«Entre la ciencia y la creencia»

Manuel Jesús Segado-Uceda publica ‘La España mística’ (Almuzara), un recorrido por los hechos paranormales acaecidos en conventos más fascinantes de nuestro país

05 may 2023 / 13:59 h - Actualizado: 05 may 2023 / 14:03 h.
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Decía el gran Azorín que «No hay pueblo español, chico o grande, que no encierre una enseñanza», y sin duda estaba en lo cierto. A poco que recorramos nuestra geografía podremos descubrir algún hito, personaje o leyenda que agite nuestros sentidos y nos impulse a conocer más y más. Buena muestra de ello es el libro La España Mística, del historiador del arte Manuel Jesús Segado-Uceda, cuya labor divulgativa abarca congresos, publicaciones y colaboraciones en medios de comunicación como Cadena SER, Canal Sur o Cuatro. Dicho ejercicio, publicado por la editorial Almuzara, aborda hechos paranormales que ocurrieron en algunos de nuestros conventos y que raramente trascendieron al público, lo que lo convierte en un ejercicio sugestivo ya desde la sinopsis. La confirmación de su mérito surge en las primeras páginas, donde Jesús Callejo —siempre elegante, siempre pedagógico— firma uno de esos prólogos por los que merece la pena adquirir un libro. En él no solo pondera el trabajo de Segado-Uceda, a quien define como «rastreador de misterios históricos y religiosos» sino que confiesa que muchos de los casos que cuenta «los desconocía». No en vano, si por algo destaca este novedoso ensayo es por conjugar a figuras ilustres de nuestro pasado, como Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz, con personajes de menor popularidad, como Sor Magdalena de la Cruz o el Padre Rejas.

«Entre la ciencia y la creencia»

De Fray Leopoldo a la Dama Azul

La obra arranca el 24 de junio de 1864 en Alpandeire, un municipio ubicado en la Serranía de la Ronda, que tendrá el privilegio de alumbrar al insigne Fray Leopoldo, uno de esos hombres cuya fama trasciende fronteras y épocas. Al inicio del capítulo, el autor relata cómo conoció al personaje —a través de una de las miles de estampas que se difunden cada año— y qué le llamó la atención de él. Seguidamente realiza una semblanza muy personal de su vida y su obra, deteniéndose en su ingreso en el convento de los Capuchinos Menores de Sevilla, su paso por la localidad de Antequera o su traslado definitivo a Granada. A partir de ahí, el relato cobra intensidad al referirse a los milagros, algo que Segado-Uceda aborda con rigor y amenidad. A este personaje le sucede Sor María Jesús de Ágreda, cuya extraordinaria historia le ha llevado a ser conocida como ‘La Dama Azul de los llanos’. Nacida en la localidad soriana de Ágreda el 2 de abril de 1602, esta humilde monja concepcionista, entre cuyos logros sobresale el haber mantenido correspondencia con el rey Felipe IV durante más de veinte años, es considerada por los católicos una de las más grandes místicas de la historia de la Iglesia católica, merced a sus supuestas bilocaciones a América, donde se dice que evangelizó a los pueblos indígenas sin abandonar su convento de la Orden de la Inmaculada Concepción. Como muchos otros, Manuel Jesús Segado-Uceda tuvo noticias de esta religiosa a partir de las investigaciones de Javier Sierra, el cual le movió a visitar el convento para conocer in situ su historia. En La España Mística, el jiennense aborda este episodio con pasión pero sin dejar de lado la objetividad, lo que lo convierte en uno de los logros del libro.

«Entre la ciencia y la creencia»

Además de los mencionados Teresa de Ahumada y Juan de Yepes —dos de los grandes místicos de nuestro país a los que el historiador dedica varias páginas—, la obra se interna en la trayectoria de Santa Ángela de la Cruz, una de las grandes devociones hispalenses, y de otros religiosos como los Hombres Santos de la Sierra Sur de Jaén o la beata Encarnación Espejo, cuyas historias «entre la ciencia y la creencia», según Callejo, merecen ser divulgadas. Para completar su trabajo, el autor de El Poder de lo Sagrado y Tumbas misteriosas incluye unos interesantes anexos donde menciona desde cuerpos incorruptos a curiosas reliquias, culminando en un epílogo que le devuelve a su patria chica, Arjonilla.

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