125 aniversario de El Correo de Andalucía

La mejor cantera siempre fue la de El Correo

Pionero en tantas cosas, fue el primer diario en romper la hegemonía de la Hoja del Lunes y su redacción se puso a trabajar los domingos para ser el primero en sacar un suplemento deportivo hace más de 40 años

En enero de 1984 salió el primer cuadernillo de Deportes de El Correo de Andalucía un lunes una semana después de que desapareciera su hermano, el Nueva Andalucía. Esperando la salida de rotativa del primer ejemplar, de derecha a izquierda, Francisco Pérez, Tomás Furest, Antonio Lorca, José Manuel Requena y Pepe Elías junto al personal de Talleres en las dependencias de la Avenida de la Prensa.

En enero de 1984 salió el primer cuadernillo de Deportes de El Correo de Andalucía un lunes una semana después de que desapareciera su hermano, el Nueva Andalucía. Esperando la salida de rotativa del primer ejemplar, de derecha a izquierda, Francisco Pérez, Tomás Furest, Antonio Lorca, José Manuel Requena y Pepe Elías junto al personal de Talleres en las dependencias de la Avenida de la Prensa. / El Correo

Pepe Elías

El Correo de Andalucía ha sido durante décadas una de las mejores canteras del periodismo sevillano y español, y en especial su sección de deportes, por la que han pasado un sinfín de nombres ilustres de la profesión. El Correo, fundado en el Siglo XIX (febrero de 1899) como otras instituciones emblemáticas de la ciudad de Sevilla -el Real Círculo de Labradores data de 1859 y el Círculo Mercantil e Industrial de 1868-, fue testigo en los albores el Siglo XX de las inscripciones como entidades deportivas del Sevilla FC y el Sevilla Balompié, nombre originario del hoy Real Betis Balompié, de cuyas fechas fundacionales exactas se han escrito ríos de tinta y aún hoy desatan acaloradas controversias.

En lo que al fútbol concierne, la primera edición de la Copa de España se disputó en Madrid en 1902, la Copa Sevilla empezó a jugarse en 1910, el Campeonato Regional Sur (Copa de Andalucía), en la campaña 1915/16 y el Campeonato de Liga, tanto en Primera como en Segunda división -categoría en la que comenzaron los dos clubes sevillanos- en la campaña 1928/29. De todos los avatares, gestas y fracasos de los centenarios clubes sevillanos de fútbol dieron cuenta desde el primer día las páginas de El Correo, que siempre tuvo hueco también para los deportes minoritarios y fue pionero de la información polideportiva -de la mano de Miguel Gallardo y su agencia Andalucía Deportiva, a finales de los años setenta-, glosando los éxitos logrados, entre otros, por el Patín Claret en hockey sobre patines, del Calasancio y el Pío XI o la Preu femenina en voleibol (campeonas de liga en la 1980/81), el nacimiento del Caja San Fernando (hoy Real Betis Baloncesto) o los triunfos de El Monte Ciencias de rugby (hoy Real Ciencias La Carloteña), brillante campeón de Liga y Copa a comienzos de los noventa con un equipo integrado en su práctica totalidad por jugadores sevillanos, muchos de ellos curtidos en el campo de Chapina, cuyas pistas de atletismo acogieron en 1987 una legendaria carrera entre Carl Lewis y Ben Johnson, que ganó en la foto finish este último, un año después campeón olímpico en Seúl’88 y posteriormente desposeído de la medalla por dopaje.

De todo ello dieron cuenta, por supuesto, las páginas de El Correo de Andalucía, así como del nacimiento de clubes emblemáticos como el Tenis Betis (1928), el Club Natación (1931) -ya tristemente desaparecido- o el Club Náutico (1952), viveros todos ellos de multitud de campeones mundiales y medallistas olímpicos, como Fernando Climent, plata en los JJOO de Los Angeles’84, y uno de los grandes impulsores de que la Regata Sevilla-Betis del Guadalquivir tenga hoy fama mundial.

