Juanmi evita un nuevo ridículo del Betis en Europa (2-1)

Un respetadísimo minuto de silencio precedió al Real Betis Balompié - NK Celje de la tercera jornada de Conference league en el Benito Villamarín.

Presentó Manuel Pellegrini un once en el que le dio la oportunidad de debutar en casa y en Europa a Mateo Flores, formando con Johnny en el doble pivote y saliendo de nuevo con dos puntas con Chimy y Bakambu. Con agonía y suerte logró vencer en el descuento por medio de Juanmi. Natan adelantó a los verdiblancos y Juanjo Nieto empató previamente. Ganó, que es lo que importa, pero dejando muy malas sensaciones, como si la competición no importase.

Batallador y sin arrugarse saltó el conjunto de Albert Riera, que le quitó el balón en los primeros compases a los de Manuel Pellegrini y la grada correspondió con apoyos a los suyos y algún murmullo sabiendo de la importancia de sumar tres puntos ante los eslovenos.

Espabilaron los verdiblancos primero con un balón medido de Fornals a Bakambu que no acertó en el remate y posteriormente con un pase en el área del castellonense que terminó en las botas de Assane, que hizo estirarse a Lovro Štubljar.

Replicó con un centrochut Ivan Brnić desde el costado izquierdo, que se perdió rozando el travesaño de Adrián.

El Betis, incapaz de generar peligro

Cogió el Betis la batuta pero sin generar peligro, con demasiadas imprecisiones en el tramo final de las jugadas, fruto en ocasiones de la ansiedad en abrir el marcador. Con algún susto que no fue a mayores del Celje se cumplió la media hora de partido en el Villamarín. La insistencia de Assane por la derecha y las ganas de Mateo, de lo más reseñable de los verdiblancos.

Acercándose el descanso fue Chimy Ávila quien probó con la zurda y después de hacerse hueco desde fuera a Štubljar, que desvió sin mayor complicación.

Rugió el Villamarín nuevamente como en los minutos iniciales pidiéndole algo más a los suyos tras no ser capaz de adelantarse al ordenado conjunto de Albert Riera.

A fogonazos, los de Pellegrini volvieron a gozar de una buena opción para abrir la lata en la mejor jugada coral del equipo. Recuperó Assane, filtró para Bakambu, raseó de tacón para Sabaly y el senegalés tocó en corto para Chimy, que la dejó pasar para que Fornals con todo a favor golpeara el esférico, pero el impacto no fue bueno y se marchó por alto.

El paso por vestuarios le sirvió al Betis para dar un paso al frente y lanzarse a por la victoria. Salvo un susto a la espalda de Sabaly que él mismo arregló, los de Pellegrini tuvieron por medio de Johnny, irregular por fases, haciendo dudar al joven meta esloveno.

La entrada de Abde y Vitor Roque da un pequeño impulso al Betis

Mateo, también probó fortuna sin acierto instantes antes de que lo llamara el de Santiago para ser sustituido por Abde y Bakambu por Vitor Roque. Un doble cambio que llevó a Fornals a retrasar su posición a la sala de máquinas junto al estadounidense.

El de Timóteo la tuvo nada más ingresar tras un centro fuerte a media altura de Sabaly, pero se topó con Štubljar.

Fue creciendo el grado de disconformidad del graderío del Benito Villamarín, sobre todo cuando Pellegrini llamó a filas a Juanmi, que entró por Chimy al igual que Altimira por Johnny, fatigado y perdido en ocasiones.

Con Abde intentando poner cordura a varios ataques deslavazados llegó el primero del Betis. Generó un córner el de Beni Melal que botó Fornals y en la segunda jugada fue Sabaly quien centró de primeras para que Natan entrara como un obús e inaugurara el marcador con un cabezazo soberbio. Cabezazo en el que tuvo que retirarse el de Itapecerica da Serra al impactar también con el zaguero esloveno. Al ser un choque en la testa, los de Pellegrini tuvieron una ventana extra de cambios al igual que el Celje.

La alegría duró escasos minutos en el Benito Villamarín. Trenzó una jugada el conjunto de Albert Riera y Svit Sešlar centró a Juanjo Nieto para rematar en escorzo y batir a Adrián. Diego Llorente se quedó anclado y rompió el fuera de juego.

Pudo incluso hacer más dura la noche a los béticos el equipo esloveno. Matko se quedó sólo ante el sevillano, pero no acertó en el uno contra uno y la echó fuera.

La agonía se apoderó de los de Pellegrini en un nuevo bochornoso partido en Europa, dando muestras de lo poco que importa la competición. Sin ideas, con presión a destiempo e incluso con falta de amor propio. Con todo eso, y terminó ganando.

Assane Diao, el que más coraje demostró sobre el verde, le sirvió un balón a Juanmi para que corriera y encarara a Štubljar. Se le hizo de noche al de Coín, pero con la ayuda del central esloveno el balón terminó dentro de la portería.

Triunfo sobre la bocina para dar un paso importante y necesario en Conference League en un encuentro que se había puesto muy delicado tras el empate de Juanjo Nieto. Goles como remedio a malas sensaciones. A pensar en el Celta antes del parón para culminar 23 días sin conocer la derrota.