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Alumnos de un colegio de la localidad sevillana de Tomares en su primer día de clase. / Pepo Herrera
Mientras más alumnos hay en una clase, menos posibilidades tiene el profesorado de ofrecer un tratamiento personalizado y una adecuada atención a la diversidad, por eso el sindicato ANPE ha denunciado el incumplimiento de las ratios legalmente establecidas en centros docentes públicos andaluces, siendo éste «uno de los factores que más influyen en la calidad de un sistema educativo». En el caso de Sevilla, un 20 por ciento de los colegios de Primaria tiene más de 25 alumnos.
El Real Decreto 132/2010 de 12 de febrero establece en el ámbito estatal el número máximo de alumnos por unidad escolar en las enseñanzas de segundo ciclo de Educación Infantil, Educación Primaria y Secundaria (ESO), fijándolo en 25 para Infantil y Primaria, 30 para la ESO y 35 para el Bachillerato.
Sin embargo, la central sindical asegura en un informe –elaborado tras una encuesta telefónica a 733 centros docentes de la comunidad andaluza, 465 de Infantil y Primaria y 268 de ESO y Bachillerato– que en Sevilla hay un 18,87 por ciento de colegios de Primaria con entre 26 y 27 alumnos, un 1,53 por ciento tiene 28 o más y un 10,59 por ciento cuenta con 26 niños por clase o más y, además, algún alumno de integración.
Según ANPE, la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía «alardea, curso tras curso, de la inexistencia de un problema de desborde de estas ratios escolares, en contraste con las numerosas quejas de profesores, familias y alumnos en este sentido», de ahí que haya querido realizar este informe preguntándole directamente a los centros docentes, entrevistas que fueron realizadas el pasado mes de octubre.
En general, el sindicato subraya que el balance del estudio estadístico indica que las ratios se desbordan en un 9,75 por ciento de las unidades de Educación Infantil de los centros objeto de la muestra, un 13,82 por ciento en las de Educación Primaria, un 11,29 por ciento en las de Educación Secundaria Obligatoria y un 14,26 por ciento en las de Bachillerato.
Unos datos que son «especialmente preocupantes» en determinadas provincias y etapas educativas. En Almería el desborde alcanza porcentajes de un 14,73 por ciento en Infantil y un 22,40 por ciento en Primaria, mientras que en Málaga los porcentajes ascienden a un 21,97 por ciento en Infantil, un 21,82 por ciento en Primaria, un 24,42 por ciento en ESO y un 29,77 por ciento en Bachillerato.
Cuando los resultados del último informe PISA revelan los pobres resultados del alumnado andaluz con respecto al de la mayoría de comunidades autónomas, «queda patente una vez más que el sistema educativo de Andalucía necesita una mayor inversión económica por parte de un Gobierno autonómico que se encuentra entre los que menos porcentaje de sus presupuestos invierten en educación en el conjunto de España», critican desde el sindicato.
Sin ese esfuerzo inversor, que ANPE reclama y que debe reflejarse tanto en la dotación de más profesores como en la ampliación y mejora de las infraestructuras materiales, «mucho nos tememos que el Plan de Éxito Educativo 2016-2020 se convierta en el enésimo brindis al sol de nuestra Consejería de Educación. Mientras tanto, muchas aulas de centros públicos seguirán masificadas y el profesorado enfrentado a un sinfín de dificultades a la hora de atender eficazmente a su alumnado».