Dashiell Hammett y la novela negra podrían parecer una misma cosa. No es ninguna herejía decir algo así. Este autor fue, además, el que desarrolló parte del género que se denomina hard boiled y que se convirtió en el territorio más violento de ese tipo de literatura.

Hammett escribió novelas excelentes. El halcón maltés es una de ellas. Y escribió un buen número de relatos breves soberbios, también. Uno de ellos es Matamoscas (Fly Paper) que se publicó, por primera vez, en la revista Black Mask en agosto de 1929. Fue el antepenúltimo relato que protagonizaba un detective del que no conocemos el nombre; solo sabemos que trabaja en la Agencia de Detectives Continental.

La editorial Libros del zorro rojo nos presenta una edición cuidadísima con ilustraciones de Hans Hillmann y un extracto del texto de Hammett muy extenso.

El trabajo del dibujante alemán es espléndido. Desde la primera página sabemos que nos enfrentamos a una película de cine negro, pero dibujo a dibujo. Acuarelas con intensos matices que aparecen con cada gris. Cada ilustración se acompaña por un fragmento muy breve del texto o aparece sola.

Sue Hambleton es una chica de familia pudiente que se arrima a los malos de pacotilla. Su padre contrata los servicios de la Agencia de Detectives Continental para que le sigan la pista. Pero la muchacha aparece muerta y, desde ese momento, todo se convierte en una cacería del asesino. Acción, violencia y giros argumentales de gran potencia. Hammett puro.

El tamaño del libro es un acierto puesto que el material gráfico es de tal calidad que sería una pena perder detalles por razones de edición. Y la elección del texto permite un ritmo narrativo de gran intensidad.

Aunque esta edición es de este año 2018, la original es de 1975. Podemos decir que eso que hoy se llama novela gráfica tuvo como inicio trabajos como este de Hans Hillmann. Leyendo Matamoscas el lector tenderá a diferenciar la novela gráfica con cualquier cómic sea del tipo que sea.

Calificación: Excelente.

Tipo de lectura: Divertida. Exigente con el detalle si se quiere exprimir al máximo cada página.

Tipo de lector: Amantes de la novela negra y de la gráfica.

Argumento: Lo profundo siempre es negro.

¿Dónde puede leerse?: Tomando un bourbon.