Estas son las claves de las nuevas subvenciones para autoconsumo solar en Andalucía

El pasado martes 25 de agosto, el Consejo de Ministros aprobó la convocatoria para Andalucía de la subvención a proyectos de energías renovables por un total de 124,3 Millones de euros, junto con 12 millones de euros para Extremadura. La convocatoria supone una apuesta incontestable por la recuperación económica basada en las energías renovables, y específicamente por la implantación en el tejido empresarial de proyectos de autoconsumo solar, que optarán a recibir, a fondo perdido, hasta el 30 por ciento de la inversión necesaria para su ejecución.

Según la resolución del Consejo de Ministros, será el Instituto para la Diversificación y Ahorro, el IDAE, el organismo que gestionará estas subvenciones. El IDAE se ha dado un plazo de 2 meses, hasta finales del próximo octubre, para publicar las bases definitivas de la convocatoria para Andalucía y Extremadura. A partir de ahí, se establece un plazo de 3 meses para presentar los proyectos que puedan optar a estas ayudas.

El aspecto fundamental de esta nueva partida de subvenciones es que se estructura como concurrencia competitiva, esto es, no todos los proyectos elegibles podrán recibir la subvención, sino que se establecerá un orden preferencial de los proyectos presentados y se otorgarán las subvenciones por orden de mejor puntuación hasta agotar los fondos. Entre los criterios de valoración a la hora de presentar un proyecto el IDAE valorará el criterio económico (mejor puntuación según sea menor el volumen solicitado de subvención respecto al volumen solicitado por el resto de proyectos); la viabilidad administrativa (más puntos según el mayor grado de madurez del proceso de legalización, es decir, diponer por ejemplo de la licencia de obras del ayuntamiento y la autorización previa en Industria); el criterio de zona geográfica (los proyectos ubicados en zonas de “transición justa” obtendrán mejor puntuación); y otras “externalidades positivas” (el carácter innovador del proyecto, el uso final especial de la energía o el favorecer la agrupación de consumidores, por ejemplo). Además, se considerará externalidad positiva que el proyecto favorezca el desarrollo industrial y empresarial de un determinado sector o área geográfica.

Aunque el detalle de distribución final de la puntuación de cada criterio se establecerá en cada convocatoria, se incide desde IDAE en el peso específico del segundo criterio expuesto: “la viabilidad administrativa”, que condiciona directamente la aplicación de los fondos en el corto-medio plazo. Para ello hay grupos empresariales andaluces dedicados a impulsar la “revolución solar” que se han especializado, como el Grupo Quantum. “Con esta subvención entendemos que se pretende relanzar la actividad en el tejido empresarial a través de una reducción de los costes energéticos. Con el autoconsumo fotovoltaico esa reducción se puede conseguir basándose en energía renovable, generando sostenibilidad ambiental y financiera a la vez”, explica Javier Becerra, director de desarrollo de negocio del Grupo Quantum.

La convocatoria del IDAE para estas subvenciones deberá ser publicada entre este mes de septiembre y octubre. A partir de de ahí que cualquier PYME o gran empresa que quiera dar el salto al autoconsumo solar dispondrán de 3 meses para presentar el proyecto. Un plazo relativamente corto para cualquier autorización de un proyecto de autoconsumo. Por eso los expertos aclaran que “será importante iniciar previamente la legalización y autorización administrativa de los proyectos, para conseguir la mejor calificación respecto al resto de proyectos en la en la concurrencia competitiva”, según indica Javier Becerra.

Algunas de las claves de esta línea de ayudas son la posibilidad de obtener un anticipo de hasta el 80% de la subvención de manera anticipada. Algo que facilitará a los beneficiarios acometer los proyectos preservando su capacidad de inversión y viabilizando la contratación de proveedores. No hay devolución posterior de ese anticipo, ya que la subvención, en todo caso, será a fondo perdido.

Otro aspecto a tener en cuenta es que se establece un rango de subvención que va de un mínimo del 20 por ciento hasta un 30 por ciento a fondo perdido del total del proyecto, según la calificación del proyecto. La información en detalle de la empresa beneficiaria y la memoria técnica del proyecto de generación renovable, que deberán presentarse para optar a las ayudas suponen unos costes de tramitación que también serán subvencionables.

“La competitividad alcanzada durante la última década por las energías renovables han cambiado el futuro y ya el presente de la generación y consumo de energía en todos los ámbitos. Dinamizar y acelerar su implantación mediante subvenciones como esta es muy importante tras décadas de subvenciones en el otro ámbito de la generación, el de las energías de origen fósil. Ante el avance del cambio climático, se hace cada vez más necesaria esa aceleración del cambio de modelo por parte de las administraciones”