Rescoldos abrileños

El insoportable ‘tempo’ de los festejos maestrantes, el escaso público de algunas de las corridas estrella y la llegada de nuevas ofertas televisivas han ocupado los comentarios del mundillo después de apagarse los farolillos del Real de Los Gordales

16 may 2017 / 10:44 h - Actualizado: 16 may 2017 / 10:48 h.
"Observatorio taurino"
  • Uno de los comentarios habituales de la Feria ha sido la duración de las corridas en Sevilla. / Rafael Avilés
    Uno de los comentarios habituales de la Feria ha sido la duración de las corridas en Sevilla. / Rafael Avilés

De la duración de las corridas en Sevilla

El asunto venía agravándose en los últimos lustros pero ha tocado fondo, y no sabemos si techo, en la Feria 2017. Las corridas de toros celebradas en la plaza de Sevilla desbordan ampliamente las dos horas y media de duración y se acercan peligrosamente a la consagración de las tres horas. Las causas de este desesperante manierismo que eterniza todos los tiempos y confirma la apoteosis de la pausa son diversas. La lista se haría interminable: sumen la tardanza de los toreros en salir al ruedo; la lentitud exasperante de los alguaciles; la demora inexplicable del palco a la hora de sacar el pañuelo; la lejanía del picador; la simulación de los quites, precedidos de pausas absurdas; la consagración del burladero del 4 como otro tiempo más de la lidia; la preparación interminable de los pares de banderillas; la inmensidad del ruedo sevillano; los diez minutos obligatorios de faena, sea cual sea la condición del toro; las vueltas al ruedo a paso de procesión... Pueden añadir las que quieran. Seguro que encuentran más. Algunos quieren reducir el problema del espectáculo a limitar el número de descabellos o estocadas. Pero la brillantez futura de este arte, entre otros factores, le debería mucho a la recuperación del dinamismo perdido. Ese manierismo afecta por igual a todos los intervinientes del espectáculo y hasta al palco. Pero su revocación no hay que buscarla en esa reglamentación -nefasta para los tiempos muertos actuales- que seduce tanto a los que no se suelen enterar de nada. La reivindicación de cierta cultura taurina perdida beneficiaría los tiempos de la lidia. Se está llegando a lo insoportable.

Reflexiones en torno a los aforos de abril

La alarma se pulsó en dos festejos que, en otro tiempo muy cercano, habría sido de no ‘hay billetes’. Hablamos de la corrida del 28 de abril pero, sobre todo, de ese Martes de Farolillos que incluía la presencia rutilante de Morante que no fue capaz, por sí mismo, de tapar ese cemento que no podía cubrir ni un veterano con galones pero sin fuerza taquillera como Perera ni el más joven Jiménez, que aún lucha en las avanzadillas. Las espaldas del diestro de la Puebla no fueron suficientes para aguantar el desaguisado económico. El tema debió sorprender en los despachos de Adriano que ya andarían escocido con los tres cuartos escasos que lograron meter Ponce, Manzanares y Simón en la tarde lluviosa del viernes de preferia. Los precios actuales, ojo, tampoco ayudan. Eso tampoco se explicó bien en su momento y ha mosqueado al personal. Tela.

Nueva plataforma para televisar toros

Pues eso: vuelve a animarse el asunto catódico. Se anuncia una nueva plataforma televisiva que contará, pásmense, con la presencia estelar de Manolo Molés que nunca ha disimulado su malestar por su descabezamiento en el extinto Canal Plus. El nombre del invento es Taurocast. En la trastienda se recorta la figura Javier Tebas, hijo del presidente de la Liga de Fútbol. No podemos atisbar el recorrido del nuevo tinglado, que se moverá sobre los nuevos modelos digitales de consumo de deportes y series de televisión, aptos para cierto público juvenil pero muy alejados de las costumbres de los aficionados más veteranos. Le deseamos la mejor de las suertes aunque no sabemos si hay tarta para dos. Hugo Costa, que envió el motorista con la carta de despido a Moles, le ha seguido por la misma puerta en el actual canal de Teléfonica, heredero de los activos taurinos del famoso Plus. Su salida se ha unido a cierta marejada interna que se ha reflejado en fichajes estrella de ida y vuelta y en la discusión del papel del sustituto del propio Molés. Se trata del periodista vasco Chapu Apaolaza, que levantó algunos rumores por su ausencia en los primeros festejos abrileños. La verdad es que no le han dejado ni aterrizar. Tiempo al tiempo. No nos marchamos sin felicitar al emprendedor aficionado José María Ramos que suma un activo más a su cartera de iniciativas. Su ilusionante proyecto empresarial ‘Aprende de Toros’ ha merecido el premio ‘Juan López Sánchez’ que recogió la semana pasada en el Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla. Enhorabuena.