El sector de la construcción está saliendo de la crisis. Esta es una de las conclusiones a la que llegaron ayer los miembros de la comisión de seguimiento del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) a la luz de los datos de las licencias de obras y proyectos urbanísticos que se están desarrollando en la ciudad.
En la segunda reunión de la comisión, que se citó por primera vez en este mandato hace nueve meses, se ha realizado «una fotografía» de lo que sucede en la ciudad en materia urbanística que demuestra, según apuntó el delegado de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz, «que hay un cambio de tendencia».
Una situación que explican los datos que maneja la Gerencia de Urbanismo. El delegado detalló que «hay una mejora en el sector inmobiliario». Conclusión a la que llega de la mano del volumen de licencias de obra que se concedieron el pasado año. En concreto éstas ascendieron a 1.900 por un valor de 120 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 16 por ciento respecto al año anterior. Lo que rompe la tendencia de bajada sin llegar aún, eso sí, a los niveles que se registraban en los años previos a la crisis, por lo que Muñoz aseguró que su optimismo es solo «moderado», aunque dijo creer que el próximo año los datos serán «aún mejores». El delegado detalló que la mayor parte de estos proyectos pertenecen a grandes inmobiliarias «por lo que se trata de proyectos de envergadura».
Otro de los aspectos que respaldan la recuperación del sector es que de la bolsa de viviendas que estaban pendientes el pasado mes de mayo de que los promotores pidieran licencia de obras se han solicitado un 16 por ciento del total, en los últimos nueve meses. Así, de los 5.700 pisos que se podían levantar en la ciudad, lo harán, por el momento, 900. «Una prueba más de que el sector sale del túnel y atisba ya la luz», señaló Muñoz.
En concreto, se trata, por ejemplo, de las 55 nuevas vividas previstas en las antiguas instalaciones de Tysa Ford en la carretera de Carmona; 79 vivienda en un nuevo residencial planeado entre la avenida de la Buhaira y la Enramadilla; 152 viviendas para un nuevo residencial en la avenida de Kansas City, 158 nuevas viviendas en el sector de Pineda o 62 viviendas en Los Pajaritos, donde recientemente se desbloqueaba la construcción de 62 viviendas sociales, en el marco de la sustitución de los edificios municipales de viviendas demolidos en 2014.
En su empeño por relatar todo lo que se mueve en el sector urbanístico, el delegado puso sobre la mesa también otro bloque de terrenos cuyo desarrollos podrían propiciar la construcción de 7.500 nuevas viviendas si los «movimientos en la tramitación» que se han producido en los últimos meses llegaran a buen puerto. En cualquier caso, se trata de casas que estarían listas a largo plazo, «no se espera que se construyan en 2017 o 2018 en ningún caso». En este paquete se incluyen las previstas en las Naves de San Luis –38 viviendas–, Avenida de Jerez –300–, Pítamo Sur –519–, la Fábrica de Vidrios –200–, Santa Bárbara –dos parcelas de 2.884 y de 3.036–, Hacienda del Rosario –2.000– o Cisneo Alto –415–, entre otras.
A todo esto sumó los proyectos que ya se han anunciado y que son posibles gracias a los acuerdos alcanzados con otras administra- ciones como los de Santa Justa o la zona Norte de la ciudad con el Gobierno de la Nación; las obras en Alcosa gracias al convenio con la Junta de Andalucía; o los alcanzados con el Puerto para la reordenación del Batán o la recuperación del puente de Alfonso XIII.
También aquellos que se desarrollan gracias a la iniciativa privada y otros que son proyectos «que llevaban años de estancamiento y que se han desbloqueado este mandato gracias a la inversión público/privada», como el mercado de la Puerta de la Carne, la Estación de Cádiz, el centro de la bicicleta de los Jardines de Murillo o un centro deportivo en los Bermejales.
Muñoz anunció, además, la reciente contratación de 17 técnicos que se han asignado al el área de Urbanismo y Medio Ambiente para hacer frente al «stock de cerca de 3.000 expedientes» están pendientes de resolución desde hace años a los que el Ayuntamiento prevé sumar «un paquete de simplificación» de los trámites.
Reglamento y mesas
El trabajo realizado por la comisión de seguimiento del PGOU se ha completado con una puesta en marcha del reglamento interno de funcionamiento de este órgano. Muñoz, que afeó al PP su ausencia en una reunión tan relevante», volvió a explicar que se organizarán mesas sectoriales con la idea de que «expertos y especialistas» en ámbitos como la vivienda, los paisajes urbanos o los espacios productivos, emitan «dictámenes y sugerencias» a incorporar al planeamiento urbano. Una decisión que ya fue anunciada hace nueve meses por el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, al finalizar la primera de las reuniones. Muñoz reiteró también que el «sentir de la comisión» es que el «modelo» de ciudad que está establecido en el PGOU de 2006 «sigue siendo válido», por lo que no es necesario elaborar un nuevo documento sino hacer modificaciones.