Las olivetti de comienzos de los ochenta

Uno tuvo la ocasión de compartir olivetti en sus comienzos (año 1981) con Ignacio García Ferreira (Igarfe), un gallego de Tui afincado en Sevilla nacido durante la I Guerra Mundial (1914/18) que fue taquígrafo de Queipo de Llano y durante muchos años redactor de deportes en El Correo y la Hoja del Lunes, que ya vio al Betis ganar la Liga de 1935 y al Sevilla, la de 1946. Ignacio falleció a comienzos del Siglo XXI de un infarto en el autobús de línea 26, mientras se dirigía a recoger la paletilla que por entonces aún repartía la Asociación de la Prensa en Navidades entre sus miembros

El periodismo ha cambiado una barbaridad desde entonces. En aquella época las crónicas de los partidos de los domingos -se jugaban prácticamente todos a la misma hora, a las cinco de la tarde- no se podían leer en los periódicos hasta ¡¡los martes!!, pues el descanso dominical era sagrado y no se publicaban diarios los lunes, salvo La Hoja del Lunes, periódico que editaban las asociaciones provinciales de la prensa de España y que era el único periódico autorizado ese día: los demás diarios tenían que respetar el descanso dominical. El beneficio económico de la Hoja del Lunes era el principal ingreso de las Asociaciones de la Prensa de la época y buena parte del mismo era invertido en promociones inmobiliarias para los propios periodistas.

El Correo de Andalucía, pionero en tantas cosas, fue de los primeros en romper ese monopolio de la Hoja del Lunes, pues su hermano el vespertino Nueva Andalucía, fundado a finales de los años setenta por la misma compañía editorial (primero Católica y luego Sevillana) de El Correo decidió salir a los quioscos, a los mandos de Javier Smith, los lunes por la mañana, lo que supuso un soberano esfuerzo de toda la redacción para poner primero 24, luego 32 y finalmente hasta 40 páginas de información deportiva todos los lunes en la calle, cuando por esa época con cinco o seis iba la cosa bien despachada. El Nueva Andalucía, que tuvo ocho años de vida, entre 1976 y 1984 -cuando empezó a salir El Correo los lunes-, fue uno de los primeros diarios no deportivos de España en realizar un cuadernillo específico de deportes. Y de los primeros, junto a El Correo, en mandar habitualmente enviados especiales a los desplazamientos de los dos equipos de la ciudad -Sevilla y Betis- pues las televisiones privadas no irrumpieron hasta comienzos de los noventa y hasta entonces las crónicas de los partidos, sobre todo los de fuera, o se oían en la radio o se leían en la prensa escrita. Desde finales de setenta a la primera década del Siglo XXI siempre hubo, salvo rarísimas excepciones- un enviado especial de El Correo acompañando a Betis y Sevilla.

Antonio López (qepd), Lola Domínguez, Amelia Galocha, Fernando Gelán (qepd), María Jesús Pereira, Pepe Elías y Pepe Guzmán (qepd) en la redacción de El Correo de Andalucía en 1986.

Antonio López (qepd), Lola Domínguez, Amelia Galocha, Fernando Gelán (qepd), María Jesús Pereira, Pepe Elías y Pepe Guzmán (qepd) en la redacción de El Correo de Andalucía en 1986. / El Correo

La productiva cantera periodística de El Correo

En octubre de 1978 Tomás Furest cogió el relevo de Vicente Bru -fallecido a los 51 años- al frente de la sección de Deportes del Nueva Andalucía, junto a Francisco Pérez (luego durante varias décadas redactor jefe de deportes en Abc) y Guillermo Sánchez (que luego ha hecho carrera en Canal Sur), mientras que en El Correo era jefe de Deportes en aquellos años Manolo Rodríguez, quien antes había suplido a Pepe Álvarez y este a su vez al simpar Pepe Guzmán, que en El Correo hizo de todo y durante una época llevó la sección deportiva con su particularísimo estilo, que también pasó por las manos de Paco Esquivel durante un corto espacio de tiempo o de José Manuel Requena, con firmas en la sección como las de Antonio Somoza, Juan Palma, Carlos Lagares o el recientemente fallecido Fernando Gelán, que desde 1984 a 1986 fue el enviado especial habitual a los partidos de Sevilla y Betis hasta que las nuevas generaciones de entonces le dimos el relevo. Por esta redacción también estuvieron dando sus primeros pasos como periodistas caras luego muy conocidas como Mercedes Milá, en 1974 -antes de dar el salto a Don Balón y especializarse en Deportes-, o el onubense Jesús Hermida, que fuera muchos años corresponsal de TVE en Nueva York y también hizo sus pinitos en El Correo.

Quien les escribe llegó a El Correo en marzo de 1981 y tras unos meses saltando de sección en sección, en agosto de ese año Manolo Rodríguez pidió una tarde en la redacción algún voluntario para ir a hacer vestuarios al Trofeo Ciudad de Sevilla que se jugaba en el Villamarín -fue la última edición como cuadrangular en la primera y exitosa etapa- y… hasta junio de 2016 estuve en la sección de Deportes y durante varias décadas siguiendo a los equipos sevillanos en sus desplazamientos, aunque desde 1992 solo al Betis, pues para el Sevilla llegaron luego refuerzos de la talla de Jesús Gómez, Álvaro Ramírez -los dos han sido luego jefes de prensa (dircom se dice ahora) del Sevilla FC- o Paco Cepeda, uno de los fundadores de Muchodeporte.

