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Momento de la cornada de Rafa Serna. / Las Ventas
Rafa Serna permanece estable pero dentro de la gravedad en la UVI del hospital San Francisco de Asís de Madrid, en el que ingresó anoche después de ser operado de urgencia en la enfermería de la plaza de toros de Las Ventas. El torero de la Costanilla había sufrido una cornada, calificada de “muy grave”, que le seccionó las venas safena y femoral del muslo derecho. Se trataba de la presentación del novillero sevillano en el ruedo capitalino. Serna había dejado un gran sabor de boca con sus dos astados y resultó alcanzado por el sexto al entrar a matar.
El joven novillero sevillano volvió a entrar en el quirófano al filo de la medianoche para ser intervenido de nuevo. Se trataba de resolver los problemas circulatorios que estaba produciendo un trombo en la arteria pedia del pie derecho que permanecía sin pulso además de restañar otros graves daños como la rotura de las venas femoral y safena, y la grave contusión que también padece en la arteria femoral y nervio crural. La nueva operación, dirigida por el doctor Luis Reparaz, se prolongó por espacio de más de tres horas y finalizó en torno a las tres y media de la madrugada. Serna fue conducido a la UVI del centro hospitalario madrileño en la que tendrá que permanecer no menos de 48 horas.
Según el doctor Máximo García Padrós, que operó de urgencia al novillero en la enfermería de la plaza, la lesión de Serna la ha calificado como muy grave “por la cantidad de destrozos vasculares que sufre y por el largo proceso de rehabilitación que tendrá que afrontar posteriormente”. “Según entró en el quirófano pudimos percatarnos enseguida, antes siquiera de abrir, que la cornada iba a ser muy importante. La bueno es que solo hay una trayectoria y los destrozos musculares son más bien escasos, pero claro, la rotura de la safena, de la femoral, las contusiones arteriales y la pérdida de pulso en el pie son lesiones de lo más severas”, explicó el cirujano jefe de la plaza de Las Ventas después de operar a Serna.
La primera intervención en la enfermería de la plaza consistió en estabilizar al novillero, cortarle la fuerte hemorragia que emanaba de su muslo y dejar todo controlado para ser sometido a un estudio más exhaustivo en el San Francisco de Asís, donde los cirujanos encargados de su tratamiento y evolución determinaron volver a operarle cuanto antes.
Rafael Serna, de 21 años, resultó cogido al entrar a matar del sexto novillo, de la ganadería de Guadaira, en el festejo celebrado ayer en Las Ventas. El utrero le cazó de lleno con un derrote seco y certero en el muslo derecho. La fuerte hemorragia que empezó a brotar por la taleguilla y la rapidez con la que las cuadrillas le llevaron a la enfermería ya hacía presagiar la extrema gravedad del percance, algo que se confirmó nada más hacerse oficial el parte oficial que describe una “cornada en tercio medio, cara interna del muslo derecho con rotura de venas safena y femoral, y contunde arteria femoral y nervio crural con ausencia de pulso en arteria pedia. También contornea el fémur y alcanza la cara externa del muslo, de pronóstico muy grave”. En el mismo festejo resultó herido grave el novillero Guillermo Valencia aunque su estado no reviste preocupación.