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Desde aprender inglés a ir a la playa

De cómo ocupar el tiempo libre de los niños. Ayuntamientos, empresas especializadas, colegios y hasta hermandades organizan sus escuelas de verano para contribuir a la conciliación familiar

29 jun 2017 / 20:50 h - Actualizado: 29 jun 2017 / 20:56 h.
"Local","Sociedad","Educación","Qué hacer con los niños en verano"
  • Las escuelas de verano que impulsa el Ayuntamiento de Sevilla son gratuitas y combinan las actividades lúdicas, culturales y recreativas con otras deportivas, especialmente de carácter acuático. / Javier Díaz
    Las escuelas de verano que impulsa el Ayuntamiento de Sevilla son gratuitas y combinan las actividades lúdicas, culturales y recreativas con otras deportivas, especialmente de carácter acuático. / Javier Díaz
  • Despedida de los padres en las Colonias de Verano del Rocío de Triana. / A. Acedo
    Despedida de los padres en las Colonias de Verano del Rocío de Triana. / A. Acedo
  • Niños y monitores del Proyecto Búho, en el Círculo Mercantil. / El Correo
    Niños y monitores del Proyecto Búho, en el Círculo Mercantil. / El Correo
  • Muchos de los campus incluyen actividades deportivas de lo más variadas. / El Correo
    Muchos de los campus incluyen actividades deportivas de lo más variadas. / El Correo

Con la llegada del verano, siempre surge la misma pregunta en casa de los padres que trabajan: ¿qué hacer con los niños? Si el recurso de los abnegados abuelos o el de la familia del pueblo fallan, no quedará más remedio que buscar alternativas para ocupar su mucho tiempo libre. Basta bucear un rato por la red de redes para descubrir que la oferta de escuelas de verano y de actividades de ocio dirigidas a niños en Sevilla y provincia es sobreabundante. Desde campamentos para aprender inglés con profesores nativos hasta campus de verano con las más diversas modalidades deportivas pasando por una variada oferta de propuestas de educación, medio ambiente, ocio, aventuras y tiempo libre. En la mayoría de ellas se intenta combinar la instrucción con las actividades lúdicas. Aquí les mostramos un ramillete de alternativas para mantener a los niños ocupados, desde las más convencionales a las más refrescantes, y adaptables a todos los bolsillos.

Para aquellas familias con escasos recursos la mejor opción son las escuelas de verano municipales, un servicio que el Ayuntamiento de Sevilla pone en marcha de manera gratuita con el objetivo de contribuir a la conciliación familiar durante las vacaciones escolares. Entre esta semana y la que viene, dependiendo de cada distrito, arranca este servicio, que se prolongará en algunos casos hasta el inicio del curso escolar. Según informa el Ayuntamiento, hay algunos turnos en los que todavía quedan plazas libres. Las escuelas están dirigidas a niños de los ciclos educativos de Infantil y Primaria y en todas ellas se desarrollan actividades lúdicas, culturales, recreativas o deportivas, especialmente de carácter acuático, y muchas de ellas incluyen excursiones. Aunque en algunos distritos se reservan plazas para menores derivados de las Unidades de Trabajo Social (UTS), los criterios de asignación se basan, en términos generales, en que los niños estén empadronados en el correspondiente distrito o que sus padres o tutores tengan en él su domicilio laboral. Asimismo, se tiene en cuenta que ambos cónyuges, parejas de hecho o el responsable del menor en el caso de familias monoparentales trabajen, se encuentren en situación de desempleo o que uno de ellos tenga una discapacidad igual o superior al 50 por ciento. Dependiendo de cada distrito, estas escuelas suelen desarrollarse en las sedes de los centros cívicos, de distintos colegios públicos o de centros deportivos del entorno.

Sin salirnos de la capital, también son numerosos los colegios concertados que abren sus puertas en los meses estivales para organizar sus escuelas de verano. Uno de estos centros es el Sagrado Corazón, en el barrio de Nervión, que desde hace ya varios años organiza este servicio para niños de Infantil y Primaria. La escuela, atendida por profesores del centro, está en funcionamiento desde esta semana y hasta el 31 de julio y su mejor atractivo es la flexibilidad, ya que concede todo tipo de facilidades para que los padres pueda llevar a sus hijos el tiempo que necesiten, incluso días sueltos o una semana. «Las semanas no tienen que ser necesariamente de lunes a viernes, pueden ser de martes a martes, por ejemplo. Sabemos que en verano los horarios no son tan estrictos como el resto del año, y las empresas cambian las vacaciones de repente. Por tanto nos adaptamos a las necesidades de los padres», aseguran desde el cole. Las actividades dirigidas a los niños no difieren de las de otras escuelas de verano. «A primera hora, aprovechando que hace menos calor, juegos en el patio con pelotas, aros, etcétera. Luego entramos al aula (con aire acondicionado) para hacer las actividades que sus tutores les hayan puesto para el verano. Para eso el primer día que vengan deben traer el material que les hayan indicado. A continuación, es la hora del desayuno. Después en el mismo aula hacemos talleres de manualidades, juegos, canciones y vemos películas tanto en español como en inglés. Luego viene el momento más esperado, los juegos de agua, (pistolas, piscina hinchable). Por último nos vestimos y jugamos un ratito hasta que vengan a recogerlos». El horario de la escuela es de 9.00 a 14.00 o de 9.00 a 15.00, pero no incluye la comida. «Podemos darle de comer, pero con comida de casa, ya que al ser pocos niños no tenemos catering». En función del horario elegido, el precio de esta escuela durante las cinco semanas que está en funcionamiento oscila entre los 264 y los 312 euros, aunque también puede elegir la opción de una sola semana (en ese caso, el precio entre 55 y 65 euros) o incluso la de un día (entre 12 y 15 euros).

Muchos de estos campus o escuelas de verano están impulsados por empresas especializadas en el sector educativo. Es el caso del Proyecto Búho, un campamento urbano de verano que se desarrolla en el Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla durante el periodo vacacional. La empresa GDS Educación y Ocio es la que oferta este «proyecto con una metodología propia y más de diez años de experiencia». Se trata de un campamento semanal temático con piscina, que funciona desde este pasado lunes y hasta el 8 de septiembre, en el que cada semana se renueva la temática y se viven nuevas experiencias. En el mismo pueden participar niños entre tres y 12 años y cada campamento incluye una visita didáctica relacionada con la temática de la semana, de tal manera que un autobús escolar recogerá en la puerta a los participantes del campus para llevarnos a conocer algún lugar de Sevilla. La inscripción en el Proyecto Búho implica el pago de una matrícula inicial de 20 euros que incluye el seguro de responsabilidad civil y seguro individual de accidentes, así como la camiseta, gorra, acreditación y mochila. El precio de una semana, incluida la visita didáctica, oscila entre los 55 euros para los socios del Círculo Mercantil y los 71 para los familiares de socios.

Y aunque se trate más de una obra social que de un campamento veraniego, este reportaje estaría incompleto si no hiciéramos referencia a las Colonias de Verano que promueve desde hace más de 40 años la hermandad del Rocío de Triana en su casa de hermandad en la aldea almonteña de El Rocío.

El próximo 15 de julio comenzará de nuevo el sueño de casi 180 menores de entre tres y 14 años que durante quince días estarán cuidados por monitores de la hermandad. Niños «provenientes de una realidad poco favorable» a los que se les proporciona unas vacaciones inolvidables disfrutando de la playa y olvidando su situación social.