Comedias de amor, comedias de desamor

Parece obligatorio que a las chicas les guste el cine romántico más blandito y lacrimógeno. Y no parece que eso sea cierto, al menos, en todos lo casos. Una buena película de acción, bélica o fantástica, puede ser la opción deseada por una mujer.

15 feb 2016 / 08:03 h - Actualizado: 06 feb 2016 / 19:36 h.
"Cine - Aladar"
  • Richard Gere y Julia Roberts en Pretty Woman. / El Correo
    Richard Gere y Julia Roberts en Pretty Woman. / El Correo
  • Escena de la película Y, de repente, tú. / El Correo
    Escena de la película Y, de repente, tú. / El Correo

No, no he visto El diario de Noah. De hecho odio las películas románticas. Ni mi feminidad se ve dañada ni me siento menos mujer. Hablando de hechos: si hay un género capaz de voltear mi estómago hasta ponerlo boca abajo ese es, precisamente, el de la comedia romántica.

Queridas Jennifer López, Sandra Bullock y Jennifer Aniston, os hemos visto emparejadas con tantos actores que ya dudamos de vuestros verdaderos sentimientos. Haced como Julia (Roberts, quién sino), y protagonizad la comedia romántica de vuestra vida que os convierta en la auténtica Novia de América. Porque, lo siento chicas, pero Sucedió en Manhattan, La proposición o Y entonces llegó ella, jamás serán la Pretty Woman de la Roberts.

Algo así intentó la dulce Renée Zellweger pero al estilo británico. Apuntó alto y lo consiguió con ese estandarte del amor no correspondido que es El diario de Bridget Jones. Nunca sus amados Colin Firth y Hugh Grant estuvieron tan lejos de su corazón. ¡Ah! Ese es un buen ejemplo, porque también hay chicos románticos hasta la náusea.

Que nunca nos ha conquistado la sonrisa de Hugh Grant es un secreto a voces. Grant es el eterno partenaire en la ficción romántica y excepto puntuales excepciones parece encasillado en este género. A punto estuvo de pasarle lo mismo al bronceado Mathew McConaghey justo antes de reciclarse y convertirse en uno de los mejores actores de nuestro tiempo. ¿Cómo se consigue eso? Dejando la gomina y la sonrisa de galán en casa y pasándose a los vicios y la vida decadente. Pero solo en la ficción, ¿eh?

¿Quién ha logrado olvidar tu simpática melena rubia en Algo pasa con Mery? ¿Dónde está Cameron Díaz? ¿Y por qué intentaron convertirla en heroína de acción? No importa, allá donde veas una comedia romántica la encontrarás. Y es que lo más divertido es que al final todos estos actores van rotando de una cinta a otra y van coincidiendo entre sí: ¿Qué esperar cuando estás esperando?, Notting Hill, La boda de mi mejor amigo..., por nombrar unas cuantas.

Pero a veces, muy pocas veces, suena la campana y asistimos a historias de amor que en realidad son de exaltación del desamor. ¿Quién ha olvidado la frialdad de Zooey Deschanel en 500 días juntos? O, ¿dónde quedan los deseos de olvidar a su ex-amado de Kate Winslet en Olvídate de mí? Al final éstas son las mejores historias porque es donde vemos que los matices y las relaciones transcurren como la vida misma. Las distintas fases del amor quedan plasmadas para siempre, aunque sea en la ficción.

Qué bueno ver películas como Y de repente tú nominada a Mejor Película de Comedia en los últimos Globos de Oro. Ojalá hubiera más oportunidades para películas como ésta: Cintas actuales y realistas y por qué no, incluso canallas. Porque no todas las chicas soñamos que Richard Gere nos colme de regalos ni queremos convertirnos en princesas de la noche a la mañana. A veces, las chicas solo queremos pasarlo bien y, aunque parezca imposible, también disfrutamos con un par de explosiones.