Allí instalará su despacho de jefe de la oposición y su intención es asistir todo lo que su agenda permita a las sesiones plenarias, según fuentes de su equipo.
Con el argumento de la crisis económica y la falta de un presupuesto. Unos comicios que también supondrán el primer gran test para Alberto Núñez Feijóo.
El 23 de Febrero de 1981, el Teniente Coronel Tejero entraba en el Congreso de los Diputados con la pistola en la mano pidiendo cortésmente que sus señorías tomasen asiento. «Se sienten, coño», ya saben....
El consejero de Hacienda se muestra convencido de que «alargarlo no creo que sea bueno para nadie, ni en lo político, ni en la imagen, ni en lo personal».
Pablo Casado no ha tenido más remedio que dimitir (no oficialmente aunque convocar un congreso extraordinario ya es, de facto, una dimisión en la trinchera) y así pasa a ser ejemplo de lo que puede ocurrir...
El presidente partirá para Madrid una vez termine la sesión de control. Casado, por su parte, se muestra afligido por el «injusto» trato recibido. Sus colaboradores consideran que es una «vergüenza» el «linchamiento» al que se le ha sometido.
«Yo no le voy a escupir», ha llegado a decir achacando falta de «humanidad» a quienes se comportan de esa manera con quien todavía es el presidente del PP.
En su cúpula, sólo le quedan Pablo Montesinos, Ana Beltrán, Antonio González Terol y el secretario general, Teodoro García Egea, al que el presidente del PP no ha dejado caer pese a que se lo han exigido.
La culpa fue del chá, chá, chá. Aquí no ha pasado nada y lo que queda por venir es poesía pura con el traidor, con el que se atreve a decir que robar está feo, con el que anuncia que la ética y la estética...