Sevilla se prepara para un invierno de altos vuelos. Tan elevados que el aeropuerto sevillano ha roto el techo de cristal que tenía marcado en los meses fríos, en los que no se prodigaba por las grandes afluencias de viajeros. Hasta ahora. El aeropuerto de San Pablo programa la que considera como la mejor temporada de invierno de su historia, con 2,6 millones de asientos, medio millón más que hace un año, en 15.500 vuelos repartidos en 52 destinos -59 aeropuertos-, 14 más que en el ejercicio 2016. Todo ello gracias a que se ha mantenido el número de rutas nacionales (18) y se han disparado las conexiones con el extranjero (34), gracias a la ofensiva de la compañía Ryanair, que aporta estos nuevos destinos para recuperar el liderazgo en San Pablo que le arrebató su rival Vueling.
Las compañías aéreas han ofertado para esta temporada de invierno –que empezó el pasado domingo y que se extiende hasta el último fin de semana de marzo– más de 2.623.000 asientos (incluidas salidas y llegadas) para cubrir la demanda prevista para esta estación. Eso supondría un incremento del 32,1 por ciento con el mismo periodo del año anterior, en el que se ofertaron 2.133.800 asientos. Estea subida responde, según informaron fuentes de Aena, el tirón del destino Sevilla en el mercado internacional, además de demostrar «la senda ascendente que venía marcando el doméstico».
Así, la cifra de plazas asignadas a conexiones con destinos del territorio nacional repunta un 26 por ciento, hasta superar 1.391.000. La oferta foránea está casi a la par que la doméstica en número de asientos (un 47 por ciento), al sumar 1.232.500, con una subida del 39,7 por ciento respecto a la pasada temporada invernal de 2016.
Los mercados con mayor provisión de asientos son Francia (casi 274.000), Italia (253.600) y Reino Unido (208.500), aunque destaca la línea directa con Polonia, que aporta dos destinos (Varsovia, que se estrenó ayer, y Cracovia) y 32.000 asientos hasta marzo. El aeropuerto destaca sobre todo esta incorporación, porque uno de los objetivos marcados en su hoja de ruta pasaba por enlazar sin escalas con países de Europa del Este.
Otras apuestas internacionales son Alemania, donde se duplica el número de plazas gracias a que, a las conexiones ya consolidadas a Munich, Berlín y Fráncfort, se incorporan las de Hamburgo, Colonia, Memmingen y Baden-Baden, por obra y gracia de la nueva estrategia de Ryanair en Sevilla. Holanda, que mantiene rutas –Eindhoven y Amsterdam– incrementa su oferta un 48 por ciento; Portugal, con Lisboa, crece un 38,3 por ciento, y Reino Unido lo hace con un 34,2 por ciento, impulsado gracias a la amplitud de miras, puesto que a Londres –con Stansted, Luton y Gatwick– se incorporan East Midlands y Mánchester.
Los ejemplos de Polonia, Alemania y Reino Unido han propiciado la marca histórica de destinos (52), superando holgadamente las 38 rutas de hace un año o las 33 de la temporada 2010-2011. Los estrenos internacionales se completan con Fez (que se suma a Marrakech en Marruecos) y las italianas Bari, Nápoles, Turín y Verona (que acompañan a las que ya había de Bolonia, Milán, Pisa y Roma) y la francesa Burdeos (con Marsella, París y Toulouse). Las rutas ya consolidadas de Bruselas (Bélgica), Basilea, Ginebra y Zúrich (Suiza) completan el escenario foráneo sevillano, que se reparte en 11 países.
Por su parte, las rutas nacionales se mantienen en número, pero no en lugares. Se caen Alicante y Menorca y se incorporan Valladolid y Vitoria, que se suman a A Coruña, Almería, Asturias, Barcelona, Bilbao, Gran Canaria, Fuerteventura, Ibiza, Lanzarote, Madrid, Palma de Mallorca, Santander, Santiago de Compostela, Tenerife Norte y Sur y Valencia.
NUEVA RUTA CON VARSOVIA
El Aeropuerto de Sevilla bautizó este martes la nueva ruta que Ryanair opera entre la ciudad hispalense y Varsovia (Polonia). Tal y como manda la tradición aeronáutica, dos camiones de bomberos han recibido bajo un arco de agua el vuelo inaugural, realizado por un Boeing 737-800 con cerca de 200 pasajeros a bordo. La conexión con Varsovia, que operará dos días a la semana, se ha convertido en una de las novedades más destacadas de la programación de invierno 2017-2018 en el Aeropuerto de Sevilla, que arrancó el pasado domingo y ofrecerá vuelos con 59 aeropuertos de 52 ciudades diferentes. Se trata de la primera vez que el aeropuerto ofrece una ruta regular directa con Polonia, a la que este miércoles se sumará otra con Cracovia, también operada por Ryanair.