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Varias jóvenes a favor de la independencia de Cataluña se manifiestan con una bandera secesionista a favor de la consulta del 1 de octubre. / Quique García (Efe) -
El catalán Miguel Rojano lleva en Utrera 17 años. / El Correo -
María Meca, catalana en Espartinas. / El Correo
La sensación es de cansancio y aburrimiento, aunque también tienen la percepción de que el veto a la consulta separatista tampoco es la solución para el problema catalán. Desde la situación se ve la situación con otra perspectiva que si se estuviera en Cataluña, y lejos de la tensión que se está viviendo estos días previos al 1 de octubre, varios catalanes que viven en Sevilla coinciden en que la situación es muy complicada aunque abogan por permitir una consulta.
Así lo expresó María Meca, una catalana de 31 años que vive en la localidad de Espartinas. Aunque lleva siete años en la provincia de Sevilla viaja todos los años de vacaciones a Barcelona, una ciudad en la que «el ambiente actual es de mucha tensión». Según dice, tanta información sobre el problema catalán «ya cansa demasiado», y cree que si el Gobierno dejara que se celebre la consulta «saldría un no» y ahí se terminaría todo el problema.
«Yo no soy independentista pero creo que si dejaran votar todo cambiaría porque los que hacen ruido son una minoría, así que el resultado de la votación sería el no. Es decir, no a la independencia de Cataluña», auguró la barcelonesa, que se muestra segura de que «la gran mayoría no quiere la independencia». «En mi familia, por ejemplo, nadie la quiere. Mi padre es catalán pero mi madre es andaluza. Allí hay pocos que sean catalanes catalanes, es decir, que hay muchos que tienen ascendencia de fuera de Cataluña y por eso creo que saldría el no».
Aunque algunas voces consideran que en la consulta debería celebrarse en toda España, dado que una hipotética independencia afecta a todo el país, Meca consideró que esta debe ceñirse únicamente al territorio catalán. Desde Espartinas, Meca también asegura con conocimiento de causa que quienes están ahora mismo en Cataluña también están muy cansados de la situación. «Mi madre está allí y dice que todo es ya muy pesado. Además, la gente mete en el mismo saco a quienes quieren que sí se celebre la consulta y sólo por eso ya dicen que es una persona independentista. De la misma manera, si eres contrario al referéndum sea por la razón que sea cualquier tonto que pasa por la calle ya te dice que eres una facha», finalizó la catalana.
De forma parecida a María Meca se expresó otro catalán residente en la provincia de Sevilla, en este caso en la localidad de Utrera. Miguel Rojano lleva 17 años viviendo en este pueblo, de dónde es su mujer. «Aquí veníamos de vacaciones todos los años y un año pues decidimos que nos veníamos a vivir aquí, que el estrés de una ciudad tan grande es demasiado», recordó Rojano.
El catalán también se mostró contrario a la independencia de Cataluña aunque sí cree que se debe permitir la consulta. «Tengo mucha relación con Cataluña porque tengo allí mucha familia y amigos y creo que si se vota saldría el no a la independencia».
Sobre la situación que se vive estos días en Cataluña, Rojano explicó que según le cuentan desde allí sus amigos y familiares la situación parece ahora mismo «como si fuera una dictadura» dado que hay «mucha Policía Nacional y Guardia Civil en las calles». «Está todo muy tenso actualmente. Creo que la independencia no es buena para España porque ahora mismo el país debe estar unido pero si dependiera de mí sí dejaría que se celebrara la votación. Estamos en una presunta democracia y ya que esta democracia no es muy democrática», lamentó el catalán