Esas cosas que aún se hablan por el Arenal...
Un diario de tirada nacional ya lo da por hecho, incluyendo las declaraciones de su flamante apoderado, Manolo Lozano, que asegura que Morante habría firmado las dos corridas de toros de San Miguel -sí las dos- apuntándose a los hierros de los hermanos Matilla -que lidiará en primavera y otoño- y Juan Pedro Domecq, que quedaría desplazado de su sitio natural en el ciclo abrileño si es que no se apunta al doblete también. La empresa Pagés, nos consta, sigue trabajando para cambiar los planes iniciales del diestro cigarrero. Eso sí: se apresuró a firmar e inmortalizar sobre el famoso escritorio de Gallito ese acuerdo preliminar que ya ata la presencia de Morante a la temporada baratillera. De males, el menor. Serán dos tardes, cuatro o seis toros; lo que sea... pero aún es pronto para dar por hechas según qué cosas. Y la vida sigue. Los Pagés, ya es tradición, esperarán que pasen los Reyes Magos, para empezar a rellenar los casilleros de ese planning general que prepara Ramón Valencia. Mientras tanto, en algunas esquinas del Arenal ya se habla de la alternativa de Alfonso Cadaval, hijo del moranco César y afín al entorno de la empresa. Dicen que su gente madura la idea de contar con Pepe Luis Vázquez como padrino del chaval. Sería en uno de esos carteles septembrinos en los que, blanco y en botella, ejercería de testigo el ínclito Morante, espuela de Pepe Luis en su penúltima etapa en los ruedos. Otra cosa es que se ponga delante del toro que hoy sale en Sevilla, sea en abril o en San Miguel. Depende de él, de lo que haya en el campo y de lo que, ojo, permitieran viajar a los corrales maestrantes. Ah, y lo más importante: de que lo convenzan. Ya veremos.
Y El Juli podría apuntarse a los ‘victorinos’
Otro de los rumores que circulan a la velocidad del rayo por las redes sociales es la hipotética intención de El Juli -que cumple dos décadas de matador en 2018- de apuntarse a los victorinos en la próxima Feria de Abril. Algunos le han puesto como los trapos pero se le alaba el gusto en un momento oportuno y posiblemente necesario. Eso sí: el ganadero no admitirá componendas y el cartel natural debería incluir, sí o sí, los nombres de Ferrera y Escribano. Aunque tampoco se nos olvida que el madrileño nos debe una de Miura, una corrida a la que le no le faltan novios. La novedosa fórmula de reconvertir el Domingo de Farolillos (apagados) en la tabla de salvación del banquillo hispalense está animando al personal. El ejemplo de Escribano, renacido a la profesión con toros de Zahariche, o Pepe Moral, que volvió a tomar aire cuajando los mejores naturales de la Feria de Abril 2017, envenena los sueños de algunos matadores que saben que podría ser el último clavo ardiendo al que agarrarse. Nos mojamos: Alfonso Oliva Soto, que mostró en su pueblo estar puesto y dispuesto para volver a la palestra, podría ser uno de esos candidatos. Y hablando de la clausura dominical: ¿veremos lidiarse los miuras en sábado en un futuro próximo? El tiempo lo dirá. En la empresa no fue bien recibido el cambio del calendario ferial, que separa aún más la fiesta de Los Remedios del público del ciclo taurino.
Unas obras oportunas y muy necesarias
Son las que abrirán cuatro nuevas escaleras en los tendidos de Sol de la plaza de la Maestranza. Esas obras, que se solaparán con las de renovación de las cubiertas, deben ayudar a paliar los graves problemas de acceso y acomodo de los espectadores en los días de llenazo. En los últimos tiempos se había hecho habitual la imagen de centenares de espectadores puestos en pie -con las consiguientes protestas de los que ya estaban sentados- mientras salía y se lidiaba el primer y hasta el segundo toro. La Real Maestranza está consiguiendo, sin prisa pero sin pausa, ir adecuando a los tiempos su inigualable