Un fármaco revolucionario en el abordaje de un tumor muy letal

El doctor Martín-Broto, del Virgen del Rocío, lidera un ensayo que amplía un año la supervivencia de pacientes con sarcomas avanzados de partes blandas

05 dic 2017 / 17:32 h - Actualizado: 06 dic 2017 / 00:08 h.
"Salud","Sanidad","Cáncer"
  • Lartruvo es el nombre del fármaco revolucionario. / El Correo
    Lartruvo es el nombre del fármaco revolucionario. / El Correo
  • El doctor Javier Martín-Broto. / El Correo
    El doctor Javier Martín-Broto. / El Correo

Afecta a apenas una de cada 20.000 personas en España y constituye el uno por ciento de todos los cánceres, pero la tasa de supervivencia a los cinco años de ser diagnosticada la enfermedad no alcanza el 15 por ciento cuando hay metástasis en fase avanzada. Es el sarcoma de partes blandas, un tipo de tumor tan raro como letal, de ahí que cualquier avance sea recibido como un gran hito.

En tal contexto cabe ponderar como «revolucionaria» la aparición de Olaratumab, un fármaco desarrollado por Lilly y comercializado con el nombre de Lartruvo que permitirá a pacientes con sarcomas extendidos vivir un año más. «Doce meses más de supervivencia suponen un paso muy importante, abre una expectativa de vida muy diferente», puntualiza Javier Martín-Broto, jefe del servicio de Oncología Médica del hospital Virgen del Rocío y presidente del Grupo Español de Investigación en Sarcomas (GEIS), que añade: «Por primera vez en los últimos 30 años, estamos en condiciones de ofrecer mayor supervivencia que la que ofrece el tratamiento que era estándar hasta ahora, y es que la combinación de doxorrubicina y olaratumab prolonga un año la mediana de supervivencia global respecto a la doxorrubicina sola».

Se trata del primer anticuerpo monoclonal aprobado para el tratamiento de pacientes con este tipo de tumores cuando estos no son susceptibles de abordaje con radioterapia o cirugía y que no hayan sido tratados previamente con doxorrubicina. «Es ideal para ese tipo de paciente nuevo que nos llega y en el que el sarcoma ha hecho anidaciones fuera de su sitio de origen», explica el doctor. O, lo que es lo mismo, con metástasis.

Los sarcomas de tejidos blandos son un grupo heterogéneo de más de 60 tumores poco frecuentes que afectan a los músculos, la grasa, los nervios o los vasos sanguíneos, entre otras partes blandas del organismo. Pueden aparecer en cualquier zona del cuerpo, si bien la mayoría se desarrolla en los brazos o las piernas.

Su forma de presentación más habitual es la aparición de un bulto o tumoración. La presencia de dolor es variable (no todos duelen) y, en algunos casos, pueden crecer rápidamente. La gran mayoría de estos sarcomas tienen un origen desconocido; no obstante, pueden asociarse a factores de riesgo como la administración de radioterapia –para tratar otros tumores como el de mama o el linfoma–, algunos síndromes genéticos y determinadas infecciones víricas (sida/VIH o herpes humano 8) y la inmunosupresión.

ENTRE LOS 40 Y LOS 60 AÑOS

En España, se estima que se diagnostican unos cinco casos por cada 100.000 habitantes al año. La edad media de aparición se sitúa entre los 40 y los 60 años, aunque puede manifestarse también en niños y adolescentes.

Olaratumab es el primer fármaco considerado como «gran innovación terapéutica» en este campo. De hecho, desde que se creara en 1995 la Agencia Europea del Medicamento, sólo se ha concedido una aprobación condicionada y acelerada como la de Olaratumab a otros tres medicamentos, lo que habla de la excepcionalidad de la novedad terapéutica de este fármaco. «Al designarlo como breakthrough (gran innovación terapéutica), las autoridades están considerando nuestro fármaco como una innovación clínicamente muy relevante para los pacientes con sarcoma avanzado de partes blandas», señala Alejo Cassinello, responsable del Área Médica de Oncología de Lilly España.

La autorización de comercialización condicionada significa que está supeditada a los resultados de un estudio clínico fase III que evalúe más datos de seguridad y eficacia del fármaco, y que confirme los datos positivos del ensayo fase II, que mostraron un aumento clínicamente relevante y estadísticamente significativo de la supervivencia global de 11,8 meses (una tasa de supervivencia de 14,7 meses en el brazo control en tratamiento solo con doxorrubicina frente a una tasa de supervivencia de 26,5 meses obtenidos con la combinación de olaratumab y doxorrubicina).

Martín-Broto añade que «con esta estrategia terapéutica en primera línea no sólo esperamos ganar cantidad de vida, sino calidad de vida en nuestros pacientes», que hasta la fecha «tenían unas expectativas no muy halagüeñas, 18 meses de mediana». De hecho, «muy pocos se curan, sólo algunos con pocas metástasis que se someten a quimioterapia y cirugía».

EN ANDALUCÍA AÚN HABRÁ QUE ESPERAR PARA QUE ESTÉ DISPONIBLE

El abordaje de los sarcomas de tejidos blandos requiere de un comité multidisciplinar que se reúne con frecuencia y trata un número de pacientes suficiente como para mantener una calidad asistencial óptima. En España existen cinco centros especializados o unidades de referencia autorizadas: dos de ellas en la Comunidad de Madrid, otras dos en Cataluña y una en Andalucía, en concreto en el Virgen del Rocío, cuyo equipo obtuvo tal condición el pasado mes de julio (ya era previamente CSUR de sarcoma infantil). Es más, es junto con los dos catalanes el único centro de excelencia a nivel europeo.

Todo lo cual no implica que los pacientes sevillanos vayan a poder acceder a este tratamiento enseguida: «Este fármaco no está disponible aún en Andalucía, donde siempre se pone freno a todo, pues ya está en el mercado. Esperemos utilizarlo en breve», indica Martín-Broto.