Fue localizado en una zona cercana a una de las cuevas en la zona de la playa de Alegrín, en Lugo.
El supremo confirma la condena al ganadero que inoculó cepas vivas de brucelosis a los animales para cobrar la indemnización por el sacrificio.
El cuerpo fue hallado a las 22,50 horas y al lugar se desplazaron agentes de la Policía Local, de la Policía Nacional, así como los bomberos.
Un particular lo encontró en la playa de A Caosa, en Cervo. La Guardia Civil investiga las circunstancias del suceso.
Este mediodía regresó al piso de la víctima, trasladado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía, para participar en la reconstrucción de los hechos.
Su madre, Ana Sandamil, está sentada en el banquillo como única acusada del crimen de la pequeña, cuando esta tenía 7 años.