Tras el verano de 1981 Manolo Rodríguez se fue de jefe de Deportes a la SER -donde había estado muchos años Joaquín Durán- y Tomás Furest cogió su puesto en El Correo -donde estuvo más de veinte años-, con José Manuel García -luego delegado de Marca y As en Andalucía- de lugarteniente y Juan Martín como encargado de todo el fútbol regional y Emilio González del polideportivo. En el Nueva Andalucía nos quedamos Paco Pérez, Victoriano Ruzigómez, Jacinto Vidarte -luego especialista en ciclismo y jefe de prensa de Alberto Contador- y servidor. En 1982 recibimos el premio de la sede sevillana del Comité Organizador del Mundial’82 por dar la mejor información deportiva del evento, seguramente porque, al ser un vespertino, teníamos más tiempo y material para preparar las páginas con los partidos del día anterior que el resto de la competencia, asfixiada por los horarios tardíos y la escasa tecnología de la época.

Por entonces aún no se estilaban los ordenadores -los primeros llegaron a mediados de los ochenta- y en el extra deportivo de los lunes participaban las redacciones de El Correo y el Nueva prácticamente al completo -por ahí andaban Francisco Rosell, muchos años director de El Mundo, o Ignacio Camacho, que lo fue de Abc, más tarde Rafael Camacho -portavoz de la Junta de Andalucía y director general de la RTVAFrancis Romacho, que fuera jefe de informativos de Canal Sur, o Enrique Cervera, luego también portavoz de la Junta con Manuel Chaves. El prolífico Paco Correal lo primero que escribió en El Correo a su llegada en 1977 fue un artículo sobre los intermediarios futbolísticos en la sección de deportes, inspirado en una letra de los Sabandeños. El mismo Álvaro Ybarra -después durante muchos años director de Abc- escribía sus marcajes a la estrella del equipo rival todos los lunes y por allí pasaron, casi todos y todas dando sus primeros pasos para dar el salto luego a otros medios, gente como Isamai Briones, Isabel Pedrote, Loures Lucio-Villegas, Milagros Jurado, Paco Gamero, Francisco Gil Chaparro, Paqui Godoy, Santiago Roldán, Francisco José Ortega, Javier Mérida -hoy su hijo Álex es el sostén de la sección deportiva de El Correo-, Marta Morillo, Jesús Gómez, Nacho Delgado, Jesús Alba, Rafael Pineda, Luis Alberto Lastra, Horacio Raya, Paco Cepeda, Miguel Ángel Chazarri, Olga Granado, Olivia Carvallar, Ana Trujillo, Mercedes Tristán, Álvaro Ramírez, Quico Canterla, Ángela Cañal, Javier Delgado o Andrea Álvarez, entre otros muchos. Todos ellos conocieron la vieja redacción de la Avenida de la Prensa en la Carretera Amarilla, donde los lunes de madrugada nos íbamos a casa con el periódico fresco bajo el brazo que salía de la rotativa. Ya con el traslado a la Cartuja en 2003, alejados del olor a tinta, la irrupción de internet, la digitalización y las sucesivas crisis que se fueron sucediendo y golpearon fuerte a la profesión, nada volvió a ser lo mismo, aunque El Correo siguió estando presente en los innumerables éxitos logrados por el deporte sevillano desde que el Real Betis volviera a levantar una Copa del Rey en 2005 (y otra en 2022) y el Sevilla FC se convirtiera en el Rey de la UEFA al ganar hasta siete títulos en estos años (entre 2006 y 2023) aparte de dos Copas del Rey, una Supercopa de Europa y otra de España, éxitos de los que ha seguido dando cuenta el decano de la prensa sevillana, ahora en versión digital y al mando de las nuevas generaciones, que manejan infinidad de herramientas y las más variadas tecnologías, aunque desconocen el fuerte aroma de la tinta y no vivieron entre el humo de las añejas y superpobladas redacciones.

Pepe Elias, enviado especial de El Correo, el directivo Manuel Morales, Luis Carlos Peris, el gerente del Betis, José Antonio González Flores, y Pedro Buenaventura, en el Plantío (Burgos) antes del ascenso del Betis el 8  de mayo de 1994.

Pepe Elias, enviado especial de El Correo, el directivo Manuel Morales, Luis Carlos Peris, el gerente del Betis, José Antonio González Flores, y Pedro Buenaventura, en el Plantío (Burgos) antes del ascenso del Betis el 8 de mayo de 1994. / El Correo