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David Bowie. / El Correo -
The Beatles. / El Correo -
Queen en concierto. / El Correo -
Led Zeppelin. / El Correo
Cuando eres joven (o al menos lo suficientemente joven) el lastre de desconocer a los clásicos siempre está ahí. Todo el mundo te dice que tienes que escuchar esto o lo otro y que si no conoces a determinado artista es que no sabes nada sobre música. Pero llega un día en el que la magia se desata y los clásicos dejan de serlo para convertirse en los tuyos. Al final, más que un lastre se convierten en himnos atemporales capaces de mover por dentro y por fuera a ti, a tu padre, a tu vecina y hasta a tu jefe. Pero quizá para entonces ya sea demasiado tarde.
No somos conscientes aún, pero probablemente ahora mismo estamos asistiendo a la creación de un clásico y no sepamos valorarlo. Y hay otros cuya época dorada ya pasó y nunca más podremos volver a disfrutar. ¿Quién le iba a decir a las jovencitas de los años sesenta que sus admirados melenudos de Liverpool algún día se separarían y que no tendría oportunidad de volver a verlos en directo jamás? Y además sería irreversible. La banda se separó hace más de cuatro décadas sí pero, con dos de sus componentes ya muertos, los queridos John Lennon y George Harrison, no nos queda más que tirar de hemeroteca. ¿Qué hubiera pasado de continuar vivos? ¿Seguirían en la carretera como hacen los no menos míticos Rolling Stone? ¿Seguirían siendo la leyenda que siempre han sido?
Pero no solo los Beatles, hay muchas, muchísimas bandas que a día de hoy seguimos lamentando su disolución y que, a menos que se alineen los planetas, nunca volverán. Algo así le pasó a Queen, aunque no exactamente. Oficialmente la banda nunca se llegó a disolver, pero qué duda cabe de que sin Freddie... nunca fue lo mismo. Aunque la banda ha seguido adelante a pesar de que su carismático vocalista falleciera en 1991 lo cierto es que el día en que Freddie Mercury nos dejó, todo cambió. En los últimos años son muchos los afortunados que han podido seguir disfrutando de los temas de la banda británica a través de la voz del cantante Adam Lambert, réplica perfecta de los tonos de Freddie. Justo lo contrario a lo que hicieron los componentes de Led Zeppelin: la muerte de su baterista John Bonham supuso un revés del que nunca supieron reponerse.
Volvamos al presente. Dos semanas han pasado desde que esa gran figura llamada David Bowie falleciera. Algunos aún aguardábamos la esperanza de verle cantar en nuestro país pero eso nunca ocurrió. Desde 1997 no pisaba España y al final, no lo volvió a hacer. Definitivamente no ha sido un buen mes de enero en el mundo de la música ya que tampoco podremos olvidar la pérdida del líder de The Eagles. Con el reciente fallecimiento de su vocalista Glenn Frey el pasado 18 de enero, se disipa también nuestra esperanza de ver de nuevo sobre las tablas a la legendaria banda.
Lo de Noel y Liam Gallagher es ya otra historia. ¿Cuánto daríamos por ver de nuevo a los hermanos tocando juntos sobre el escenario interpretando sus míticas canciones de Oasis? Pero eso no va a ocurrir, al menos de momento, ya que ambos deben saldar primero sus rencillas familiares. En 2009 el propio Noel sentenciaba el grupo ya no existe tras una disputa con su hermano. Así, lo que parecía uno más de los encontronazos entre ambos músicos, continúa siendo una de las disoluciones musicales más agrias de la historia. Siete años después la relación no ha mejorado y ambos triunfan con sus proyectos en solitario por lo que, y pese a los rumores, parece que un posible regreso es aún una idea remota.
Con los años ya no sabemos quién es más grande, si The Smiths o el propio Morrissey. Parece mentira que la icónica banda tan solo durara cinco años (de 1982 a 1987) porque sus canciones han quedado grabadas en nuestra mente para siempre. Desde el fin de la formación, Morrissey ha ido cosechando sus propios clásicos y ha envejecido como un grande entre los grandes. ¿Verle de nuevo con The Smiths? No parece que ni él ni la otra mitad, Johnny Marr, estén por la labor.
¿Y mientras tanto, qué ocurre en España? Pues que ni Mecano han regresado tras años de negociaciones, ni Héroes del Silencio se reunió en 2007 para quedarse y a Fito Cabrales le va muy bien en solitario desde que salió de Platero y tú. Casi tan bien como a Iván Ferreiro desde que ya no depende de Los Piratas o Coque Malla, ahora que no necesita a Los Ronaldos para girar. Ahí permanece Santiago Auserón bajo su alter ego Juan Perro, lejos de la Radio Futura que le vio nacer. Y si lo de Andrés Calamaro y Ariel Rot con Los Rodríguez ahí quedó, tampoco hubo mucho más suerte con Jaime Urrutia y Gabinete Caligari.
Quién sabe si el futuro nos devolverá a algunas bandas de nuestro lado. Podrían volver a ser héroes... al menos por un día.