Los novilleros sevillanos Pablo Aguado y Rafa Serna darán un sentido especial al próximo día del Corpus enfrentándose en un atractivo mano a mano en el que se lidiarán utreros de la vacada de El Parralejo, propiedad del empresario José Moya Sanabria. Será –con toda seguridad- el último festejo que torearán ambos en eSevilla antes de convertirse en matadores de toros –previsiblemente- en el propio coso del Baratillo. Será en la septembrina feria de San Miguel si no varían las quinielas que se han venido barajando insistentemente en los últimos días.
La alternativa de Rafa Serna se daba por hecha en el ciclo otoñal pero se había especulado que Aguado iba a doctorarse en abril. La mayoría de los carteles de la temporada ya se han filtrado y serán presentados de forma oficial el próximo martes. Será el momento de confirmar o desmentir estos rumores.
Aguado y Serna son los novilleros más destacados de la actual cantera sevillana. Ambos saben los que es cortar orejas en la plaza de la Maestranza aunque sus carreras, que partieron de un arranque común, han seguido caminos diferentes. Los dos jóvenes novilleros se destaparon a raíz de los dos festivales organizados por la Hermandad del Rocío de Triana que –de alguna manera- otorgaron espíritu de generación a este grupo de incipientes toreros.
De la misma forma, los dos supieron captar la atención del aficionado sevillano después de pasar por el ciclo de promoción de nuevos valores organizado en la plaza de la Maestranza en el verano de 2014. Serna logró abrir la Puerta del Príncipe en uno de los festejos clasificatorios pero fue Aguado el que se alzó como vencedor de aquel certamen en una apasionante final en la que se lidiaron, precisamente, erales de El Parralejo.
Posteriormente, la carrera de Rafa Serna se cimentó en una trascendental incursión mexicana que siguió, sin solución de continuidad a su debut con picadores en Huelva, el 3 de agosto de 2105. Después ha pisado con éxito las plazas de mayor responsabilidad aunque su carrera sufrió un indeseado frenazo después de sufrir una gravísima cornada en Madrid el pasado 12 de junio. A pesar del percance, Serna había logrado convencer a la cátedra venteña mostrándose a gran nivel con el novillo de Guadaíra que le hirió.
Pablo Aguado, que debutó con picadores el 8 de marzo de 2015 en Olivenza, también ha convencido a los escenarios de mayor responsabilidad, incluyendo los difíciles fielatos de Madrid, Bilbao y Sevilla, plaza en la que siempre ha dado la cara con un sentido de la responsabilidad que ha calado en el aficionado más exigente. El doctorado de ambos es un paso lógico que ha caído de pie en el ambiente taurino hispalense. Su enfrentamiento mano a mano el próximo 15 de junio, también.