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La alcaldesa de Almonte.
En poco menos de mes y medio, el acuerdo a cuatro bandas que aupó a la Alcaldía de Almonte a Rocío del Mar Castellano (Mesa de Convergencia) cumplirá su primer año. Sin embargo, y pese al tiempo transcurrido, el pacto no fue ratificado por escrito. Es decir, se limita a un ‘pacto de caballeros’.
En un principio se dio por seguro que Mesa de Convergencia tendría el bastón de mando dos años y el resto pasaría a manos del PSOE.
Sin embargo, hay quien no lo ve así. Preguntado al respecto, el portavoz del PP en el Ayuntamiento almonteño, Manuel Ángel Fernández, considera que, llegado el momento, «habrá que sentarse y hablar».
De todos modos, añade que no es el momento de hablar de ello y que su prioridad es afrontar la situación de crisis que se deriva de la epidemia del coronavirus.
Precisamente, estos días corren rumores en la localidad que apuntan a que el PSOE almonteño estaría intranquilo ante la posibilidad de que Castellano pretendiese finalmente seguir toda la legislatura en el cargo.
No obstante, el portavoz socialista José Miguel Espina, señala al respecto que actualmente existe «cierta tranquilidad» y asegura no estar preocupado con vistas a la segunda mitad de la legislatura.
Mientras tanto, otros concejales de este gobierno de concentración consultados consideran que, una vez finalice el actual estado de alarma y se normalice la situación del país, debería de formalizarse la situación del pacto con el fin de garantizar la estabilidad de la Corporación y, por tanto, de la localidad.
Estos ediles, que prefieren no revelar su identidad, lamentan que en el tiempo transcurrido de legislatura en el equipo de Gobierno no haya unidad y culpan de ello a Mesa de Convergencia.
Según estas fuentes, la alcaldesa «parece emular» a Pedro Sánchez, que actúa sin hablar con su equipo, lo que está haciendo que exista una cada vez más importante malestar en algunas áreas.
Además, culpan de esta «falta de capacidad de diálogo» no solo a la regidora sino al número dos de Mesa de Convergencia, José María García, al que sitúan detrás de muchas de las grandes decisiones que adopta la Alcaldía. Dicho edil controla también las áreas de Hacienda y Recursos Humanos.
El Gobierno de concentración está integrado por 12 concejales que suman, además de la formación de la alcaldesa (ex afín a Podemos), PSOE, PP e Independientes por Huelva-Almonte.
En los pasados comicios locales, la opción más votada fue la que lideró el exsocialista Francisco Bella (Ilusiona), que logró hacerse con 9 concejales.