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El acto de ayer se celebró en una inmensa carpa instalada en el ruedo de la plaza de la Maestranza. / Manuel Gómez
La Universidad y el mundo de la Tauromaquia volvieron a darse la mano en la entrega de premios organizada por la Real Maestranza de Caballería de Sevilla para distinguir a los toreros triunfadores de la Feria de Abril de 2016, que precedieron a los alumnos universitarios con los mejores expedientes de la promoción correspondiente. El evento recuperó su fecha tradicional y se celebró en la carpa que se instala en el centro del ruedo de la plaza de toros bajo la presidencia del sillón vacío y vuelto que guarda la ausencia de Felipe VI, hermano mayor del Real Cuerpo.
El acto académico contó con la presencia del rector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro. En la mesa presidencial también se sentaron el ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, el delegado del gobierno en Andalucía, Antonio Sanz y el consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Rodríguez de Arellano además del teniente de Hermano Mayor de la Real Maestranza, Javier Benjumea que presidía por última vez este evento. En su última intervención como tal, el marqués de Puebla de Cazalla dio un cumplido repaso a la acción socio cultural y asistencial de la Maestranza, poniendo un especial énfasis en su acción benéfica. «Si hay alguna dedicación que ha permanecido inalterable a través de los siglos es, sin duda, esta», señaló Benjumea que también aludió a las reformas acometidas en la plaza de toros «que han mejorado su funcionalidad conservando la estética del edificio». El rector de la Hispalense, por su parte, hizo un recorrido por los principales hitos de la historia de la ciudad deteniéndose especialmente en el legado de la Exposición Universal de 1992, de la que se cumplen 25 años. Castro alabó «la Sevilla universal que reconoce el talento y le dedica un homenaje sincero» y calificó de «útil, justo y oportuno» el reconocimiento a la cultura taurina.
Dentro de los premiados destacó la presencia del ganadero Victorino Martín, ganador de las copas correspondientes a la mejor ganadería y el toro más completo, el célebre Cobradiezmos indultado por Manuel Escribano. Brilló la comparecencia del diestro jerezano Juan José Padilla, galardonado como triunfador de la Feria. Morante, por su parte, subió dos veces al estrado para recibir los premios correspondientes al autor de la mejor faena y toreo de capa.
También estuvieron presentes el rejoneador Diego Ventura y el diestro Pepe Moral que recibieron, respectivamente, los premios correspondientes al torero a caballo más destacado y la mejor estocada de la Feria. El banderillero Javier Ambel recogió el diploma que acredita la mejor actuación de subalterno. El de rehiletero más sobresaliente fue a parar a manos de Curro Javier. Sin salir del apartado de cuadrillas, el picador José Manuel Ruiz Chicharito recibió el diploma correspondiente al mejor varilarguero del ciclo.
Hubo más premiados: el joven novillero pacense Antonio Medina recibió el vestido el torear que regala la Real Maestranza al triunfador del ciclo veraniego de promoción de nuevos valores. Los siguientes clasificados, Jesús Muñoz y Juan Márquez recogieron los capotes de paseo y brega, donados también por cuerpo nobiliario.
Pero el protagonismo de los hombres de luces se complementaba con la larga lista de alumnos, con aplastante mayoría femenina, que recibieron anoche el reconocimiento del Real Cuerpo por su excelencia académica dando ese doble carácter taurino y universitario a un acto que constituye el mayor escaparate de la Maestranza en la ciudad de Sevilla.