Ecoperiodismo

No es sólo química, es biología

Entrevista a Verónica González Galán, investigadora colaboradora en el proyecto SeqCOVID, epidemiología genómica del SARS-CoV-2 en España.

Ricardo Gamaza RicardoGamaza /
18 jul 2021 / 04:23 h - Actualizado: 14 jul 2021 / 10:25 h.
"Ecoperiodismo"
  • No es sólo química, es biología

Veronica González Galán, médico especialista en Microbiología y Parasitología clínica, es investigadora colaboradora en el proyecto SeqCOVID, epidemiología genómica del SARS-CoV-2 en España. Responsable del laboratorio de referencia de epidemiología molecular de Mycobacterium tuberculosis para Andalucía occidental. Compagina su trabajo como facultativa en el HUVR como investigadora principal de varios proyectos centrados en la epidemiología molecular de la tuberculosis y las micobacterias no tuberculosas, secretaria del del grupo de estudio de micobacterias de la Sociedad española de Microbiología y Enfermedades infecciosas (GEIM-SEIMC) y recientemente nombrada secretaria del PIT de Tuberculosis de la sociedad española de neumología (SEPAR), sus trabajos se centran en emplear técnicas de biología molecular para conocer mejor la epidemiología de las infecciones en nuestro medio y en la actualidad está centrada en la implementación de la secuenciación masiva (WGS) para el mejor manejo de la tuberculosis en Sevilla.

-Últimamente nos hemos habituado a hablar de virus e infecciones que antes eran desconocidas para el gran público. Sin duda, la pandemia nos ha obligado a informarnos a la ciudadanía en estos asuntos. Pero también hay una gran desinformación que ha llevado a movimientos como el de los negacionistas. ¿Como microbióloga clínica, qué opinas del negacionista de la pandemia?

-En primer lugar, creo en la libertad de pensamiento, somos libres de pensar lo que creamos oportuno, pero en temas de salud pública pienso que es necesario informar desde la objetividad y la realidad que se ha vivido en nuestro país. Personalmente, invitaría a estas personas a pasar un turno de 24h en el laboratorio de Microbiología o con mis compañeros clínicos a pie de cama, para que vieran con sus propios ojos al virus, cara a cara.

-Sin duda un éxito palpable de la ciencia ha sido lograr vacunas contra este virus en un tiempo récord. ¿Las vacunas son seguras?

-El éxito de disponer de las vacunas no es casualidad, sino que se lo debemos a los investigadores que llevaban trabajando más de 10 años en la tecnología ARNm para combatir otros virus. En ciencia e investigación no se improvisa y gracias a estos grupos de investigación se ha podido dar respuesta a una necesidad global. En cuanto a la seguridad de las vacunas, están garantizadas por los organismos oficiales a nivel mundial y los últimos datos indican que las pautas completas de vacunación previenen las formas graves de la enfermedad, el ingreso hospitalario y la muerte por SARS-CoV-2. Hay que proteger a la población más vulnerable y no olvidar las medidas fundamentales como son el uso de la mascarilla, la distancia de seguridad y la higiene de manos.

-La historia de la Humanidad está llena de episodios de pandemias causadas por virus. ¿Qué ha hecho especial a esta pandemia del COVID?

-Desde mi punto de vista, lo que la ha hecho especial, es que nos ha puesto al límite como sociedad del bienestar. Como sanitaria, mi opinión es que se ha demostrado que los investigadores y todos los profesionales de la salud tenemos una capacidad de reacción y una generosidad infinita. A la semana de declararse los primeros casos en China ya estaba disponible de forma pública y en abierto la secuencia del virus, eso fue el punto de partida para poder hacer frente a la enfermedad y buscar soluciones.

-Como decíamos al principio, se nos han hecho comunes palabras que antes eran muy extrañas, como “listeriosis”. ¿Crees que crisis de seguridad alimentaria como la de la listeriosis pueden repetirse? ¿qué podríamos hacer para evitar que volvamos a tener una crisis como esa?

-Vivimos en un país con una legislación de seguridad alimentaria que nos protege frente a estos brotes de forma eficaz, la situación que se dio en Sevilla en el año 2019 tiene muchos matices, pero en general las cadenas de control alimentario en nuestro país son eficaces y los alimentos que salen al mercado lo hacen en condiciones óptimas de consumo.

-El virus del Nilo, que ha puesto en alerta a algunos municipios de la ribera del Guadalquivir es otra de estas enfermedades poco comunes que empiezan a ser comunes ¿por qué?

-En este tema creo que la presencia del vector, el mosquito del género Culex es el punto de partida. Una vez instalado en la zona, no debemos olvidar que en el ciclo de este virus intervienen otros factores fundamentales como son las aves, que actúan como reservorio del virus. Cuando un mosquito pica a un ave infectada, hay muchas probabilidades de que al chupar la sangre inyecte el virus al picar al próximo animal que puede ser otro ave, caballo o persona. Las condiciones climatológicas del 2020, la presencia del vector y el virus circulando en mamíferos junto con la situación de pandemia por SARS-CoV-2 dieron lugar a la “tormenta perfecta”, afortunadamente los dispositivos de control y vigilancia activa están funcionando y en lo que va de año a fecha de esta entrevista no se ha declarado ningún caso. Aun así, debemos de seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, para evitar las picaduras de estos insectos.

-¿El cambio climático y la globalización tienen algo que ver con esta situación?

-Probablemente, nuestra forma de relacionarnos ha cambiado en los últimos 50 años, antes coger un avión estaba al alcance de pocos, hoy viajamos alrededor del mundo sin apenas esfuerzo. En cuanto al cambio climático el hombre ha modificado los ecosistemas y esta situación puede ayudar a que se modifique el ciclo biológico de algunas especies. Como decía mi mentor, cuando empecé a realizar mis primeras investigaciones: “Ce n'est pas que de la chimie, c'est de la biologie” (“No es solo química, es biología”).