José Campanario: «Un buen escritor tiene que ser un buen lector»

José Campanario no sabe cuantificar los libros que ha leído a lo largo de su vida. Pero si puede afirmar que, a través de esa afición, ha adquirido las habilidades para escribir hasta el momento siete libros. Los dos últimos han sido presentados este martes en ‘La Estación de las Letras’, la octava edición de la feria del libro de La Rinconada.

La pasión por la historia y por Sevilla recorren su creación. De forma más o menos patente, dan cuerpo y temática a sus obras, ya sean como novela histórica, relato corto o incluso como cuentos infantiles o teatro, géneros en los que también se ha aventurado. Y vertebran sin equívoco ‘Siglo XI. La estirpe de Attaf’ y ‘12+1 relatos’, los libros presentados en el centro cívico Los Silos.

Acercamiento a Al-Mutamid como persona más que como rey y literato

El primero de ellos “alumbra la penumbra en la historia de Andalucía en general y de Sevilla en particular, donde se centra la narración”, siguiendo la figura de Al-Mutamid. Una novela histórica con un formato libre, “muy a mi aire y a mi forma”, y que determinan el característico estilo del autor.

Guiado por Rocío Parrilla, conductora del acto y editora de ‘Andalucía al Día’, medio digital en el que Campanario colabora, el escritor explicó que el libro relata “la parte que nunca se ha escrito en ningún sitio” sobre el citado gobernante de Al-Andalus, del que le interesa “sacar la parte humana, no la histórica como rey y literato”.

El recorrido por el Reino de Isbilia, entre los años 1017 a 1095 de nuestra era, da pie a mostrar la evolución del rey poeta, con otra visión narrada desde el rigor y la ausencia de implicación en los hechos, pero asimilando al escritor con el rey. Porque para “saber interpretar la historia” para contarla, la técnica de Campanario es “identificarme y meterme en el personaje para que suene que es real. Hay que vivir en la piel del protagonista para poder escribir de él”. Un personaje que además asegura que no buscó, pero que encontró y le despertó la curiosidad.

Un compendio de caprichos en forma de relatos

La pandemia impidió la celebración en 2020 de la feria del libro de La Rinconada, evento en el que tendría que haberse presentado esta novela. Es por ello que ha compartido espacio en este segundo acto dedicado a los creadores locales en ‘La Estación de las letras’. Una feria del libro innovadora y única en Andalucía, que reúne a lo largo de tres meses medio centenar de actividades para el fomento de la literatura, la lectura y los autores, así como las artes escénicas, con el festival Esprim, Escenarios de Primavera.

La segunda parte del acto se dedicó a ‘12+1 relatos’. Un compendio de “caprichos”, ideas que plasma sin profundizar más. Una lectura más rápida y asequible “que rompe la monotonía” de los libros de gran extensión “para la falta de costumbre de leer”.

Los trece relatos abordan leyendas, fantasías o hechos y situaciones que no tienen explicación. Un acercamiento a la cultura popular más que a la experiencia personal, que recogen parte de la historia – de nuevo vertebrando su obra – que, de otra forma, si no se escribiesen, se perderían.

Relatos sin conexión entre ellos que en sí mismos tienen principio y final. Desde ‘La cruz doble’, ambientada en el cortijo Cartuja de La Rinconada a ‘El Monje’, basado en las ruinas de un convento de Carmona, o ‘El infante Don Carlos’, en la iglesia del Salvador de Sevilla, hay un entorno geográfico asequible y cercano que dan solvencia a sus obras con la posibilidad de poder visitarlos y conocerlos.

Escrito vocacional desde la estabilidad personal

Además de estos dos libros, el autor ha publicado ‘Nino, una vida en el recuerdo’ (2013) y el cuento infantil ‘El soplador de vidrio’ (2015). En este mismo año también vio la luz su primera novela histórica, ‘La herencia de la sanadora’, la vida de una mujer con conocimientos y práctica de medicina en la Sevilla de finales del XVI bajo el control de la Santa Inquisición. En 2017 publicó ‘La dos llaves’, cuyo protagonista es Samuel Leví, tesorero de Pedro I el Cruel. De nuevo historia y Sevilla, en una novela ambientada en el siglo XIV. ‘Un personaje y su circunstancia’, publicada en 2018, es la primera obra de teatro escrita por Campanario.

El escritor asegura tener “la suerte de escribir lo que me gusta”. Una vocación que siempre había tenido – aunque “he roto muchas cosas por vergüenza” de lo escrito en la juventud – y que la estabilidad emocional, familiar y laboral le ha permitido desarrollar. Reconoce tener libros frustrados, que ha empezado y no ha continuado, y otro tema histórico, relacionado con Sevilla, que ya baraja como posible siguiente novela.

Destaca que “la interacción con el lector me satisface y me anima a seguir escribiendo. Es entenderte con la otra persona, te enriquece su visión”. En ese sentido, explica que “el escritor para escribir bien tiene que pasar hambre”, entendida como “hambre de reconocimiento y de agradecimiento social”. Mantiene que “escribir dignifica” y, por encima de todo, que “si escribes es porque lees. Un buen escritor tiene que ser un buen lector”.