Morante, Manzanares y Roca Rey dan el pistoletazo de salida a la nueva temporada

Los toros de Núñez del Cuvillo completan el cartel de la lujosa apertura pascual

15 abr 2017 / 20:53 h - Actualizado: 15 abr 2017 / 21:17 h.
"Toros","Sevilla y los toros"
  • La plaza de la Real Maestranza vuelve a abrir sus puertas para el inicio de una nueva temporada taurina. / El Correo
    La plaza de la Real Maestranza vuelve a abrir sus puertas para el inicio de una nueva temporada taurina. / El Correo

El cartel lo habían dado hecho los propios aficionados y la empresa Pagés, comandada por Ramón Valencia, supo tomar el pulso a la calle combinando los nombres de Morante de la Puebla, José María Manzanares y Andrés Roca Rey para oficiar la lujosa apertura de la temporada maestrante. La guinda del pastel, que no estuvo exento de alguna dificultad en su cocción, la ponen los demandados toros de Núñez del Cuvillo, una de las ganaderías en mejor momento de la cabaña brava que lidiará un segundo encierro en la inminente Feria de Abril.

Los kilates del cartel, de alguna manera, también marcan el argumento de un ciclo ajustado en la cantidad y notable en la calidad en el que se trufa el protagonismo de las figuras consolidadas con el de los toreros emergentes. Morante, Manzanares y Roca Rey detentaban el derecho natural a figurar en la combinación de esta tarde. El de La Puebla, que ha dejado atrás todos los fantasmas que le alejaron de la plaza de la Maestranza durante dos tristes temporadas, ha renovado su papel de torero base del abono en simbiosis con la empresa Pagés, con la que no siempre estuvo a partir un piñón. Serán cuatro las tardes que finalmente cumpla el diestro cigarrero, que en 2017 ha renunciado a estar presente en la feria otoñal de San Miguel en un quinto compromiso. Morante está apuntado a la segunda de Cuvillo, a la de Garcigrande y la corrida de Matilla.

Manzanares también ha firmado cuatro. Tres en primavera y una cuarta en septiembre. El diestro alicantino vuelve a pisar la plaza de sus mejores y mayores triunfos después de recuperar su mejor versión en aquella faena reveladora de la Beneficencia madrileña que le convirtió en uno de los grandes intérpretes del año. El Manzana había pasado casi de puntillas por Sevilla en abril de 2017 pero retomó el pulso de la plaza que más le ha querido en el último San Miguel. La faena fue, con mucho, la mejor de toda la temporada maestrante y terminó de devolver el crédito a un torero que aterriza en Sevilla con vibraciones renovadas.

La tercera pata de este banco es el joven paladín peruano Andrés Roca Rey. El joven matador ha escogido esta fecha y esta plaza para reaparecer en ruedos españoles después de pasar por la plaza de Campo Pequenho de Lisboa. Antes se vio obligado a renunciar a la feria de Castellón y a un festival en Cieza. Ayer mismo tenía previsto torear en el ruedo francés de Arlés aunque la cita subrayada en rojo en su agenda es la de esta tarde en Sevilla que, de alguna manera, se convierte en reválida de su condición de gran figura en ciernes.

Hay que recordar que Roca Rey se vio obligado a cortar por lo sano después de pasar –y triunfar por todo lo alto– en las Fallas de Valencia. Lo había hecho infiltrado pero después no pudo más. La dolorosa lesión del hueso sacro que se produjo el 12 de marzo en Andújar se complicó más de lo esperado y le obligó a guardar reposo absoluto algunos días. El peruano, una de las sensaciones indiscutibles de la campaña, se anuncia tres tardes en la temporada sevillana. El joven matador está pagando un precio caro por su irreductible voluntad de triunfar por encima de cualquier circunstancia. Parece que no hay nada que le detenga...