el servicio, que podrán rechazar en el caso de que no se cumplan las condiciones.